Este contenido ha sido archivado y puede no estar actualizado

Los casos y las muertes por la COVID se desploman en los hogares de ancianos tras el despliegue de vacunas

JUEVES, 25 de febrero de 2021 (HealthDay News) --Los hogares de ancianos de EE. UU., que en un momento fueron el epicentro de las infecciones con el coronavirus, ahora están experimentando un marcado descenso tanto en los casos como en las muertes, a medida que el despliegue de vacunas del país comienza a afianzarse, un giro que ofrece esperanzas.

De finales de diciembre a principios de febrero, los casos nuevos entre los residentes de los hogares de ancianos de EE. UU. se redujeron en más de un 80 por ciento, una tasa que es casi el doble que la tasa de mejora en la población general, reportó el The New York Times . La tendencia a la baja en las muertes fue incluso más alentadora: mientras las muertes se dispararon en general en invierno, las muertes en los hogares de ancianos se han reducido en más de un 65 por ciento.

Los casos y las muertes por la COVID se desploman en los hogares de ancianos tras el despliegue de vacunas

"Casi no tengo palabras para describir lo increíble y emocionante que es", declaró al Times el Dr. David Gifford, director médico de la Asociación Americana de la Atención de la Salud (American Health Care Association), que representa a miles de centros de cuidados a largo plazo en todo el país.

La buena noticia llega justo a tiempo. Desde principios de la pandemia, el coronavirus ha asolado a unos 31,000 centros de cuidados a largo plazo en Estados Unidos, ha acabado con las vidas de más de 163,000 residentes y empleados, y ha conformado más de un tercio de todas las muertes por virus desde finales de la primavera, según el Times.

Pero con la llegada de las vacunas, que se enviaron a los centros de cuidados a largo plazo a partir de finales de diciembre, los nuevos casos y muertes en los hogares de ancianos se han reducido de forma marcada, superando a los declives nacionales, reportó el Times. Ofrece un primer vistazo de lo que podría esperar al resto del país, a medida que más personas se vacunen.

"Si observamos una respuesta robusta con estas vacunas en las personas mayores ante una enfermedad altamente contagioso, creo que es una gran señal para el resto de la población", aseguró Gifford al Times.

Unos 4.5 millones de residentes y empleados de centros de cuidados a largo plazo han recibido al menos una dosis de una vacuna, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU., entre ellos unos 2.1 millones que se han vacunado por completo.

Ahora, los nuevos casos en los hogares de ancianos han llegado al punto más bajo desde mayo, cuando el gobierno federal comenzó a rastrear estos datos, dijo el Times.

"Lo que sin duda me sorprende es la rapidez", aseguró al Times el Dr. Sunil Parikh, profesor asociado de epidemiología y medicina de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Yale, en Connecticut.

"Es un declive dramático", dijo, y añadió que se necesita más investigación para determinar si la primera dosis de la vacuna podría ofrecer más protección de lo que se pensaba.

Para intentar responder a esa pregunta, la Asociación Americana de la Atención de la Salud observó a casi 800 hogares de ancianos que recibieron temprano unas dosis de la vacuna en diciembre, y comparó el número de casos de la COVID-19 con los centros de los mismos condados donde todavía no había una clínica de vacunas. Los hogares de ancianos que recibieron la vacuna temprano experimentaron una reducción del 48 por ciento en los casos entre los residentes, en comparación con un 21 por ciento entre los hogares de ancianos cercanos, señaló el Times.

La vacuna contra la COVID de una sola dosis de J&J previene la enfermedad grave

Una sola inyección de la vacuna contra el coronavirus producida por Johnson & Johnson previno todas las hospitalizaciones y las muertes en un ensayo clínico de gran tamaño, encontró una nueva revisión publicada el miércoles por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU.

La que sería la tercera vacuna autorizada en Estados Unidos para su uso de emergencia se podría aprobar incluso este fin de semana, reportó el Washington Post. La vacuna de J&J tuvo una efectividad de más de un 85 por ciento en la prevención de la enfermedad grave, incluso en una región dominada por una variante preocupante, pero una protección de solo un 66 por ciento en general cuando se incluyeron los casos moderados.

Los científicos de la FDA encontraron que los "beneficios conocidos" de la vacuna incluían reducir el riesgo de casos sintomáticos y graves de la COVID-19, al menos dos semanas tras la vacunación. La revisión encontró que su eficacia contra la enfermedad grave "tuvo un nivel similar en Estados Unidos, Sudáfrica y Brasil".

"Sabemos que esta vacuna previene un 85 por ciento de los casos de enfermedad grave. . . . Tuvo una efectividad del 100 por ciento en la prevención de las hospitalizaciones y las muertes, y esto es lo que de verdad resulta importante", declaró al Post Nancy Bennet, profesora de medicina y ciencias de la salud pública de la Facultad de Medicina y Odontología de la Universidad de Rochester. "Esos hechos son la cosa más importante que reconocer".

