¿Cuáles son las causas más frecuentes de las náuseas después del ejercicio?

Es posible que en alguna ocasión que hayas hecho ejercicio recuerdes sentirte con náuseas o mareo durante la actividad o al terminarla, ¿Te ha pasado?

En realidad este tipo de sucesos es común para las personas que realizan un esfuerzo superior durante el ejercicio, no están acostumbradas a la actividad o simplemente se ven influenciados por ciertos factores.

¿Cuáles son las causas más frecuentes de las náuseas después del ejercicio?
Las causas ayudan a orientar precisamente cómo puede prevenirse las náuseas o vómitos al ejercitarte. | Foto: GETTY IMAGES

Puntos clave

•Las causas ayudan a orientar precisamente cómo puede prevenirse las náuseas o vómitos al ejercitarte.
•Recuerda hidratarte durante el ejercicio y alimentarte adecuadamente con antelación, al igual que posteriormente.
•Temperatura adecuada del lugar del ejercicio.
•Evita esforzarte en forma excesiva.

Realmente no es una sensación agradable y afortunadamente es posible evitarlo en la mayoría de los casos al tomar ciertas consideraciones.

Causas de las náuseas y el mareo después de hacer ejercicio

Existe una variedad de factores que pueden influir en la calidad de tu experiencia de hacer ejercicio. Estas pueden propiciar este resultado de náuseas y mareo, ya sea pasando unos minutos o al finalizar tu sesión.

Al identificar estas causas es que podrás tomarlas en cuenta para contrarrestarlas y de esta manera evitar la sensación de náusea o mareo, algunas pueden ser:

-Local cerrado con poca ventilación o altas temperaturas.

El entorno o el lugar donde te ejercitas influye en cuestiones como la temperatura, si estás en exposición directa al sol, en un lugar cerrado con poca ventilación, entre otras.

-Sin oxígeno suficiente.

-Durante el ejercicio tus músculos demandan mayor oxigenación, al no recibir la cantidad suficiente de oxígeno tu cerebro señalará su requerimiento a través del mareo.

-Deshidratación.

Con el esfuerzo físico, tu cuerpo puede perder muchos líquidos a través de la sudoración.

-Sobre esfuerzo físico.

-Cuando el desgaste ocasionado por la actividad física te ha llevado a los límites pueden generar náuseas y vómitos.

-Niveles bajos de azúcar en la sangre.

Cuando te ejercitas, tus músculos utilizan una mayor cantidad de glucosa como fuente de energía y podrías presentar niveles bajos de azúcar en la sangre.

-Presión arterial baja.

Normalmente la presión arterial suele disminuir después del ejercicio.

-El equipamiento.

Las máquinas o equipo que utilizas para ejercitarte pueden, dependiendo de sus características, ser causantes del malestar.

Equipo que involucra un movimiento veloz y continuo como por ejemplo usar la caminadora o elíptica.

Acciones para prevenir el malestar posterior al ejercicio

Las causas ayudan a orientar precisamente cómo puede prevenirse las náuseas o vómitos. 

Es importante que puedas elegir o acondicionar el momento y lugar para que sean adecuados para llevar a cabo el ejercicio. 

Una temperatura media sin exposición al sol durante largo periodos, con una buena ventilación acompañada de una respiración pausada y profunda que se realice constantemente.

Recuerda hidratarte durante el ejercicio y alimentarte adecuadamente con antelación, al igual que posteriormente.

No te sobre esfuerces e intenta mantener un ritmo moderado mediante la respiración consciente, es preferible aumentar gradualmente la intensidad de tus sesiones con el pasar del tiempo. 

Por otro lado, ten presente el periodo de enfriamiento y si te es posible el de estiramiento para finalizar.

¡Dile adiós al mareo!

Ahora que conoces estas consideraciones puedes tomarlas en cuenta para evitar sentirte mal al terminar tu sesión de ejercicio, intenta tenerlas presentes y de ahora en adelante puedes despedirte de las náuseas y mareos si son por estas causas. Si continúan consulta a tu médico.

Fuente: National Library of Medicine (NIH)

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