La tensión entre las políticas nacionales de vacunación obligatoria versus los movimientos anti-vacunas crece en casi todo el mundo, y por diferentes razones. Lo cierto es que hay pocos temas de salud que generan un debate tan apasionado como las políticas obligatorias de vacunación. “Los defensores dicen que las vacunas son seguras y que las excepciones deberían ser mínimas. Los opositores contestan que las vacunas son peligrosas para la salud y que cualquier limitación a las exenciones constituye una violación de los derechos constitucionales” dice la Dra. Erin Walkinshaw, de la Universidad de Toronto, en Canadá, en un informe publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU.
El sarampión volvió con los movimientos anti-vacunas
Pero las pruebas al favor de las vacunas están a la vista, agrega la investigadora. En Canadá, antes del desarrollo de una vacuna, había alrededor de 300,000 casos de sarampión por año y cerca de 300 muertes entre los menores de 18 años. Ahora hay menos de 50 casos por año y ninguna muerte.
Los números sugieren que las políticas de inmunización obligatorias son apropiadas en ciertos entornos, dice Ian Gemmill, copresidente de la Coalición Canadiense para la Concientización y Promoción de la Inmunización. “Hay algunas circunstancias, como los escolares [y] con seguridad, los trabajadores de la salud, donde existen argumentos convincentes que se pueden presentar y se deben respetar al exigir que las personas estén inmunizadas. Pero no es cierto para todas las vacunas y para cada circunstancia" señala.
El problema de las exenciones
En Estados Unidos, las leyes estatales dictan las vacunas obligatorias, como las que se requieren para que los niños ingresen a la escuela. Los 50 estados permiten exenciones de vacunación para casos de contraindicaciones médicas.
Actualmente, todos menos tres estados: Mississippi, California y West Virginia todavía permiten exenciones filosóficas y/o religiosas para las familias que no quieren vacunar a sus hijos.
En 2016, la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) dio a conocer una declaración en la que instaba a todos los estados a eliminar las exenciones de vacunas no médicas, y escribió que dichas exenciones son "inapropiadas por razones individuales, de salud pública y éticas".
Aunque la disminución de las tasas de vacunación y el crecimiento de los movimientos anti-vacunas han dado como resultado el resurgimiento de enfermedades que se consideraban erradicadas como el sarampión, en EE.UU. y Europa, la tendencia avanza y en algunos casos de un modo violento.
Recientemente una madre estadounidense denunció acoso en las redes sociales por parte de los anti-vacunas. Ella perdió a su hija de 2 años (no vacunada) de gripe y quiso compartir su historia para que a otros padres no les suceda lo mismo. Pero le llamaron “mentirosa” y “asesina” quienes no querían que se supiera que la falta de la vacuna fue lo que provocó la gripe mortal de su hija.
¿Por qué existe la reticencia a las vacunas?
La tensión existe porque las normas de salud pública tienen como objetivo proteger a la mayor cantidad de personas posible, pero a veces privilegian las necesidades del grupo por sobre las preferencias individuales. En el caso de la vacunación, los mandatos sacrifican la autonomía individual para proteger a las comunidades de las enfermedades, ya que las personas no vacunadas representan un riesgo para los niños o personas con contraindicaciones médicas que no pueden vacunarse, así como para las personas vacunadas a las que no protegen las vacunas (las vacunas no son 100% efectivas) según The History of Vaccines.org.
La importancia de las vacunas en el mundo
Panorama de vacunación en Latinoamérica
En el continente americano, las campañas de vacunación nacionales con apoyo de la Organización Mundial de la salud (OMS) aumentaron la cobertura de inmunización del 50% en la década de 1970 a más del 80% en 1992.
En 1994, América se convirtió en la primera de las regiones de la OMS en eliminar la poliomielitis. En 2015 y 2016, la región fue declarada libre de sarampión, rubéola y síndrome de rubéola congénita. En 2017, fue declarada libre de tétanos neonatal, revela un estudio del Dr. Alejandro Macías de la Universidad de Guanajuato, en México
Si se observa por país, en México, por ejemplo, las vacunas son obligatorias para ingresar al ciclo escolar. A través de la creación del Consejo Nacional de Vacunación, la Secretaría de Salud del Gobierno de México logró consolidar el Plan Vacunal Universal que garantiza la inclusión de todos los sectores y el país cuenta con un esquema modelo de vacunación.
En Chile, si bien hay un calendario obligatorio de vacunas, son los padres quienes deciden si vacunar o no sus hijos. Y aunque las autoridades de salud trabajan para que las tasas de no-vacunación se mantengan lo más baja posibles, existe un incipiente movimiento anti vacunas que promueve el rechazo a la inmunización.
En Colombia, la tasa de cobertura de la vacunación es de alrededor de 95% para algunas vacunas, según datos del gobierno, donde según consignan, cuentan con uno de los sistemas de vacunación más modernos y eficaces de Latinoamérica.
En Argentina, existe un fuerte compromiso por parte de las escuelas y entidades de salud en exigir las vacunas de calendario obligatorio para ingresar. Sin embargo, en febrero de 2019 se encendieron las alarmas: una diputada oficialista presentó un proyecto en la Cámara de Diputados para pedir que cese la obligatoriedad, algo que puede ser considerado como una de las primeras arremetidas del movimiento anti-vacunas en ese país.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no tiene una política oficial sobre vacunación obligatoria, declaró Alison Brunier, oficial de comunicaciones sobre Inmunizaciones, Vacunas y Productos Biológicos de la OMS. "Si bien es preferible que la alta demanda y aceptación de la comunidad haga innecesarios los programas de vacunación obligatoria, la OMS entiende que algunos países pueden desear avanzar en esa dirección ante la disminución de las tasas de vacunación y los brotes de enfermedades" declaró.
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