La influenza o gripe estacional es una enfermedad respiratoria contagiosa provocada por los virus de la influenza que infectan la nariz, la garganta y, en algunos casos, los pulmones. Este virus puede causar una enfermedad leve o grave y en ocasiones puede llevar a la muerte. La mejor manera de prevenir la influenza es administrarse la vacuna todos los años.
Las personas que contraen influenza a menudo presentan algunos o todos de estos signos y síntomas, que por lo general comienzan repentinamente y no en forma gradual: fiebre, escalofríos, tos, dolor de garganta, mucosidad nasal o nariz tapada, dolores musculares y corporales, dolores de cabeza, fatiga (cansancio extremo). Algunas personas pueden tener vómitos y diarrea.
Los expertos advierten que los virus de la influenza se transmiten principalmente a través de las pequeñas gotas que se producen cuando las personas con influenza tosen, estornudan o hablan. Esas gotitas pueden caer en la boca o en la nariz de las personas que se encuentran cerca. Con menor frecuencia, una persona también puede contraer influenza si toca un objeto contaminado con el virus de la influenza y se toca luego la boca.
Las complicaciones de la influenza pueden incluir neumonía bacteriana, infecciones del oído, sinusitis y agravamiento de las afecciones crónicas, como insuficiencia cardiaca congestiva, asma o diabetes. Cualquier persona puede contraer la influenza (incluso las sanas) pero corren más riesgo las personas mayores de 65 años, aquellas que tienen afecciones crónicas (como asma,diabetes o enfermedades cardíacas), las mujeres embarazadas.
La gripe ha tenid una intensidad inusual en Estados Unidos y según los últimos informes a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, se extendió en 46 estados, incluido California. A partir de mediados de diciembre, al menos 106 personas habían muerto a causa de la enfermedad infecciosa. Y en todo el país se reportaron hospitalizaciones.
El subtipo de influenza A H3N2 que parece ser más prevalente, este año es particularmente desagradable, con síntomas más severos que incluyen fiebre y dolores en el cuerpo. En Australia se reportó un número récord de casos confirmados de gripe en 2017. Otro subtipo del virus de la influenza B también circula.
De octubre a mayo
La temporada de gripe en el hemisferio Norte generalmente comienza en octubre y finaliza en mayo, y alcanza un máximo entre diciembre y febrero "Estamos viendo lo peor en este momento", dijo el Dr. Randy Bergen, un pediatra que dirige el esfuerzo contra la gripe de Kaiser Permanente-Northern California. "No sé cuándo va a parar".
Es probable que la vacuna contra la gripe de esta temporada sea menos efectiva que en años anteriores. Expertos, incluso, señalan que no sabrán completamente cuán efectiva sea hasta que termine el período. Pero la experiencia de Australia indicó que la efectividad fue solo del 10 por ciento. En realidad, las vacunas son menos protectoras si las cepas son diferentes a las predichas y ocurren mutaciones inesperadas.
Algunas medidas específicas pueden hacer la diferencia y evitar que tú y tu familia pasen días enteros en la cama. En la medida de lo posible, evita las personas que están enfermas. Lávate las manos con frecuencia y evita tocarte la boca, la nariz y los ojos. Las máscaras no son particularmente efectivas para evitar que contraigas la gripe, aunque pueden ayudar a evitar que las personas enfermas que las usan propaguen sus gérmenes aún más.
Reposa y recupérate
Si a pesar de las medidas te enfermas, entonces cúbrete la boca cada vez que tosas, guarda reposo, mantente hidratado, come alimentos nutritivos y haz ejercicio porque puede ayudarte a fortalecer su sistema inmunológico.
No te confundas
Las características de la gripe son fiebre y dolores corporales que acompañan a la tos y la congestión. Si sientes que tienes problemas para respirar o si no puedes controlar tu fiebre con medicamentos como Tylenol, consulte a tu médico. Es aún más importante que los pacientes vean a un médico si tienen una afección médica crónica como diabetes o enfermedad cardíaca, o si son jóvenes o ancianos.
Los medicamentos son parcialmente efectivos, reducen el tiempo de enfermedad a solo uno o dos días. Si la gripe no coincide con el virus que circula actualmente, la vacuna ayuda a aliviar la gravedad y la duración de los síntomas. Las vacunas de dosis altas se recomiendan para las personas mayores, que también son excepcionalmente vulnerables a la enfermedad.
Fuentes consultadas
OMS
Biblioteca Nacional de Medicina
Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades