Para qué es buena el agua de arroz y cómo se hace

Cómo su nombre lo indica, el agua de arroz es el líquido con almidón que se obtiene tras hervir o dejar en remojo el arroz.

Desde hace siglos en el sudeste asiático, especialmente en China y Japón, se le han adjudicado muchos beneficios, especialmente sobre la piel y el cabello. Pero ¿qué tan efectivas son sus propiedades? Aquí vamos a repasarlo.

El agua de arroz se asocia a diferentes beneficios, como cuidado de la piel y el cabello. | Foto: GETTY IMAGES

Puntos clave

  • El arroz es un alimento imprescindible en muchas gastronomías del mundo.
  • Para preparar agua de arroz existen diferentes procedimientos, como remojo, fermento o hervido. 
  • Esta preparación se suele utilizar con distintos fines medicinales, como cuidado del cabello, aliviar la diarrea o proteger la salud de la piel.

El arroz es la semilla de la planta Oryza sativa (también conocida como arroz asiático) o Oryza glaberrima (también conocida como arroz africano).

Es un alimento imprescindible en muchas gastronomías del mundo. Esto se refleja en que es el segundo cereal más producido a nivel mundial (alrededor de 740 millones de toneladas) detrás del maíz (alrededor de 1000 millones de toneladas).

Sin embargo, los expertos señalan que, debido a que el maíz puede utilizarse con otros propósitos, se puede considerar al arroz como el cereal más importante para la alimentación humana.

Los granos de arroz contienen entre 75 y 80% de almidón, cuya función es aportar energía en forma de calorías. También ofrecen vitaminas, especialmente B y E, minerales, aminoácidos y compuestos antioxidantes.

Esta importante calidad nutricional también puede encontrarse en el agua de arroz, por lo que su uso se asocia a distintos beneficios para la salud:

Contra la diarrea

El agua de arroz es uno de los remedios caseros más antiguos para combatir la diarrea, por lo que este efecto se ha investigado durante años.

En un estudio publicado en British Medical Journal un grupo de expertos suministró agua de arroz a más de 1.300 pacientes con diarrea.

Los autores observaron que la misma disminuyó en un 36% tras las primeras 24 horas. Para aprovechar estas propiedades fue necesario beber entre 2 y 3 tazas diarias.

Los expertos señalan que su acción terapéutica se debe al almidón, que al entrar en contacto con la mucosa intestinal hace que ésta absorba los líquidos, reduciendo así las deposiciones liquidas.

Cuidado del cabello

Históricamente, el agua de arroz se utilizó como acondicionador natural del cabello, especialmente la región del sudeste asiático.

Según la medicina natural, esta preparación es capaz de reducir la fricción superficial del cabello y aumentar su elasticidad.

Para ello, se debe lavar normalmente el cabello con champú. Luego de enjugar bien se aplica agua de arroz y realizan leves masajes para estimular la circulación sanguínea y absorción de los nutrientes. Se deja actuar durante 15 a 20 minutos, y se vuelve a enjugar con agua tibia.

Algunos estudio señalan la posibilidad de que los beneficios del agua de arroz sobre el cabello se deban a una de sus sustancias, inositol, que se ha vinculado a un fortalecimiento capilar y mejor proceso de renovación celular.

Sin embargo, no existe suficiente evidencia científica que pruebe la efectividad de este tratamiento.

Tónico facial

Por su importante concentración de antioxidantes, minerales, y fácil preparación, el agua de arroz se convirtió en un popular tratamiento de belleza casero.

Desde la medicina tradicional se asegura que usándola regularmente se pueden reducir las manchas o marcas en la piel, como líneas y arrugas.

También puede actuar como hidratante y suavizante, gracias a que estimula la circulación sanguínea, y como antiinflamatorio, cuando se la usa fría.

Aunque se la suele recomendar para reducir la irritación y enrojecimiento facial, causado por la rosácea o la exposición a los rayos del sol, no existe evidencia que respalde su efectividad.

Cómo hacer agua de arroz

Preparar agua de arroz es muy sencillo y existen diferentes formas hacerlo:

Remojo

Para este método solo necesitas usar una parte de arroz por seis de agua. Enjuaga bien los granos y colócalos en un recipiente limpio, luego agrega el agua hasta cubrir.

Déjalos en remojo durante media hora, cuela en un nuevo recipiente, y ya está listo para usar. Se aconseja reservar la preparación en la nevera para que dure más tiempo. Tras una semana, deberás desecharla.

Fermento

Muchos aseguran que la mejor forma de aprovechar las propiedades del agua de arroz es fermentándola. Esto se debe a que existe evidencia que indica que las sustancias fermentadas tienen una mayor concentración de antioxidantes.

Los antioxidantes son sustancias útiles para combatir el daño celular que causan los radicales libres, moléculas inestables que aumentan el riesgo de muchas afecciones.

Para obtener agua de arroz fermentada debes repetir los pasos para hacerla en remojo, pero en lugar de dejar reposar el arroz media hora, hacerlo durante dos días. Luego cuela y deposita en un recipiente limpio.

Hervido

Para esta opción deberás cocer el arroz como normalmente lo haces, pero el usando el doble de agua.

Una vez que el arroz esté listo, apaga el fuego, pero déjalo reposar en el agua durante cinco minutos más antes de colar. Con esto, se busca obtener la característica agua blancuzca.

Cuando enfríe podrás usarla sin problemas, recuerda guardar lo que sobre en la nevera para poder usarlo durante más tiempo.

Para recordar:

Hasta contar con evidencia científica significativa proveniente de ensayos en humanos, las personas interesadas en utilizar terapias a base de hierbas y suplementos deben tener mucho cuidado.

No abandones ni modifiques tus medicamentos o tratamientos, antes habla con el doctor sobre los potenciales efectos de las terapias alternativas o complementarias.

Recuerda, las propiedades medicinales de las hierbas y suplementos también pueden interactuar con los fármacos recetados, con otras hierbas y suplementos, e incluso alterar tu dieta.

Fuentes consultadas: Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Clínica Mayo, Departamento de Agricultura de EE. UU., Instituto Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa.