Se sabe que la acupuntura es eficaz para combatir las migrañas, reducir el estrés, aliviar los resfriados y los síntomas de la menopausia, para combatir la diabetes y frenar la depresión.
Los ensayos científicos demuestran que es eficaz para tratar muchos tipos de dolores, y hasta ayudar a detener las náuseas. Esto llevó a que los Institutos Nacionales de Salud (NIH) emitieran en 1997 una declaración que apoya el valor de estas terapias para ciertas condiciones. Y hasta la Organización Mundial de Salud (OMS) lista 40 situaciones que pueden ser aliviadas con la acupuntura.
Ahora, hay una nueva evidencia para dejarse introducir en el cuerpo esas pequeñas agujitas: un grupo de investigadores del Centro Susan Samueli de Medicina Integrativa de la Universidad de California en Irvine (UCI) halló que puede ayudar a reducir los niveles de presión arterial.
Es la primera evidencia en confirmar científicamente que esta antigua práctica china es beneficiosa en el tratamiento de la hipertensión leve a moderada, e indica que el uso regular puede ayudar a las personas a controlar su presión arterial y disminuir el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV) y enfermedad cardíaca.
"Este estudio clínico es la culminación de más de una década de investigación de laboratorio en esta área", dijo el doctor John Longhurst, cardiólogo y líder de la investigación. "Mediante el uso de rigor científico occidental para validar una antigua terapia oriental, sentimos que hemos integrado las dos medicinas, proporcionando una guía beneficiosa para el tratamiento de una enfermedad que afecta a millones de personas en EE.UU." agregó.
Longhurst y sus colegas de la UCI realizaron pruebas en 65 pacientes hipertensos que no estaban recibiendo ningún medicamento para la hipertensión. Los separaron aleatoriamente en dos grupos. Uno de ellos fue tratado con electroacupuntura -una forma de la práctica china que emplea estimulación eléctrica de baja intensidad- en ambos lados de las muñecas interiores y ligeramente por debajo de cada rodilla.
En el grupo de 33 personas que recibieron electroacupuntura, se observó una notable caída en los niveles de presión arterial en el 70% de ellos -un promedio de 6 a 8 mm Hg para la presión arterial sistólica (la alta) y 4 mm Hg para la presión arterial diastólica (la baja)-. Estas mejoras persistieron durante un mes y medio después de las sesiones.
En el grupo que recibió electroacupuntura también se redujeron en la sangre los niveles de concentración de una sustancia que estrecha los vasos sanguíneos y aumenta la presión arterial y los niveles de glucosa, y de una enzima producida en los riñones que ayuda a controlar la presión arterial.
Por los resultados obtenidos, los investigadores señalaron que la técnica podría ser especialmente útil en el tratamiento de la hipertensión sistólica en pacientes mayores de 60 años. "Debido a que la electroacupuntura disminuye la presión arterial sistólica por un promedio de más de 24 horas, esta terapia puede disminuir el riesgo de accidente cerebrovascular, enfermedad arterial periférica, insuficiencia cardiaca e infarto de miocardio en pacientes hipertensos", dijo Longhurst.
Hipertensión, el enemigo silencioso
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que a nivel mundial, 1 de cada 3 adultos padece de hipertensión, un trastorno que aumenta el riesgo de infarto, accidentes cerebrovasculares (ACV) e insuficiencia renal. Dicha proporción aumenta con la edad: afecta a 1 de cada 10 personas de 20 a 40 años, y a 5 de cada 10 de 50 a 60 años.
En EE.UU., 1 de cada 3 adultos padece de presión arterial alta (67 millones) y más de la mitad de ellos (36 millones) no la tiene bajo control. El riesgo se incrementa a medida que se va envejeciendo, según informan los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).