Aunque el mal aliento es un problema común, resulta muy incómodo y puede malograr una cita o una entrevista de trabajo. Simplemente, queremos deshacernos de él.
Uno de los recursos más conocidos para quitar la halitosis es la menta, pero ahora tienes un nuevo aliado: el té de jengibre.
Beber té de jengibre ayuda a desterrar el mal aliento, según la investigación reciente, ya que el gingerol, el químico que le da su sabor picante, estimula una enzima en la boca que descompone las sustancias que promueven el mal aliento.
Esta sustancia natural puede entrar en el cuerpo al consumir jengibre rallado o beber un té, eliminado el olor desagradable en sólo unos segundos, dicen los científicos.
Los investigadores de la Universidad Técnica de Munich, en Alemania, autores del hallazgo, probaron en voluntarios que las enzimas del jengibre descomponen el olor a azufre en la boca, modificando la saliva y el aliento de las personas, y encontraron que también mejora la respiración de las personas.
Con el jengibre, “nuestra respiración también huele mejor" explicó el profesor Thomas Hofmann, quien dirigió el estudio, y agregó que las compañías que fabrican productos de higiene oral podrían utilizar este producto para elaborar pastas y enjuagues bucales.
¿Cuál es la causa del mal aliento?
El mal aliento (halitosis) puede tener muchas causas y podría ser el signo de un problema subyacente.
La mayoría de los casos proviene de tener algo en la boca. Se alojan alimentos entre los dientes, alrededor de las encías y en la lengua. Si no te cepillas los dientes y no usas hilo dental todos los días, estos alimentos pueden descomponerse y provocar un olor desagradable, ya que promueven la formación de bacterias. Éstas pueden provocar enfermedad de las encías (gingivitis).
Las cosas que comes y bebes también pueden afectar tu aliento, según informa la Academia Americana de Médicos de Familia. Por ejemplo las cebollas, el ajo, el queso, el pastrami, determinadas especias, el jugo de naranja y las gaseosas.
El mal aliento también podría ser signo de un problema de salud. Las infecciones de los senos paranasales, las infecciones crónicas de los pulmones, las enfermedades del hígado o de los riñones, y la diabetes son algunas afecciones de la salud que pueden provocarlo.
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