Este contenido ha sido archivado y puede no estar actualizado

Unos procesos similares podrían vincular a la EM con la enfermedad cardiaca

MIÉRCOLES, 22 de marzo de 2023 (HealthDay News) -- Tanto la esclerosis múltiple (EM) como la aterosclerosis implican un endurecimiento anómalo de tejido corporal, y una investigación reciente sugiere que podrían estar vinculadas.

La EM es una enfermedad neurodegenerativa que afecta el cerebro y la médula espinal. La ateroesclerosis es un endurecimiento de las arterias.

Unos procesos similares podrían vincular a la EM con la enfermedad cardiaca

Los estudios muestran conexiones entre ambas, según el Sistema de Salud Ochsner (Ochsner Health), en Nueva Orleáns. En 2018, un equipo de investigadores rumanos, dirigido por la Dra. Raluca Ileana Mincu de la Universidad de Medicina y Farmacia Carol Davila, en Bucarest, usó ecocardiografía de punta para realizar evaluaciones cardiacas y vasculares en pacientes con EM.

Los exámenes, que muestran cómo la sangre fluye a través del corazón y las válvulas, encontraron que los pacientes con EM tenían más deficiencias en ambos lados del corazón, en comparación con las personas sanas.

Un estudio más reciente dio seguimiento a más de 84,000 personas durante 10 años, y comparó la salud cardiaca de los participantes con y sin EM. Las personas con EM tenían un 50 por ciento más de probabilidades de morir de enfermedad cardiaca, encontraron los investigadores. Tenían un 28 por ciento más de probabilidades de sufrir un ataque cardiaco, y un 59 por ciento más de probabilidades de sufrir un accidente cerebrovascular. Raffaele Palladino, del Colegio Imperial de Londres, dirigió el estudio.

Los hallazgos resaltan la importancia de unos exámenes cardiacos integrales para las personas con EM. Unas técnicas avanzadas pueden ayudar a prevenir una enfermedad cardiaca potencialmente letal en los pacientes con un riesgo alto.

Esta investigación preliminar no muestra que la EM provoque aterosclerosis, pero está surgiendo una fuerte asociación entre ambas, según Ochsner Health.

Se necesitan más estudios para comprender los procesos subyacentes que vinculan a estas dos afecciones.

En la aterosclerosis, unos depósitos de grasa se acumulan en las arterias, lo que provoca un engrosamiento de la pared del vaso sanguíneo, que reduce el flujo de oxígeno. Como resultado, solo pueden llegar unos niveles más bajos de oxígeno y de nutrientes importantes a distintas partes del cuerpo.

Es una afección crónica, y puede conducir a enfermedad de las arterias coronarias, a la angina, a la enfermedad de las arterias periféricas, y a problemas renales.

Las causas no se comprenden del todo, según la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association), pero unos niveles elevados de colesterol y triglicéridos en la sangre, la hipertensión, fumar cigarrillos y la diabetes son factores de riesgo.

En la EM, el sistema inmunitario del cuerpo ataca por error a su propio sistema nervioso central. Esto interrumpe las señales entre el cerebro y la médula espinal y otras partes del cuerpo, lo que conduce a un tejido cicatrizado endurecido tras cada ataque.

Alrededor de 1 millón de adultos de EE. UU. viven con EM. Los síntomas pueden incluir un deterioro de la visión, cambios sensoriales, cambios cognitivos, debilidad, dolor, fatiga, incontinencia intestinal y urinaria, un deterioro de la coordinación y dificultades para caminar, según la Sociedad Nacional de la EM (National MS Society).

Más información

Los Institutos Nacionales de la Salud de EE. UU. ofrecen más información sobre la aterosclerosis, y la Sociedad Nacional de la Esclerosis Múltiple ofrece más información sobre la EM.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

FUENTE: Ochsner Health, news release, March 17, 2023

Comparte tu opinión