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Un gen encontrado en los amish ayuda a proteger sus corazones

VIERNES, 3 de diciembre de 2021 (HealthDay News) -- Una rara variante genética descubierta entre los amish podría ayudar a reducir el colesterol "malo" y proteger de la enfermedad cardiaca, sugiere un estudio reciente.

Los investigadores encontrar que, entre casi 7,000 amish, la variante genética se vinculó con reducciones tanto en el colesterol LDL como en el fibrinógeno , que es una proteína que es un marcador de la inflamación vinculado con el riesgo de enfermedad cardiaca.

Un gen encontrado en los amish ayuda a proteger sus corazones

También hubo evidencias de protección contra la enfermedad cardiaca en sí: entre más de 500,000 personas de la población general, los portadores de ciertas variantes del gen tenían un riesgo un 35 por ciento más bajo de enfermedad de la arteria coronaria.

Pero aunque la variante genética es rara, los expertos apuntaron que sus beneficios podrían potencialmente capturarse en una pastilla.

"Quizá podamos producir un fármaco que imite sus efectos", explicó la investigadora principal, May Montasser, profesora asistente de la Facultad de Medicina de la Universidad de Maryland.

Unos expertos en enfermedad cardiaca que revisaron el estudio se mostraron de acuerdo, aunque dijeron que falta mucho trabajo.

"Esto tiene el potencial de ser un objetivo terapéutico", comentó el Dr. Sadeer Al-Kindi, codirector del Centro de Métodos Integrados y Novedosos en la Enfermedad Vascular y Metabólica del Instituto Cardiaco y Vascular de los Hospitales de la Universidad de Harrington, en Cleveland.

Al-Kindi alabó el estudio, y afirmó que "plantea un argumento convincente".

El equipo de Montasser comenzó mediante un análisis de los genes de casi 6,900 miembros de la amish de la antigua orden (OOA, por sus siglas en inglés) del condado de Lancaster, Pensilvania. Casi toda la comunidad OOA puede rastrear el origen de sus ancestros a un limitado número de "familias fundadoras". Debido a esto, y a su estilo de vida similar, se consideran una población ideal para estudios que intentan aislar genes que, en la población general, son poco comunes.

Aquí, los investigadores descubrieron que una variante particular en un gen llamado B4GALT1, que portaba un 6 por ciento del grupo amish, se asociaba con una reducción en los niveles tanto de colesterol como de fibrinógeno.

Aunque un 6 por ciento no es una cifra muy alta, es significativa en comparación con la población general: el equipo de Montasser pudo encontrar la variante genética en apenas ocho de 140,000 genomas de personas que no eran amish, que estaban incluidas en una base de datos de investigación del gobierno.

Luego, Montasser y sus colaboradores recurrieron a bases de datos con información genética de más de 500,000 participantes británicos y estadounidenses. Como la variante genética descubierta en el grupo amish es tan rara, observaron si un grupo de variantes similares en el B4GALT1 se vinculaba con el riesgo de enfermedad cardiaca en estos dos grupos de datos.

Resultó que sí: las personas con las variantes tenían un riesgo alrededor de un 35 por ciento más bajo de ser diagnosticadas con una enfermedad de la arteria coronaria que otras personas.

Por último, los investigadores respaldaron los hallazgos con ratones de laboratorio, y mostraron que el LDL y el fibrinógeno se redujeron en ratones diseñados genéticamente para portar la variante del B4GALT1.

Queda mucho trabajo por hacer antes de que todo esto se pueda traducir en una terapia.

Los investigadores deben aprender más sobre los mecanismos de acción de la variante genética, apuntó Montasser, y si tiene algún efecto de salud negativo.

Anotó que hasta ahora no hay evidencias de daños.

Por supuesto, ya hay medicamentos para reducir el LDL, entre ellos las estatinas y unos fármacos inyectados conocidos como inhibidores de PCSK9.

En teoría, un medicamento que redujera tanto el LDL como el fibrinógeno podría ser mejor que los medicamentos que solo reducen al LDL. Pero Al-Kindi señaló que no se sabe si el fibrinógeno en sí contribuye a la enfermedad cardiaca, o si reducirlo proveería una protección adicional.

El Dr. Douglas Mann, editor jefe de la revista Journal of the American College of Cardiology: Basic to Translational Science, apuntó a algo similar.

Es posible que cualquier medicamento que se desarrolle a partir de esta investigación pudiera alcanzar a "múltiples objetivos", apuntó Mann.

Pero añadió que "esto está por comprobarse".

Y dada la existencia de medicamentos efectivos, seguros y baratos para reducir el colesterol, anotó Mann, una terapia nueva tendría que ser bien tolerada y "no ser demasiado costosa".

Los hallazgos aparecen en la edición del 2 de diciembre de la revista Science.

Más información

La Asociación Americana del Corazón (American Heart Association) ofrece consejos sobre cómo reducir el riesgo de ataque cardiaco.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

FUENTES: May Montasser, PhD, assistant professor, medicine, University of Maryland School of Medicine, Baltimore; Sadeer Al-Kindi, MD, co-director, Center for Integrated and Novel Approaches in Vascular-Metabolic Disease, University Hospitals Harrington Heart and Vascular Institute, and assistant professor, medicine and radiology, Case Western Reserve University School of Medicine, Cleveland; Douglas Mann, MD, editor-in-chief, JACC: Basic to Translational Science; Science, Dec. 2, 2021

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