La vacuna fue menos efectiva en un subgrupo de adultos de a partir de 60 años que también tenían factores de riesgo de una enfermedad grave, pero los reguladores anotaron que no hubo muertes ni casos que requirieran una intervención médica un mes después de que esos adultos mayores recibieran las vacunas. En general, hubo siete muertes en el ensayo, todas en el grupo que recibió la inyección de placebo, reportó el Post.

Un panel asesor de la FDA se reunirá el viernes para recomendar si la FDA debe autorizar o no el uso de emergencia de la vacuna.

Las autoridades de salud pública han esperado ansiosamente la llegada de la vacuna de J&J, porque se puede almacenar en una nevera durante varios meses, lo que aliviaría las dificultades de distribuir la vacuna a temperatura bajo cero, y no requiere una dosis de refuerzo posterior, según el Post.

Pfizer y Moderna afirman que pronto habrá un gran aumento en los suministros de vacunas

El martes, los funcionarios tanto de Pfizer como de Moderna dieron al Congreso una buena noticia sobre sus vacunas contra la COVID-19. Habrá un marcado aumento en la entrega de dosis el próximo mes, y podrán proveer suficientes dosis para haber vacunado a la mayoría de los estadounidenses en verano.

A finales de marzo, Pfizer y Moderna prevén haber entregado un total de 220 millones de dosis de sus vacunas al gobierno de EE. UU., un aumento significativo respecto a los más o menos 82 millones de dosis que, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU., han despachado hasta ahora.

"Creemos que vamos por buen camino", aseguró el presidente de Moderna, Stephen Hoge, a un subcomité de la Cámara tras describir la forma en que la compañía ha aumentado la producción. "Creo que estamos en un muy buen sitio".

La alentadora noticia llega mientras los reguladores federales planifican evaluar el uso de emergencia de una tercera vacuna contra la COVID-19, de Johnson & Johnson, a finales de esta semana. La administración de Biden señaló el martes que prevé que unos 2 millones de dosis de esa vacuna se despachen en la primera semana tras la aprobación, y la compañía informó a los legisladores que proveería suficientes suministros de la opción de una sola dosis para haber vacunado a 20 millones de personas a finales de marzo, según Associated Press.

Pfizer y Moderna dijeron que preveían haber completado el despacho de 300 millones de dosis cada una en verano, mientras que J&J busca ofrecer unos 100 millones de dosis adicionales. Esto sería más que suficiente para vacunar a todos los adultos estadounidenses, reportó AP.

Dos otros fabricantes, Novavax y AstraZeneca, están produciendo vacunas, y prevén que al final ampliarán esos totales, dijo AP.

Cuando se les preguntó si se enfrentan a una escasez de materia prima, equipos o fondos que pudiera retrasar la entrega de las vacunas, todas las compañías testificaron que tenían suficientes suministros y que ya habían resuelto algunos cuellos de botella tempranos en la producción.

"En este momento, puedo confirmar que no experimentamos ninguna escasez de materia prima", aseguró John Young, de Pfizer.

Incluso si no hay más interrupciones, otros problemas podrían de cualquier forma retrasar o evitar que Estados Unidos haya vacunado a entre un 70 y un 80 por ciento de su población, el umbral crítico necesario para neutralizar la propagación del coronavirus, en verano.

Hasta el jueves, casi 66.4 millones de personas habían recibido al menos una dosis de una vacuna contra la COVID-19, lo que incluye a 20.6 millones de personas que han recibido ambas dosis, según los CDC.

Un azote global

El jueves, el conteo de casos de coronavirus de EE. UU. había superado los 28.3 millones, mientras que el número de muertes superó a las 505,600, según los cálculos del Times. El jueves, los cinco estados con más casos de infecciones con el coronavirus eran: California, con más de 3.5 millones de casos; Texas, con más de 2.6 millones de casos; Florida, con casi 1.9 millones de casos; Nueva York, con más de 1.6 millones de casos; e Illinois, con cerca de 1.2 millones de casos.

Frenar la propagación del coronavirus en el resto del mundo sigue resultando difícil.

En India, el número de casos de coronavirus superó los 11 millones el jueves, mostró un conteo de la Universidad de Johns Hopkins. Por otra parte, el jueves Brasil tenía poco más de 10.3 millones de casos y casi 250,000 muertes, mostró el conteo de la Hopkins.

En todo el mundo, el número de infecciones reportadas superó los 112.6 millones el jueves, con casi 2.5 millón de muertes registradas, según el conteo de la Hopkins.

Más información

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. ofrecen más información sobre el nuevo coronavirus.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com


FUENTES: Associated Press; Washington Post; The New York Times

Comparte tu opinión