Samar Yorde, especialista en Salud Pública y Medicina de la Obesidad en Venezuela, explica que es mejor desayunar, siempre, antes de salir de casa, aunque sea muy temprano y esa primera comida debe aportar el 20 o 25% de las calorías diarias, de lo contrario el cuerpo no tendrá la suficiente energía.
Un estudio de la Universidad de Michigan explica que alrededor del 95% de las personas invierte solamente 15 segundos para lavarse las manos, lo que les genera millones de bacterias. Por ejemplo, este es uno de los errores que cometes todos los días y del que seguramente no estabas consciente.
Un trabajo de la Universidad de Pittsburgh, financiado por el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos, determinó que mantenerte conectado a las redes sociales, cuando ya vas a dormir, te hace más propenso a sufrir trastornos del sueño. "Cada dispositivo electrónico en la habitación reduce media hora el sueño de los adolescentes", asegura el investigador de la Universidad de Harvard Charles Czeisler.
Quedarte sentado durante casi toda la jornada laboral, puede suponer mayores riesgo de problemas circulatorios. El solo hecho de estar sentados eleva el riesgo cardiovascular, aunque vayas al gimnasio o hagas actividad física en las horas posteriores”, señala Francisco Guillén, jefe del Servicio de Medicina Preventiva de la Clínica Universidad de Navarra. El médico recomienda ponerse de pie al menos dos minutos cada hora.
Estrujarte los ojos al despertar o cuando estás frente a la computadora, puede deformarte la córnea y favorecer la aparición de queratocono (que causa visión distorsionada y borrosa, miopía y astigmatismo, difíciles de corregir con lentes). Al hacerlo, es posible, además, que se cuelen en los ojos bacterias capaces de desencadenar una conjuntivitis.
Es una de las 10 causas principales de mortalidad, morbilidad y discapacidad y constituye el segundo factor de riesgo más importante para la salud tras el tabaquismo. La inactividad hace que se debiliten tus huesos y pierdas masa muscular. Te sientes más débil y tus posibilidades de padecer artritis, artrosis u osteoporosis serán mucho mayores en el futuro.
Estudios científicos cada vez dan más pruebas de que no dormir bien puede afectar tu vida diaria y tu salud. Existen múltiples consecuencias, tanto a nivel físico como psicológico, cuando no logras tener un sueño reparador. Según los expertos, una persona debe dormir entre 7 y 8 horas diarias para mantener un óptimo estado físico, emocional y mental.
Es cierto que ver televisión te puede ayudar a relajarte cuando has tenido un día muy pesado y quieres ver un programa entretenido que te distraiga. Sin embargo no es lo más recomendable, pues se ha comprobado que quienes ven mucha televisión, tienen poca actividad física y además tienden a comer más comida chatarra y refrescos lo que puede conducir al sobrepeso y la diabetes tipo II.
Las preocupaciones
Mantenerte en alerta permanente, a la defensiva todo el tiempo, te vuelve vulnerable a algunas enfermedades o trastornos y te priva de la posibilidad de disfrutar el presente. Hay maneras de bajar la guardia y pasarla mejor. Además, preocuparte mantiene tu mente secuestrada por las emociones de miedo, rabia o tristeza.
Según un estudio publicado por “Circulation: Journal of the American Heart Association”, las personas que cenan tarde tienen hasta un 55% más de riesgo de padecer una enfermedad cardíaca. Además, puedes aumentar algunos kilos si cada noche comes y te acuestas de inmediato y también sufrir ciertos trastornos del sueño.
La Organización Mundial de la Salud afirma que las radiaciones solares ejercen un efecto negativo para la salud, principalmente vinculadas a diversos tipos de cáncer de piel, envejecimiento prematuro de la piel, cataratas y otras enfermedades oculares. Por eso es muy importante usar protector solar todos los días.
No beber agua puede causar fatiga, una disminución de la función cognitiva, alteraciones en el estado de ánimo, una caída en la presión arterial y en la humedad de la piel... Un cerebro deshidratado se contrae -literalmente- ante la falta de agua, ya que requiere de un esfuerzo extremo para funcionar.
Esta práctica tan extendida no es del todo recomendable, porque incrementa los problemas en la piel y en la circulación. Ana Rosa Alvarado, dermatóloga mexicana, afirma que las personas que se bañan con agua caliente y se exponen mucho tiempo a ella, son más propensas a sufrir dermatitis atópica debido a que retiran la grasa que protege a la piel contra el frío.
La comida rápida
Debido a su escaso aporte nutricional, como su bajo valor nutritivo, el alto contenido de grasa, calorías y sodio, el consumo habitual de comida rápida, puede conducir a una variedad de problemas de salud, como el aumento de peso, obesidad, diabetes y enfermedades cardiovasculares por citar algunas.
Academia Americana de Médicos de Familia
Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades
Administración de Alimentos y Medicamentos
Instituto Nacional del Cáncer
OMS