¿Algunos días te sientes muy feliz y con mucha energía y otros días muy triste y deprimido? Éste y otros síntomas son parte del trastorno bipolar, que requiere de un tratamiento serio y profesional. Conoce la diferencia entre los cambios de humor y el trastorno bipolar, y cómo se puede tratar esta enfermedad, según la palabra de los especialistas del Instituto Nacional de Salud Mental (NIH).
¿Qué es el trastorno bipolar?
Es una enfermedad grave del cerebro. También se conoce como enfermedad maníaco-depresiva o depresión maníaca. Las personas con trastorno bipolar tienen cambios inusuales en el estado de ánimo. A veces se sienten muy felices y “animadas” y son mucho más enérgicas y activas de lo habitual. Otras veces, se sienten muy tristes y “deprimidas”,
¿Es lo mismo tener altibajos que ser bipolar?
No. Los “altibajos” del trastorno bipolar no son iguales que los que todos tenemos. En ellos, los cambios en el estado de ánimo son más extremos y vienen con insomnio y menos capacidad de pensar con claridad. Los síntomas bipolares son tan fuertes que perjudican las relaciones, el estudio, el trabajo. Y puede ser peligroso: algunas personas intentan suicidarse.
El trastorno bipolar se puede presentar en cualquier persona, la causa aún no está muy clara, pero podrían influir factores genéticos y algún defecto en la formación del cerebro. Con frecuencia, los síntomas comienzan a presentarse en la adolescencia tardía o la adultez temprana, pero pueden aparecer en niños y adultos. Por lo general, la enfermedad dura toda la vida.
¿Cuáles son los síntomas del trastorno bipolar?
Hay dos fases: los episodios anímicos y los depresivos. Las personas con trastorno bipolar pueden tener episodios maníacos, episodios depresivos o episodios "mixtos". Los síntomas de un episodio anímico duran una o dos semanas y, a veces más. Cuando alguien está pasando por uno de estos episodios, los síntomas se le presentan todos los días y duran la mayor parte del día.
Los episodios anímicos
Los episodios anímicos son intensos. Las personas pueden: sentirse muy “animadas” o felices, nerviosas o aceleradas, tener problemas para dormir, ser más activas, hablar muy rápido sobre muchas cosas, estar agitadas, irritables y sensibles, sentir que sus pensamientos van muy rápido, pensar que pueden hacer muchas cosas a la vez, hacer cosas arriesgadas, como gastar mucho dinero o tener sexo imprudente.
En esta fase las personas pueden: sentirse muy “decaídas” o tristes, dormir mucho o muy poco, sentir que no pueden disfrutar de nada, sentirse preocupadas o vacías, tener problemas para concentrarse, olvidarse mucho las cosas, comer demasiado o muy poco, sentirse cansadas o sin energía, tener dificultad para dormirse, pensar en la muerte o el suicidio.
¿Cómo se trata el trastorno bipolar?
Por ahora, no hay cura para el trastorno bipolar, pero el tratamiento puede ayudar a controlar los síntomas. La mayoría de las personas pueden obtener ayuda para controlar los cambios en el estado de ánimo y los problemas de comportamiento. El tratamiento funciona mejor cuando es constante y no se lo interrumpe. Las opciones de tratamiento incluyen:
1. Medicamentos
Hay diversos tipos de medicamentos que pueden dar buenos resultados. Las personas responden de diferentes maneras a los medicamentos, por lo que el tipo correcto de éste depende de cada persona. A veces, es necesario probar más de un tipo de medicina para ver cuál da el mejor resultado.
Hay diferentes tipos de psicoterapia o terapia de diálogo que puede ayudar a las personas con trastorno bipolar. La terapia puede ayudarles a cambiar su comportamiento y ayudarles a llevar su vida. También puede ayudar a los pacientes a llevarse mejor con la familia y los amigos. A veces, la terapia incluye a los miembros de la familia.
3. Otros tratamientos
Algunas personas no mejoran con los medicamentos y la psicoterapia. Estas personas pueden tratar la terapia electroconvulsiva. Esto a veces se conoce como terapia de "choque". Ésta proporciona una corriente eléctrica rápida que a veces puede corregir algunos problemas en el cerebro.
4. Medicina alternativa
Algunas personas toman suplementos naturales o a base de hierbas, como la hierba de San Juan (St. John’s Wort en inglés) o ácidos grasos omega-3. Consúltale a tu médico antes de tomar cualquier suplemento. Los científicos no están seguros de cómo estos productos afectan a las personas que tienen trastorno bipolar. Es posible que algunas personas también necesiten medicamentos para dormir.