La tos es más que un reflejo del organismo para mantener despejadas la garganta y las vías respiratorias. Si bien muchas veces puede llegar a ser solo una molestia capaz de interferir con la vida cotidiana, durante la temporada de gripe, bronquitis y otros virus respiratorios, se convierte en una peligrosa amenaza, ya que favorece la transmisión y el aumento de los contagios.
Aunque muchos se desesperan y llegan a odiarla, la tos no es tan
perjudicial como se cree, ya que ayuda a limpiar la mucosidad de las
vías respiratorias. Sin estas reacciones en el organismo, probablemente
tendríamos que lidiar con otro tipo de complicaciones. Sin embargo, si
su presencia se convierte en un verdadero fastidio, puedes recurrir a
estos remedios caseros para aliviarla:
Miel
Comer una cucharada de miel por las noches puede ser de gran ayuda para
aliviar la tos, ya que posee propiedades antioxidantes y
antimicrobianas. También se asocia a efectos antiinflamatorios, por lo
que puede calmar la irritación de garganta que muchas veces acompaña a
la tos.
Si quieres obtener un efecto más poderoso contra la tos, puedes combinar
la miel con té o agua de limón caliente. Existen investigaciones que
compararon esta mezcla con el dextrometorfano, un medicamento usado
comúnmente para el resfriado, gripe y tos.
Vapor
Respirar vapor es una sencilla y efectiva forma de calmar la tos, ya que
aumenta la humedad en el aire y alivia la garganta seca o irritada. Si
quieres incrementar las bondades del vapor, agrega hojas de menta o
eucalipto al agua caliente. Estas actuarán como descongestionantes y
expectorantes.
Tomillo
Más allá de su uso gastronómico, también se demostró que el tomillo
tiene grandes cualidades dentro del campo de la medicina. De hecho, está
aprobado por la Comisión Alemana para el tratamiento de problema
respiratorios, como bronquitis, tos ferina y catarro.
Para aprovechar sus bondades, pon a hervir en agua un puñado de tomillo,
deja reposar unos minutos, cuela y tómalo con un poco de miel y limón.
Las propiedades antimicrobianas y expectorantes de esta planta
comenzarán a actuar de inmediato. Al cabo de pocos días notarás la
diferencia.
Ajo
Pese a su sabor poco agradable, el ajo puede actuar como antiséptico en
las vías respiratorias y como un poderoso antibiótico natural capaz de
aliviar cualquier molestia en la garganta, incluida la tos.
Agua
En caso que la tos venga acompañada por flemas, bebe mucho líquido,
especialmente agua. De esta manera es más sencillo diluir la mucosidad y
por consiguiente expulsarla del organismo. El agua también contribuye a
mantener húmedas las vías respiratorias.
Generalmente, nadie piensa en piñas a la hora de buscar una solución
para la tos. Esto es por que no han escuchado acerca de la bromelina,
una enzima presente en esta fruta que parece ayudar a disminuir la
irritación y mucosidad que suelen presentarse junto a la tos.
Pese a que existen varios testimonios que revelan que este remedio ha
funcionado, algunos organismos, como los Institutos Nacionales de Salud,
se han reservado a confirmar su efectividad, pues argumentan que no hay
suficientes pruebas hasta la fecha.
Cebollas
Otro de los remedios caseros más populares y antiguos contra la tos
consiste en picar una cebolla, agregarle dos cucharadas de miel, dejar
reposar media hora para que suelte sus jugos y consumir, a fin de calmar
este malestar.
Aunque no existe suficiente evidencia médica al respecto, se piensa que
los efectos de la cebolla se deben a sus propiedades expectorantes y
antitusivas. Incluso algunas personas afirman que respirar rodajas de
cebolla por las noches es de gran ayuda.
Jengibre
El jengibre tiene muchos usos, tanto gastronómicos como medicinales, a
lo largo del mundo. Con respecto a la tos, se destaca su capacidad
antihistamínica y descongestionante para combatirla. Una buena forma de
aprovechar estas bondades es preparándolo en infusión.
Es común que la tos se convierta en una molestia de unos cuantos días.
Si se extiende por semanas, lo mejor será visitar a tu médico de
confianza, pues la tos crónica generalmente es indicio de otro tipo de
afecciones más complejas que requieren de atención inmediata.
Fuentes consultadas:
Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Clínica Mayo, Instituto Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa.