Las mejores y peores dietas del 2015

Los expertos sostienen que es buena la propuesta de comer “como un cavernícola”: mucha carne y plantas silvestres, sin harinas ni alimentos procesados. Pero es algo bastante difícil de lograr en estos tiempos modernos.

Permite comer en forma ilimitada 100 alimentos que figuran en una lista, todos son altos en proteínas y bajos en hidratos de carbono. Se la considera tan restrictiva, llena de reglas y sin evidencia de que sea efectiva, que uno de los expertos la calificó como “una idiotez". No es apta en casos de gota, diabetes, enfermedades renales y cardiovasculares.

Si quieres romper una dieta en poco tiempo ésta sería tu opción, ya que es casi imposible de seguir. También es poco segura y está entre las tres con peor contenido nutricional. Se basa en alimentos crudos, no ofrece mucha variedad y puede limitar la ingesta de algunos nutrientes.

Su única ventaja es que se pierde peso a corto plazo. Todas sus demás calificaciones resultaron bajas, no es tan segura ni fácil de seguir y es deficiente en nutrientes. Permite comer alimentos altos en proteínas y grasas saturadas como huevos, carne, jamón, tocino, salchichas, mariscos, quesos, aderezos y es baja en hidratos de carbono.

Se come normalmente durante 5 días de la semana y los otros 2 días se restringen las calorías al 25% (500 en mujeres, 600 en hombres). En esos días aconseja elegir alimentos altos en proteínas. Según los expertos, no se indica qué elegir los días “libres”, y puede llevar a comer mucho o mal.

Los expertos no se mostraron muy convencidos con el programa del entrenador de celebridades de Harley Pasternak. Es difícil de seguir, poco saludable y de dudosa eficacia en el largo plazo. Propone acelerar el metabolismo con un plan de 15 días en los que se busca bajar de peso y eliminar la grasa.

Los expertos la consideraron difícil de seguir y de mantener en el largo plazo. Es pobre desde el punto de vista nutricional y aporta pocos beneficios para mejorar la salud del corazón y controlar o evitar la diabetes. Sus premisas son ridículas y no promueven la pérdida de peso a largo plazo ni mejorar los hábitos alimenticios. Fue ideada por la doctora Natasha Turner y promete restaurar el metabolismo para sentirse mejor y más joven.

Propone elegir un 80 % de alimentos alcalinos (verduras frescas, miel, soya) y un 20 % de alimentos ácidos (huevos, pescado, leche de vaca). No se tienen en cuenta las calorías, no es eficaz para bajar de peso y es difícil de seguir. Los expertos la consideran ineficaz en casos de diabetes o deficiencias cardíacas, y sin suficiente fundamento científico.

Es efectiva para bajar de peso a corto plazo y bastante completa desde el punto de vista nutricional. Propone 6 comidas al día, 5 de ellas a base de productos Medifast, de 100 calorías que pueden ser un batido, una barra o una sopa, por ejemplo. La sexta comida se puede consumir en cualquier momento y debe incluir carne magra y vegetales sin almidón.

Tuvo una baja calificación porque según los expertos no es tan fácil de seguir y no presentó muchos beneficios en la prevención de enfermedades. Al ser baja en hidratos de carbono puede producir algunos efectos secundarios como dolor de cabeza, mareos, debilidad y pérdida de líquidos, entre otros.

Quedó entre las peores calificadas a pesar de estar avalada por algunos científicos. Consideraron que es poco eficaz para perder peso a largo plazo, tiene baja adherencia y no es muy efectiva en la prevención de enfermedades del corazón. Entre sus puntos fuertes, tiene buen balance nutricional, ayuda a la salud y distingue entre carbohidratos “buenos” y “malos”.

Similar a la dieta Atkins pero diferente al incluir proteínas de origen vegetal. Se consume frutas, verduras y de manera limitada avena y cebada. Incluye grasas como aceite de canola y oliva, aguacate y nueces. Su defecto es que no es fácil de seguir, y su mejor calificación es la pérdida de peso a corto plazo.

