Un grupo de investigadores observó a más de 6,000 adultos estadounidenses que llevaban un estilo de vida activo. Durante el día subían escaleras, rastrillaban hojas o hacían otras actividades tan efectivas como puede ser concurrir al gimnasio.
La vida activa implica movimiento, y por ende contribuye en la prevención de la hipertensión, colesterol alto y síndrome metabólico, que incrementa el riesgo de enfermedad arterial coronaria, accidente cerebrovascular y diabetes tipo 2.
Puntos clave
"Nuestros resultados sugieren que llevar un estilo de vida activo puede que sea tan beneficioso en varios aspectos de la salud como hacer ejercicio de manera estructurada", comentó el autor del estudio Paul Loprinzi, profesor asistente de ciencias del ejercicio en la Universidad de Bellarmine en Louisville, Kentucky.
Loprinzi aconseja a la gente que busque estar en movimiento cada vez que se pueda. Por ejemplo, “en lugar de hablar por teléfono sentados, aprovechar para caminar un poco mientras habla".
Los investigadores también hallaron que el 43 por ciento de las personas adultas que realizaron sesiones cortas de ejercicio cumplieron con lo requerido por las directrices federales de actividad física de 30 minutos al día, en comparación con menos del 10 por ciento de los que realizaron sesiones de ejercicios más largas.
"Uno oye que menos del 10 por ciento de los estadounidenses hacen ejercicio y da la impresión de que la gente es perezosa", comentó el coautor del estudio Brad Cardinal, profesor de ciencias del ejercicio y de los deportes en la Universidad Estatal de Oregón.
"Nuestra investigación muestra que más del 40 por ciento de los adultos cumplieron con lo especificado por las directrices de ejercicio, al hacer del movimiento un modo de vida". Muchas personas afirman que no hacen suficiente ejercicio por falta de tiempo.
Estos hallazgos son prometedores en la medida en que muestran que simplemente con incorporar el movimiento en sus actividades diarias se pueden obtener beneficios para la salud, afirmó Cardinal. "Se trata de una manera de hacer ejercicio más natural: simplemente andar y moverse un poco más", comentó.
Según opina el experto, la naturaleza nos ha diseñado como seres que se mueven. Algunas personas piensan: "Si no llego a esos 30 minutos, para eso no hago ejercicio en absoluto". Estos nuevos resultados buscan un nuevo enfoque para este tema y ofrecen a las personas "opciones realistas y con sentido para cumplir con las directrices de actividad física".