Todos nos hemos caído alguna vez y sabemos que, sin importar la edad, puede ser un accidente peligroso.
Sin embargo, a medida que se envejece el riesgo y la fatalidad también crecen. Conoce aquí los consejos de los expertos para evitar posibles lesiones.
Las caídas son definidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como acontecimientos involuntarios que hacen perder el equilibrio y dar con el cuerpo en tierra u otra superficie firme que lo detenga.
Se calcula que anualmente mueren en todo el mundo más de 645.000 personas debido a estos accidentes, siendo más comunes entre personas mayores de 65 años.
En EE. UU., cada año 3 millones de personas mayores son tratadas en departamento de emergencias por lesiones ocasionadas por caídas y más de 800.000 son hospitalizadas por estas lesiones, según estiman los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Según señala el Instituto Nacional de Geriatría (INGER), estos números son aún más graves en México, donde el 40% de los adultos mayores que sufren una caída fallecen en los siguientes dos años.
En ese país se calcula que 11 de cada 100 personas de 70 años o más ha sufrido alguna caída, una diferencia notable con China, por ejemplo, donde ocurren en 2 de cada 100.
A partir de diferentes investigaciones se conoció que diferentes factores de riesgo pueden promover estos accidentes. Entre ellos se destacan:
- Beber alcohol regularmente.
- Consumir ciertos medicamentos, como antidepresivos, sedantes o tranquilizantes.
- Entornos peligrosos en los que se desarrollan las actividades diarias, especialmente en el hogar.
- Padecer ciertas enfermedades, como diabetes, neuropatía o presión arterial baja.
- Sufrir debilidad del cuerpo inferior.
- Tener dificultades para mantener el equilibrio o caminar.
- Tener problemas de visión.
- Tener reflejos lentos.
- Tener una deficiencia de vitamina D.
Cómo prevenir las caídas
La Clínica Mayo recomienda las siguientes estrategias para minimizar el riesgo de caídas:
Comienza un plan prevención
Deberás consultar a un profesional de la salud, que evaluará los medicamentos y suplementos que sueles tomar, buscando posibles efectos secundarios o interacciones.
También analizará otros detalles sobre las caídas, por ejemplo, la frecuencia, lugar en el que ocurrieron o cómo reaccionaste frente a ellas, para elaborar estrategias preventivas.
Mantente en movimiento
La evidencia científica señala que la actividad física es una buena opción para prevenir las caídas. Tu médico puede ayudarte a elegir los mejores ejercicios dependiendo tu condición, como:
- Caminar.
- Nadar.
- Montar en bicicleta.
- Practicar ejercicios de coordinación y flexibilidad.
- Bailar.
- Realizar técnicas de relajación, como tai chi.
Usa calzado adecuado
Muchas veces opciones cómodas, como las pantuflas, o elegantes, como los tacones altos, pueden traicionarte, haciendo que resbales, tropieces o caigas.
Para evitar este problema, se aconseja utilizar zapatos resistentes y bien ajustados con suelas antideslizantes.
Mantén el orden
Puedes conocer tu casa como a la palma de tu mano, sin embargo, existen muchos peligros ocultos que pueden aumentar el riesgo de caídas: cajas, cables, macetas, ropa o alfombras.
Mantener el orden en este aspecto y organizar caminos de libre circulación te ayudará a prevenir accidentes.
Importancia de la iluminación
Mantén tu casa bien iluminada para evitar tropezar con objetos que son difíciles de ver. También puedes disponer de lámparas al alcance de la cama, para que te acompañen frente a cualquier necesidad que tengas durante la noche.
Dispositivos de ayuda
Tu médico podría recomendarte usar bastón o andador para mantener la estabilidad, como también instalar pasamanos, peldaños antideslizantes, apoyabrazos o barras de agarre en diferentes habitaciones de la casa, como, por ejemplo, el baño.
Incluso puedes recurrir a un terapeuta ocupacional, que te ayudará a pensar otras estrategias de prevención de caídas.
Si bien algunas de estas opciones pueden ser baratas, otras pueden significar un importante costo. Sin embargo, sobre esto último los profesionales de salud recuerdan que una inversión en prevención de caídas es una inversión en tu independencia.
Fuentes consultadas: Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, Clínica Mayo, Instituto Nacional de Geriatría, Organización Mundial de la Salud.