Varias investigaciones anteriores han encontrado que tener un mayor control sobre el trabajo puede ayudar a manejar el estrés relacionado con éste. Pero nunca se sugirió que era una cuestión de vida o muerte, hasta ahora.
Un nuevo estudio de la Universidad de Indiana halló que las personas que están en puestos laborales de alta tensión y con poco control sobre su flujo de trabajo, mueren más jóvenes o son menos saludables que los que tienen más flexibilidad y son capaces de fijar sus propios objetivos como parte de su empleo.
Utilizando una muestra de 2,363 personas de 60 años de Wisconsin durante un período de siete años, encontraron que los empleos con poco control del flujo y con altas demandas, se asociaron con un aumento del 15,4 % en el riesgo de muerte, en comparación con aquéllos de menor demanda en su empleo.
"Exploramos solicitudes de empleo, cantidad de trabajo, la presión del tiempo, las demandas de concentración en un puesto y el control sobre sus responsabilidades, o la capacidad que uno tiene sobre la toma de decisiones en el trabajo, como predictores comunes de muerte" dijo Erik Gonzalez-Mulé, profesor de la Escuela de Negocios Kelley y autor principal del estudio.
Trabajar bajo presión
"Estos hallazgos sugieren que los trabajos estresantes tienen consecuencias negativas para la salud cuando se combinan con poca libertad en la toma de decisiones, mientras que los empleos estresantes en realidad pueden ser beneficiosos si se combinan con libertad" señaló Gonzalez-Mulé.
El estudio, "Trabajar hasta la muerte: las relaciones de las demandas del trabajo y de control del trabajo con la mortalidad" será pubicado en The Journal Personnel Psychology.
Gonzalez-Mulé señaló que los resultados no sugieren que los empleadores necesariamente tengan que reducir sus expectativas sobre los empleados. Por el contrario, dijo, "se pueden evitar las consecuencias negativas para la salud si se les permite fijar sus propias metas, establecer sus propios horarios, obtener prioridad en la toma de decisiones y realizar aportes similares. También se recomienda que las empresas permitan que los empleados opinen sobre los objetivos y procesos".
Entre las personas de la muestra, el autor y sus colegas también encontraron que aquéllas con puestos de trabajo de alta demanda y poco control sobre el flujo, eran más obesas.
"Cuando usted no tiene los recursos necesarios para hacer frente a un trabajo exigente, hace estas otras cosas: es posible que coma más, que fume más” puntualizó el autor principal.
Por último agregó: "las investigaciones muestran que las personas que tienen una conexión social con los beneficios de su trabajo, están mucho más satisfechas y tienen menos estrés laboral, sin necesidad de cambiar de trabajo".