Quedo con una baja calificación porque según los expertos no es tan fácil de seguir y no presentó muchos beneficios en la prevención de enfermedades. Al ser baja en hidratos de carbono puede producir algunos efectos secundarios como dolor de cabeza, mareos, debilidad y pérdida de líquidos, entre otros.

Para perder peso a largo plazo resulta muy restrictiva y es de las de menor puntuación en adherencia, que es la posibilidad de seguir una dieta sin abandonarla. Más que una dieta es un estilo de vida donde no se consumen alimentos de origen animal y por tanto tiene carencias nutricionales.

Aunque con calificaciones elevadas en pérdida de peso a corto plazo, es un plan bajo en hidratos de carbono y puede provocar efectos secundarios como mareos, fatiga y náuseas. Al bajar rápido de peso se puede perder masa muscular en vez de grasa. No mostró mucha capacidad en la prevención de enfermedades como diabetes y del corazón.

Con una calificación muy alta en la prevención de diabetes, se podría pensar en esta dieta como alternativa. Pero no es fácil de seguir por ser muy restrictiva; se basa en el consumo de frutas, verduras, granos enteros, nueces y semillas. Es baja en sodio, grasas y azúcares.

Es una dieta segura pero no tan eficaz en la pérdida de peso a largo plazo. Esto pone en duda la afirmación de que promete una pérdida de 12 libras (unos 6 kg) de grasa abdominal en las dos semanas que dura la dieta. También asegura que se puede conseguir una "tabla de lavar" en seis semanas. Su plan consta de seis comidas envasadas al día y está en contra del conteo de calorías.

Sus calificaciones más bajas fueron en la pérdida de peso a largo plazo y prevención de diabetes y enfermedades del corazón. Es más fácil de seguir que otras dietas y al parecer tiene pocas deficiencias nutricionales. Es un plan de comida preparada, que resulta muy cómodo.. pero caro.

Es eficaz para perder peso en el corto plazo, bien equilibrada desde el punto de vista nutricional, segura y saludable. Pero según los expertos, las comidas de reemplazo que propone el plan son costosas y deberían consumirse en forma excepcional.

Asegura una baja de peso moderada a corto plazo, es segura y de buena variedad nutricional. Consta de un plan básico de 1,600 calorías diarias con una dieta estilo mediterráneo e incluye verduras, frutas, granos enteros, semillas y carnes magras.

Propone un plan de comidas nutritivas pero bajas en calorías que optimizan el funcionamiento del metabolismo y un plan regular de ejercicios. Los expertos creen que si bien no es una dieta novedosa, es sensata y sugiere una buena forma de perder peso y mantenerse. En el libro “La solución Spark” sugiere una dieta para dos semanas, ya que sugiere que toma ese tiempo crear buenos hábitos de alimentación.

Su propuesta es razonable, eficaz para perder peso y adecuada para personas diabéticas. Está bien formulada y es fácil de seguir pero no es tan efectiva como las otras como preventiva de enfermedades cardiovasculares. Propone comer 1,200 calorías al día en seis pequeñas comidas, y en tres de ellas se pueden consumir productos de reemplazo. El resto de la jornada solo se elige comida saludable, sin necesidad de contar calorías.

Es una dieta segura. Sus calificaciones más bajas fueron en cuanto a pérdida de peso a corto y largo plazo. Refleja la creencia de su creador, el Dr. Weil, que asegura que ciertos alimentos combaten la inflamación sistémica. Pero hace falta evidencia científica que lo compruebe.

Su mejor calificación fue la de seguridad. Pero con el estilo de vida actual es difícil de seguir, y por eso obtuvo un puntaje más bajo. Hay varios tipos de dietas vegetarianas, la estricta no incluye alimentos de animales en ninguna forma. Los lactovegetarianos incluyen lácteos y los ovolactovegetarianos consumen lácteos y huevo, y tienen menos posibilidad de carencias de nutrientes.

