Como parte de una medida impartida por el Gobierno de la ciudad de México (GDF) y la Secretaría de Salud (Sedesa), se reforzó la campaña de vacunación contra el Virus del Papiloma Humano (VPH) en niños de 11 años, que previamente recibieron la primera dosis.
En compañía del jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera y el titular de Salud, Armando Ahued, una brigada visitó la Escuela Primaria Francisco Giner de los Ríos, ubicada en la colonia Obrera, en donde se aplicaron varias inmunizaciones.
“Vamos a ser la primera ciudad que comenzó con esta tarea de salud y que hizo un cambio, así comenzaron todas esas vacunas contra la tuberculosis, la poliomelitis, el sarampión, así comenzaron todas esas vacunas en nuestro país, ahora estamos escribiendo una nueva nota en la salud pública”, comentó el jefe de gobierno de la ciudad.
De acuerdo con la Sedesa, desde que comenzó esta campaña, en marzo de 2015, se han aplicado más de 40 vacunas contra el VPH, lo que significa una inversión de seis millones de pesos ($350,000 dls. aproximadamente). Además, se han tomado cerca de mil muestras en niños para revisar la efectividad de la vacuna.
La vacuna contra el VPH se encarga de proteger contra esta infección causada generalmente por el contacto sexual, la cual puede provocar desde verrugas genitales hasta varios tipos de cáncer como el de cuello uterino. Sobre éste último, se calcula que en México 500,000 nuevos casos son diagnosticados.
Existen dos vacunas aprobadas contra dicho virus como la VPH4 (Gardasil) y VPH2 (Cervarix). Éstas protegen contra los dos tipos de VPH que causan la mayoría de los casos de cáncer de cuello uterino, mientras que la Gardasil también protege contra otros dos tipos del VPH que causan la mayoría de los casos de verrugas genitales en hombres y mujeres.
La vacuna se suministra en 3 inyecciones durante un periodo de seis meses. La segunda y tercera dosis se aplican a los 2 y 6 meses después de la primera. Cabe mencionar que esta inmunización puede administrarse al mismo tiempo que otras vacunas.
Sobre la edad en la que debe de aplicarse, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) sugieren hacerlo a partir de los 9 a los 26 años para mujeres y hombres.
¿Existen riesgos?
Algunos de los efectos secundarios que podrían presentarse son desmayos, náuseas, dolor de cabeza y reacciones cutáneas en el sitio donde se aplicó la vacuna.
A pesar de la sólida evidencia que muestra la seguridad de esta vacuna, en Estados Unidos muchos padres se rehúsan a vacunar a sus hijos debido a que consideran que no es necesaria y porque creen que sus hijos no están sexualmente activos, así lo dio a conocer un estudio de la Universidad de Denver en 2013.
Ante esto, la preocupación de las autoridades sanitarias ha ido incrementando, pues los CDC estiman que por lo menos 20 millones de personas en el país tienen el virus del papiloma.
De igual forma, el estudio informa que alrededor de tres cuartas partes de los niños de 13 a 17 años no estaban al día en sus series de vacunas en 2010, lo que supone un mayor riesgo de contraer no sólo VPH sino otra enfermedad.
Además de la vacuna, otras formas de evitar el VPH y los problemas de salud que puede causar se encuentra hacerse una prueba de detección de cáncer de cuello uterino, en el caso de las mujeres; usar condón de látex en forma correcta cada vez que se tengan relaciones sexuales y tener una relación mutuamente monógama.