Si alguna vez has pasado ese mal momento en una cita, en una entrevista de trabajo o simplemente hablando con amigos, no estás solo: el 50% de los adultos han tenido mal aliento, o halitosis, en algún momento de sus vidas.
Por qué huelo mal
Hay un número de razones por las que puedes experimentarlo. Mientras que muchas causas son inofensivas y pasajeras, el mal aliento a veces puede ser un signo de algo más serio. Conoce cuáles son las razones principales y aprende cómo deshacerte de este problema.
El mal aliento puede suceder en cualquier momento gracias a los cientos de tipos de bacterias que naturalmente viven en tu boca. Tu boca también actúa como un invernadero natural que permite que estas bacterias crezcan. Cuando comes, las bacterias se alimentan de la comida que queda en la boca y provocan un desecho maloliente.
¿Sensación de boca reseca? Podrías no estar produciendo suficiente saliva. Ésta es importante porque funciona todo el día para lavar la boca. Si no tienes suficiente, no se está limpiando como debería. La boca seca puede ser causada por ciertos medicamentos, problemas de las glándulas salivales o simplemente por respirar por la boca.
El mal aliento que simplemente no desaparece o un mal sabor constante en tu boca, puede ser una señal de advertencia de enfermedad avanzada de las encías, que es causada por una bacteria pegajosa, causante de la placa dental y posteriormente, de las caries.
Las cosas que comes también pueden afectar tu aliento. Ejemplos comunes de alimentos y bebidas que pueden provocarlo incluyen las cebollas, el ajo, el queso, el pastrami, las comidas picantes, determinadas especias, el jugo de naranja y las gaseosas.
Fumar mancha los dientes, te da mal aliento y te pone en riesgo de una serie de problemas de salud. El tabaco reduce tu capacidad de probar los alimentos e irrita los tejidos de las encías. Los usuarios de tabaco son más propensos a sufrir de enfermedad de las encías, y como fumar también afecta el sentido del olfato, los fumadores pueden no ser conscientes de cómo huele su aliento.
En personas con insuficiencia renal crónica, el mal aliento o halitosis, puede tener un olor similar al amoníaco (también descripto como un olor parecido a la orina o a "pescado"). Por eso, si la higiene y la comida no es el problema, presta atención al tema renal.
7. La diabetes
Dentro de los síntomas de la diabetes, se encuentra el de padecer daño en las encías y el consiguiente mal aliento. Las personas con diabetes deben extremar el cuidado dental.
7. Infecciones pulmones y resfirados
Como si no fueran lo suficientemente molestas, las infecciones del tracto respiratorio como resfriados, bronquitis y enfermedades pulmonares, también pueden dar mal aliento. Es que las bacterias que causan olores están presentes en el moco. Y si además tienes la nariz congestionada, es probable que respires por la boca, y eso ocasiona boca seca y mal olor.
8. Reflujo ácido y acidez
Estos son dos síntomas de GERD (enfermedad de reflujo gastroesofágico), un trastorno digestivo común. El mal aliento puede ser de algún alimento no digerido que vuelve, o podría ser que la irritación del ácido del estómago está provocando un goteo postnasal. En este caso, hay que consultar al médico.
9. Dientes agrietados o arreglados
Las grietas o cavidades abiertas pueden atrapar las partículas de alimentos y las bacterias, resultando en caries, enfermedad de las encías y el mal aliento. Pero además, las dentaduras arregladas y mal ajustadas o con baches, pueden causar los mismos problemas.
10. Mala higiene de la lengua
Las bacterias en la lengua son la principal causa de mal aliento. Límpiala con tu cepillo de dientes o un raspador de lengua. Los raspadores harán un trabajo ligeramente mejor. Evita los quebradizos de plástico, que podrían romper, así como los de metal, que pueden ser agresivos.
Cómo tener buen aliento
Cepilla dos veces al día y limpia entre los dientes con hilo dental .Si usas prótesis extraíbles, límpialas bien antes de volver a usarlas en la mañana siguiente. Trata de comer alimentos saludables que requieren mucha masticación, como zanahorias o manzanas. También puedes tratar de mascar chicle sin azúcar o chupar dulces sin azúcar. Deja de fumar y visita al dentista regularmente.
Fuentes consultadas
Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU., Asociación Dental Americana (ADA), Academia Americana de Médicos de Familia.