Más que una dieta se basa en una “pirámide” que comprende granos, harinas, cereales, nueces y aceites vegetales a diario. Pescados, mariscos y lácteos a diario, en forma opcional. Huevos, carne de ave y productos dulces una vez por semana y carnes rojas una vez al mes. No pueden faltar 6 vasos diarios de agua o té y el ejercicio. El sake, el vino y la cerveza, con moderación.

Fue la que obtuvo el mayor puntaje en la prevención de enfermedades del corazón, además se la considera nutricionalmente completa y segura. Es una dieta muy baja en grasas, ya que tiene solo un 10% del total de las calorías consumidas. Esto puede provocar algunas dificultades para hacerla atractiva o convincente.

Es muy popular gracias al programa de televisión en la NBC que lleva su nombre. Tuvo la calificación más alta en la pérdida de peso a corto plazo. Es un programa de 12 semanas de duración basado en una dieta que limita la cantidad de calorías que se ingieren por día.

De las mejores para perder peso y excelente para no abandonar el plan. Según fue evaluada, incluye comidas preparadas que por su costo, no es accesible a todo el mundo. Su programa integral con asesoramiento personal y grupal ayuda a mantenerse motivado durante todo el proceso.

Dentro de las mejores, brinda orientación sobre cómo elegir alimentos que tienen pocas calorías pero que ofrecen sensación de saciedad al comerlos. Aunque la pérdida de peso es gradual, ofrece herramientas valiosas a la hora de comer, como controlar el tamaño de las porciones y hacer ejercicio en forma gradual.

En el segundo puesto de las dietas que dan resultados en la pérdida de peso a largo plazo y en el tercer puesto de las fáciles de seguir. Se basa en el consumo de frutas, verduras, granos enteros y proteínas de origen vegetal. De vez en cuando se consume carne y pescado en pequeñas cantidades.

La de mejor calificación en fáciles de seguir e igualmente la mejor en pérdida de peso a largo plazo. Más que una dieta es un programa basado en cuatro pilares: comer sabiamente seleccionando alimentos según una tabla de puntos, tener una conducta alimentaria adecuada, moverse más y tener apoyo emocional.

Más que una dieta es un estilo de vida. Con una alimentación a base de frutas, verduras, granos enteros, cereales integrales, nueces, semillas, aceite de oliva, pescado, pollo, quesos, yogurt y vino tinto, entre otros. Tuvo las mejores calificaciones en la categoría por ser completa y segura.

Ocupa el tercer puesto independientemente de que fue considerada moderadamente efectiva para la pérdida de peso. Pero resultó de las más seguras y muy adecuada en la prevención de diabetes. Se basa en la investigación actual y la experiencia clínica. Además ayuda a disminuir la glucosa sanguínea.

Su nombre completo es Therapeutic Lifestyle Changes (Cambios terapéuticos del estilo de vida) y resultó ser la mejor para prevenir enfermedades del corazón. Creada para reducir el colesterol alto, consta de tres pasos: dieta, actividad física y control del peso. Limita el consumo de grasas saturadas, sodio y colesterol y busca incrementar el consumo de fibra soluble.

Diseñada para combatir la presión arterial alta, es la estrella según los expertos. Alta en fibra y baja en sodio, incluye minerales como el potasio, magnesio y calcio que se obtienen a través del consumo de verduras, frutas, lácteos, aves y pescados. Además disminuye el consumo de grasa de origen animal y azúcar.

Aunque el ránking comprende una detallada revisión de las dietas más populares, hay factores que son decisivos a la hora de bajar de peso, como los hábitos personales y la actividad física. Por eso las dietas personalizadas, como la que ofrece MiDieta®, tienen más posibilidades de que por fin bajes de peso.