Este contenido ha sido archivado y puede no estar actualizado

¿Por qué las vacunas contra la COVID no llegan a las personas de todo el mundo?

MIÉRCOLES, 8 de septiembre de 2021 (HealthDay News) -- La variante Delta de la COVID-19, que es altamente transmisible, ha resaltado un temor que los expertos en enfermedades infecciosas de todo el mundo comparten: que unas mutaciones cada vez más peligrosas continúen surgiendo hasta que la mayoría de las personas de todo el mundo estén vacunadas.

"Habrá más variantes, y al final podrían ser variantes preocupantes o variantes que planteen problemas respecto a las vacunas", advirtió el Dr. Amesh Adalja, experto sénior del Centro de Seguridad de la Salud Johns Hopkins, en Baltimore.

¿Por qué las vacunas contra la COVID no llegan a las personas de todo el mundo?

"La mejor forma de garantizar que esto no suceda es arropar al mundo con la vacuna", planteó Adalja en una entrevista de HealthDay Now.

Lo que divide a los expertos en salud, a los políticos y a muchos más es la forma de alcanzar ese objetivo.

¿Qué sucedería si se suspenden las protecciones de patentes de las compañías farmacéuticas, que algunos creen que impiden que los países fabriquen las vacunas contra la COVID dentro de sus territorios?

El año pasado, India y Sudáfrica propusieron que los derechos de las patentes de las vacunas contra la COVID-19 se suspendieran de forma temporal, para dar a las compañías farmacéuticas de genéricos la oportunidad de producir dosis lo más rápido posible para cubrir al mundo.

La Organización Mundial del Comercio está debatiendo esta propuesta ahora. El Presidente de EE. UU., Joe Biden, también respalda la idea, pero otros países desarrollados se oponen con firmeza.

Ocultar el conocimiento

Un empresario de Bangladesh, Muhammad Yunus, es presidente del Centro Yunus en Dhaka, una organización de investigación que se enfoca en aliviar la pobreza. También es el exdirector administrativo del Banco Grameen, pionero de los préstamos de "microcrédito".

Yunus respalda una suspensión temporal de los derechos de patente, y planteó en una entrevista de HealthDay Now que "no se puede ocultar el conocimiento de todo el que puede resolver el problema. Este conocimiento debe ser un conocimiento global para salvar a la población global".

Bangladesh tiene una población de casi 165 millones de personas, pero apenas alrededor de un 4 por ciento de sus habitantes se han vacunado contra la COVID, según el Dhaka Tribune. Más de 6 millones de han vacunado del todo, y otros 16 millones han recibido la primera dosis.

Bangladesh había hecho un contrato con el Serum Institute de India para comprar 30 millones de dosis de vacunas, pero solo recibió alrededor de 10 millones de dosis, dijo Yunus.

India es donde la variante Delta apareció originalmente, y para controlar la ola de COVID, su gobierno frenó las exportaciones de las vacunas, señaló Yunus.

"India decidió frenar todas las exportaciones de vacunas, y nos convertimos en víctimas de esa medida", lamentó.

Yunus cree que el mejor camino ahora es liberar el conocimiento sobre las vacunas contra la COVID, de forma que los países puedan arreglárselas solos.

"El conocimiento no es la pieza faltante. Sabemos cómo proteger a las personas. Es fácil. Es simple. Pero ese conocimiento no se comparte con nadie más", enfatizó Yunus. "Las compañías que ganan dinero han tomado la decisión de que ocultarán este conocimiento tras su pared de lucro".

"Es la única oportunidad que tenemos, permitir a las personas producir toda la vacuna que puedan, en cualquier lugar que puedan", aseguró Yunus. "La producción es la clave".

'Nacionalismo de vacunas'

En Johns Hopkins, en Estados Unidos, Adalja, el experto en enfermedades infecciosas, se muestra de acuerdo en que hay que vacunar al mundo lo antes posible. Pero no está de acuerdo en que las dispensas de las vacunas sean la respuesta.

"No creo que sea una solución sostenible, porque sabemos que necesitamos la innovación en las vacunas. Sabemos que no tendríamos estas vacunas si no fuera por los innovadores en lugares como BioNTech y Moderna que desarrollan estas vacunas. Le quita a las compañías el incentivo de invertir, así que no respaldaría ninguna dispensa de los derechos intelectuales", señaló Adalja.

Más bien, Adalja considera que los tipos de restricciones en las exportaciones de las vacunas contra la COVID-19 impuestos por India (y otros países) se deben levantar en todo el mundo. Cuando esto sucede, dijo Adalja, los países necesitados pueden obtener las dosis al comprarlas, o mediante donaciones.

"Hemos visto muchos países con nacionalismo de vacunas", cree Adalja. "Ciertos países todavía tienen restricciones de exportación. Cuando una compañía desea vender fuera del país donde fabrica, tiene que obtener el permiso del gobierno. Esto debe evaporarse. Nunca se debería haber iniciado en primer lugar".

Unos grupos creados para distribuir las vacunas de forma equitativa en todo el mundo (COVAX y la Bill and Melinda Gates Foundation, por ejemplo), están trabajando para llevar millones de dosis a lugares como Bangladesh, pero las restricciones de importación continúan impidiendo estos esfuerzos, según Adalja.

"Es extraño que sigamos viendo el nacionalismo de las vacunas ahora en unos países altamente vacunados, donde hay unos abundantes suministros de vacunas", comentó Adalja. "Sí pienso que esas restricciones en la exportación y pensar sobre las terceras dosis en los países altamente vacunados no tiene sentido, si nuestra meta es que toda la población humana sea resistente a la COVID-19".

Primeras versus terceras dosis

¿Y qué sucede con la prisa de la administración de Biden para que la mayor cantidad posible de estadounidenses reciban una tercera dosis de refuerzo de la vacuna?

Tanto la Organización Mundial de la Salud como la Unión Europea han desaconsejado las dosis de refuerzo por ahora, e instan a las naciones a mejor centrarse en vacunar a las personas que no se hayan vacunado. Esto incluye a EE. UU., donde un 38 por ciento de las personas elegibles para la vacunación se han resistido a vacunarse.

Enfocarse en más primeras dosis, en lugar de los refuerzos, es un método que Adalja y muchos otros expertos en enfermedades infecciosas promueven.

"Mientras más tiempo esté el virus sin controlar en cualquier parte del mundo, más probable es que veamos variantes. Hasta que controlemos esta pandemia en todas las partes del globo, seguiremos teniendo variantes", advirtió Adalja. "La forma de controlar esta pandemia administrando las primeras y las segundas dosis a las personas de todo el mundo, incluso en Estados Unidos".

"Lo importante es recordar que esto lo están fomentando las personas sin vacunar", añadió. "Esto es lo que hay ahora mismo en los hospitales. El problema con esta pandemia no son las personas vacunadas".

Más información

La Organización Mundial de la Salud ofrece más información sobre COVAX.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

FUENTES: Amesh Adalja, MD, senior scholar, Johns Hopkins Center for Health Security; Muhammad Yunus, PhD, chairman, Yunus Center, and former managing director, Grameen Bank, Dhaka, Bangladesh

Comparte tu opinión