Los estadounidenses gastaron casi 3 mil millones de dólares en vitaminas, remedios herbales y otros suplementos en su lucha contra los resfriados y la influenza en 2016, según la revista Nutrition Business Journal.
Pero las investigaciones que muestran que estos productos funcionan tienden a ser débiles. A diferencia de los medicamentos, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) no requiere que los suplementos demuestren su seguridad y efectividad antes de entrar en el mercado, y ni siquiera puedes estar seguro de si contienen lo que dice la etiqueta.
Esta es nuestra opinión de varios suplementos muy comunes:
Equinácea
¿Es segura? La equinácea puede provocar náuseas y en algunas personas puede empeorar el asma.
Consejo de CR: Cualquier té caliente puede ayudarte a aliviar los síntomas del resfriado y la influenza. Pero probablemente no merezca la pena tomar suplementos de equinácea con regularidad por si acaso existe la posibilidad de que ayuden a prevenir los resfriados.
Lo que indica la investigación: Una revisión en 2014 de 24 ensayos sugirió que los tés o los suplementos de equinácea podrían ayudar a prevenir los resfriados.
¿Es segura? La equinácea puede provocar náuseas y en algunas personas puede empeorar el asma.
Consejo de CR: Cualquier té caliente puede ayudarte a aliviar los síntomas del resfriado y la influenza. Pero probablemente no merezca la pena tomar suplementos de equinácea con regularidad por si acaso existe la posibilidad de que ayuden a prevenir los resfriados.
Ajo
Lo que indica la investigación: Los suplementos con extracto de ajo podrían ayudar a prevenir los resfriados, según una revisión realizada en 2014.
¿Es seguro? Tomar con frecuencia dosis altas podría aumentar el riesgo de sangrado si se combina con la warfarina (Coumadin) y hace que los medicamentos para el HIV sean menos efectivos.
Consejo de CR: Comer ajo no provoca ningún daño. Pero, ¿realmente quieres tomar con regularidad pastillas de ajo con la esperanza de que te protejan del resfriado?
Remedios homeopáticos
Lo que indica la investigación: La teoría que hay detrás de estos productos, que normalmente llevan la palabra "homeopático" en la etiqueta, es especialmente dudosa.
Implica tomar un presunto ingrediente activo (como el oscillococcinum, un extracto de corazón e hígado de pato salvaje) y diluirlo hasta el punto de que sea imperceptible.
La Comisión Federal de Comercio afirma que “las afirmaciones de los productos homeopáticos no se basan en los métodos científicos modernos”. Sin embargo los productos se venden con frecuencia en las farmacias junto con medicamentos aprobados por la FDA. (Lee más sobre la medicina homeopática).
Consejo de CR: No pierdas el tiempo.
Probióticos
Lo que indica la investigación: Las “bacterias buenas”, muy conocidas por ayudar a fomentar la salud intestinal, también podrían contribuir a la prevención de las infecciones del tracto respiratorio, según un análisis de 2015.
¿Son seguros? Las pastillas en ocasiones pueden provocar hinchazón y gases, y podrían llevar a infecciones en las personas con un sistema inmunitario muy debilitado.
Consejo de CR: Consumir yogurt y otros alimentos ricos en probióticos está bien, pero no hay suficiente evidencia para justificar el hecho de tomar pastillas de probióticos para combatir el resfriado o la influenza.
Vitamina C
Lo que indica la investigación: Las personas que toman 200 mg de esta vitamina cada día podrían tener resfriados ligeramente más cortos que las demás personas, según una revisión de 29 ensayos realizada en 2013. Pero tomar una gran cantidad de la vitamina después de la aparición de los síntomas no parece ser de ninguna ayuda.
¿Es segura? Las pastillas hacen que sea más probable que se formen piedras en los riñones, y las dosis altas pueden provocar náuseas y diarrea. También podría interactuar con los medicamentos para el cáncer, los anticoagulantes y el estrógeno.
Consejo de CR: Una recomendación mejor: Incluir de forma regular alimentos ricos en vitamina C, como las verduras y las frutas cítricas, en tu dieta.
Zinc
Lo que indica la investigación: Un análisis de 2015 encontró que las pastillas y el jarabe de zinc reducían la duración y la gravedad de los resfriados si se empezaban a tomar en el plazo de 24 horas tras el inicio de los síntomas.
¿Es seguro? Los posibles efectos secundarios incluyen la diarrea, las náuseas, los calambres estomacales y el vómito. El uso a largo plazo, especialmente en dosis altas, puede provocar una deficiencia de cobre, lo que puede desencadenar una anemia.
Consejo de CR: Los beneficios inciertos del zinc no valen la pena con respecto a los riesgos potencialmente graves.
Si quieres leer más, visita Consumer Reports.