Has decidido bajar de peso y tienes una lista de restricciones a las que debes ajustarte, pero la vida social sigue y en los eventos o en el día a día, algunas de las personas que te rodean podrían tener actitudes poco convenientes para tu plan.
A menudo, las personas con las que pasas más tiempo, tu familia, amigos y compañeros de trabajo, pueden provocar situaciones de riesgo para tu plan de adelgazamiento. Esto podría ser una actitud intencional de socavar tu esfuerzo de pérdida de peso (que proviene de un amigo/a o hermano celoso) o podría ser involuntario, porque muchas personas no entienden lo difícil que es comer sano de forma constante.
¿Qué decirles? ¿Cómo argumentar tus ideas sin llegar a caer en una desagradable discusión? Para mantenerte enfocado en tus objetivos, debes saber cómo manejar las influencias negativas en tus círculos sociales. Revisa estas situaciones y haz un plan para el próximo desafío que presente un posible saboteador; son consejos preparados por los especialistas en dieta de Mayo Clinic.
Situación 1: tu pareja te sorprende al llevar a casa tu postre favorito
Tu respuesta: Mantente natural. Agradece a tu compañero/a por pensar en ti y luego recuérdale que estás adoptando hábitos alimenticios saludables y que no necesitas ningún alimento en este momento. Pide que el postre se coloque en algún lugar donde no puedas verlo. Si puedes incluirlo en tu plan de comidas, divídelo en porciones múltiples. Si esta situación ocurre más de una vez, desecha las golosinas y asegúrate de decirle a tu pareja que los regalos no comestibles, como las flores, son las sorpresas apropiadas para ti.
Situación 2: Los amigos esperan que continúes con las tradiciones de alimentación del grupo
Tales como tomar cerveza y comer aperitivos después del trabajo, compartir la comida chatarra mientras miras los eventos deportivos juntos, o realizar las paradas regulares en tu heladería favorita.
Tu respuesta: Toma la iniciativa de programar actividades no alimentarias, como un juego de bádminton. Invita a tus amigos a tu casa para que puedas servir algunos de tus alimentos saludables favoritos. Pídeles ayuda a medida que pierdas peso y deja en claro que tu decisión de cambiar los hábitos alimentarios no merece una crítica de ellos. Hazles saber que valoras su amistad y que el apoyo del grupo para tu cambio de estilo de vida, es muy importante para ti.
Situación 3: Tu familia se niega a comer las comidas nuevas y más saludables que estás preparando
Tu respuesta: Primero, tómalo con calma. No cambies el menú completo de la noche a la mañana. A medida que introduces nuevos alimentos, recuérdale a tu familia lo importante que es para todos el hecho de cuidarse. Una alimentación saludable es más que un control de peso: puede mejorar el nivel de energía y la calidad de vida para todos. Dile a tu familia que estás controlando tu peso en parte para ellos, para ser una persona más saludable y feliz. Invítalos a sugerir algunos alimentos saludables o recetas para probar.
Situación 4: Tu mejor amigo te sorprende con una fiesta de cumpleaños llena de tentaciones
Tu respuesta: Expresa tu asombro y placer en un gesto reflexivo. Comenta sobre el atractivo visual de algunos de los alimentos (estás elogiando sin tomar un bocado). Lentamente bebe un vaso de agua con una rodaja de limón.
Luego, antes de visitar la mesa de comida, decide qué y cuánto comerás. Toma porciones pequeñas, mordisquea despacio y ocúpate de otra cosa: chatea con amigos, presenta a personas que no se conocen o reúne grupos para tomar fotos. ¡Finalmente, felicítate por manejar una situación de alto riesgo! Después de que termine el evento, habla con tu mejor amigo sobre las formas de apoyarte verdaderamente.
Ahora es tu turno! Piensa en cómo las personas cercanas pueden ayudarte en tu plan: ¿Pueden brindar apoyo emocional simplemente dejando que te desahogues u ofreciendo aliento? ¿O pueden brindar apoyo práctico y salir a caminar contigo? Habla con tus amigos y familiares y pídeles ayuda.
Luego identifica los escenarios y situaciones más desafiantes con familiares y amigos. Piensa en tus mejores respuestas y estrategias, y guárdalas para usarlas en el futuro. Todos podemos beneficiarnos del apoyo de quienes nos rodean, en nuestros planes de pérdida de peso.