Lo primero que debes determinar es que si te sientes emocionalmente solo. Si es así, lo más probable es que tu salud se vea afectada. Estudios han demostrado que la compañía no solo es necesaria para vivir momentos agradables. También te permite tener una mejor salud.
La soledad afecta a nueve millones de británicos, según un estudio reciente, y en función de ese dato se creó un departamento en el Gobierno. Tracey Crouch, diputada de 42 años, es la flamante secretaria de Estado para la soledad. La primera ministra, Theresa May, anunció el nombramiento de Crouch, que dirigirá un departamento del Gobierno con responsabilidad en las políticas relacionadas con la soledad.
Epidemia social
“En las últimas décadas, la soledad ha pasado de desgracia personal a epidemia social. Cada vez más de nosotros vivimos solos. A veces parece que nuestro mejor amigo es el teléfono móvil”, señala la diputada laborista británica, Rachel Reeves. La “epidemia” tiene que ver con el debilitamiento de una serie de instituciones que tradicionalmente tejían conexiones entre las personas.
"Las personas que se sienten solas tienen más problemas de salud física y mental que quienes se sienten conectados con los demás", asegura Bruce Rabin, MD, profesor de psiquiatría en la Universidad de Pittsburgh. Cuanto más sola te sientas, más probabilidades hay de tener síntomas depresivos, según una investigación de la Universidad de Chicago. "Cuando estás solo, las hormonas del cerebro asociadas con el estrés se activan y causa depresión.
Estudio realizado en Inglaterra concluyó que la soledad está a menudo asociada a enfermedades cardiovasculares, demencia, depresión y ansiedad, y puede ser tan perjudicial para la salud como fumar 15 cigarrillos al día. Hasta 200.000 personas mayores en Reino Unido no han tenido una conversación con un amigo o un familiar en más de un mes.
The Journal of Consumer Research publicó un estudio que muestra que las personas solitarias son más propensas a centrarse en objetos materiales. Esto les da una felicidad instantánea. Sin embargo, emocionalmente, todos estos artículos funcionan como un consuelo que les da alegría temporal. Con el tiempo terminas sintiéndote peor y la depresión o emociones negativas no tardan en aparecer.
A las personas que viven solas les puede resultar complicado cocinar la ración justa de comida. Casi siempre cocinan de más y ese excedente se lo comen sin arrepentimientos, lo que más tarde puede notarse en el peso. En efecto, la Universidad de Tecnología de Queensland (Australia) realizó un estudio con personas que viven solas. Los resultados arrojaron que son más propensos a tener dietas poco saludables.
La Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos realizó un estudio sobre la soledad. En la investigación se comprobó que el aislamiento percibido (es decir, sentirse solo, incluso si no lo estás) podría aumentar el riesgo de muerte prematura en 14%. Hay quienes aseguran que un simple resfriado puede prolongarse si vives solo.
Tu capacidad intelectual disminuye
Cuando compartes la vida con alguien más son frecuentes los debates sobre temas actuales o históricos. Las disertaciones ayudan a tu cerebro porque comparar distintos puntos de vista y escuchar opiniones te reta y motiva, es decir estar acompañado te ayuda a estimular las neuronas de tu cerebro. Según estudio de Journal of Neurology Neurosurgery & Psychiatry las personas que viven solas tienen 80% más de probabilidades de sufrir demencia.
Cuando estás solo comes comida menos saludable y eres más propenso a ser físicamente inactivo, según un estudio publicado en la revista Health Psychology. Además, la soledad puede afectar el sistema inmunológico, según un estudio de la Universidad Estatal de Ohio, las personas solitarias producen más proteínas relacionadas con la inflamación en respuesta al estrés que la gente que se siente más conectada socialmente.
Amplía tus posibilidades
La Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos realizó un estudio sobre la soledad y se comprobó que el aislamiento percibido (es decir, sentirse solo, incluso si no lo estás) podría aumentar el riesgo de muerte prematura en 14%. Al final, parece que la compañía te permite tener una mejor salud. Ríe, juega, conversa y debate con quien sea. No te cierres solo a ti mismo o a tu pareja. Amplía tus posibilidades tanto como puedas.
Haz buenas acciones
Bruce Rabin, MD, director del Medical Center Healthy Lifestyle Program de la Universidad de Pittsburgh, cree que más allá de tener muchos amigos o estar siempre acompañado es importante participar en el voluntariado. Hacer buenas acciones para los demás va a levantar tu estado de ánimo, y es más probable que conectes con espíritus afines con quienes puedes cultivar una verdadera conexión, lo que a su vez te hará sentirte menos sola.