A todos nos preocupa lucir un rostro radiante y sin que ningún granito se interponga. Afortunadamente, la evidencia científica señala que muchos de los remedios caseros que circulan desde hace décadas contra esta enfermedad pueden ser de ayuda. Te contamos cuáles son los más populares y qué debes hacer para aprovecharlos.
El acné es una enfermedad común de la piel que provoca espinillas o granos. Estas se forman cuando los folículos pilosos que se encuentran debajo de la piel se tapan, y pueden aparecen en el rostro, cuello, espalda, pecho y hombros. Cualquier persona puede padecerlas, aunque es más común en adolescentes y adultos jóvenes.
Ciertos factores pueden causarlo, a saber: cambios hormonales durante la adolescencia y el embarazo, comenzar o dejar de tomar píldoras anticonceptivas, factores hereditarios y algunos medicamentos. Recientemente, se supo que el estrés también puede ser responsable de la aparición de las espinillas.
Al reventar los granitos puedes infectar otras capas más profundas de la piel, provocando más inflamación, enrojecimiento e incluso cicatrices permanentes. Si el acné es severo, necesitarás un dermatólogo que te recete un medicamento y te ayude a encontrar el método de tratamiento que sea más adecuado para ti. Si la condición no es tan grave, puedes probar con las siguientes opciones:
Naranja
La naranja es una fruta a la que la sabiduría popular le atribuye propiedades astringentes, ideales para la piel grasosa y para eliminar las impurezas. Para hacer un tónico casero se machaca la cáscara y se mezcla con agua. Lava tu cara antes de dormir y aplica el tónico sobre las áreas afectadas, enjuagando al otro día.
Ajo
Seguro que en la alacena de tu casa no falta el ajo, un remedio milenario que contiene azufre, una de las sustancias más potente para matar las bacterias que causan el acné. Si frotas varias veces al día un diente de ajo crudo y rebanado sobre las áreas afectadas notarás cómo la erupción cutánea se irá desinflamando.
Pepino
El pepino es una forma natural de refrescar la piel y un ingrediente muy utilizado para preparar mascarillas faciales por su alto contenido de vitamina C y ácido ascórbico. Pela y parte medio pepino, quítale las semillas y procésalo en la licuadora hasta obtener una pasta. Aplícala sobre tu cara por unos 20 minutos y luego enjuaga con agua fría.
Probablemente es uno de los remedios más populares del botiquín de la abuela. Nuevamente el ingrediente activo en la pasta dental que ayuda a combatir el acné es el azufre. Asegúrate de usar pasta de dientes normal, evitando las de "control de sarro" o "blanqueamiento". Simplemente aplica un poquito en cada grano y deja actuar por unos minutos.
Sábila o aloe vera
La sábila es un remedio indispensable en el jardín medicinal, se ha usado durante siglos y es un ingrediente esencial en muchos productos cosméticos. Para aprovecharlo debes cortar transversalmente los tallos y colocar su pulpa directamente sobre las zonas afectadas, deja que actúe sobre la piel y luego limpia con agua tibia.
Tomate
El tomate no sólo es un alimento básico en la cocina y una opción muy popular para aliviar el dolor de las quemaduras solares. Gracias a su acidez y rico contenido de licopeno, un poderoso antioxidante, es ideal para cuidar la salud de la piel, tratando el acné y estimulando la cicatrización.
Zanahoria
Es uno de alimentos más ricos en vitamina A, un nutriente esencial para la salud de la piel y aliada perfecta para combatir el acné. Limpia una zanahoria mediana, hiérvela con la menor cantidad de agua posible, y una vez cocida, machaca y déjala enfriar. Luego aplica la pasta sobre las zonas afectadas por el acné y deja actuar.
Avena
Las mascarillas de avena se consideran un tratamiento casero muy efectivo para tratar la piel grasa, y este cereal suele ser uno de los más utilizados en la industria cosmética. Esto se debe a que posee propiedades astringentes que ayudan a limpiar las impurezas de la piel. Lava bien el rostro y aplica avena cocida fría en toda la cara durante 15 minutos, luego retira con agua fría.
La miel ha sido usada como agente de belleza durante cientos de años, debido a sus propiedades antibacterianas. Estos efectos se aprovechan para atacar a los microbios dañinos de la piel, además, ayudan a mantener el equilibrio del pH y la hidratación.
Fuentes consultadas
Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Departamento de Agricultura de EE. UU., Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel, Instituto Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa.