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Es 1,000 veces más probable que la COVID se transmita por el aire que en las superficies, según un estudio

MIÉRCOLES, 4 de mayo de 2022 (HealthDay News) -- Si todavía desinfecta cada producto de su compra, los pomos de las puertas y los interruptores de la luz para intentar no contraer la COVID-19, quizá pueda relajarse un poco. Es 1,000 veces más probable que se contagie de COVID por el aire que respira que por las superficies, sugiere un estudio reciente.

Unos investigadores de la Universidad de Michigan evaluaron muestras de aire y de superficies de alrededor del campus, y encontraron que hay más probabilidades de inhalar el virus que de recogerlo con los dedos.

Es 1,000 veces más probable que la COVID se transmita por el aire que en las superficies, según un estudio

"En este estudio, buscamos comprender mejor las exposiciones potenciales al coronavirus SARS-CoV-2, que es el virus que causa a la COVID-19, en varios ambientes del campus universitario", explicó el autor del estudio, Richard Neitzel, profesor de ciencias de la salud ambiental y salud pública global.

Entre los ambientes se incluyeron oficinas, aulas, espacios para la realización de espectáculos, cafeterías, autobuses y un gimnasio. Pero las muestras se tomaron durante los cierres por la pandemia, de forma que los espacios estaban relativamente vacíos.

"También usamos información sobre las infecciones de COVID-19 en el campus para estimar las probabilidades de infección asociadas con nuestras medidas ambientales", añadió Neitzel.

"El riesgo general de exposición a los virus fue bajo en todos los lugares que medimos", afirmó.

Pero "nuestros resultados sugieren que había un riesgo mucho más alto de infección por la inhalación que por el contacto con superficies como los pomos de las puertas, las fuentes de agua, los teclados, los escritorios, los lavamanos y los interruptores de la luz", anotó.

Para comprender el riesgo relativo, entre agosto de 2020 y abril de 2021, Neitzel y sus colaboradores usaron bombas de aire e hisopados en varios lugares del campus cerrado.

En total, se recolectaron más de 250 muestras de aire, de las cuales un 1.6 por ciento dieron positivo del virus que provoca a la COVID. De más de 500 muestras de superficies, un 1.4 por ciento dieron positivo.

El ambiente más riesgoso fue el gimnasio, donde se encontraron indicaciones positivas en un 75 por ciento de las muestras de aire y en un 50 por ciento de las muestras de las superficies. La mayoría de las superficies contaminadas en el gimnasio implicaban a los botones de las fuentes de agua. Ninguna muestra tomada del equipo del gimnasio resultó positiva.

En general, se encontraron muchas menos lecturas positivas en los espacios de oficina o alrededor de los teclados de las computadoras, los interruptores de la luz, los tableros, los microondas, las manillas de las neveras o los pupitres de los estudiantes.

Pero tras comparar las muestras positivas con los casos reales de COVID en el campus, el equipo determinó que las probabilidades de contraer COVID tras la exposición a las partículas virales aéreas eran de más o menos 1 por cada 100 exposiciones.

Los investigadores determinaron que las probabilidades de enfermedad por una superficie contaminada era de 1 por cada 100,000 exposiciones.

Aun así, Neitzel enfatizó que los hallazgos reflejan un momento y un lugar en que se ejecutaban unos estrictos protocolos de limpieza de las superficies, y cuando no había muchedumbres. Advirtió que "nuestros resultados quizá no representen del todo a otros ámbitos comunitarios".

De cualquier manera, los resultados sugieren que a las personas les deben preocupar más los riesgos de inhalación del coronavirus que los riesgos de tocar las superficies, "al menos en un ambiente en que las superficies se limpian con regularidad, como sucedía en nuestro campus", añadió Neitzel.

Elizabeth Scott, profesora emérita de la Universidad Simmons, en Boston, comentó que "ha habido un reconocimiento creciente de que la COVID-19 es predominantemente aérea".

Pero Scott, que no formó parte del equipo del estudio, advirtió que "la importancia relativa de la transmisión por las superficies podría ser más alta en los hogares, los dormitorios [o] los lugares donde las personas viven juntas y tocan las mismas superficies de forma repetida".

Este tipo de riesgo en los espacios privados no fue evaluado por el estudio, enfatizó. Además, es importante notar que "otros virus respiratorios y otras infecciones bacterianas se propagan de manera predominante a través de las superficies de contacto", agregó Scott, exdirectora del Centro Simmons de Higiene y Salud en el Hogar y la Comunidad.

En su opinión, "necesitamos continuar con unas prácticas de higiene de manos y superficies efectivas e integrales, además de la higiene respiratoria y del aire, para proteger de todas las infecciones transmitidas por el aire, que eran un problema antes de la COVID-19, y que seguirán con nosotros en el futuro", señaló Scott.

Los hallazgos se publicaron en la edición del 27 de abril de la revista Journal of Exposure Science & Environmental Epidemiology.

Más información

Aprenda más sobre la desinfección de las superficies y la COVID-19 en los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

SOURCES: Richard L. Neitzel, PhD, professor, environmental health sciences and global public health, and associate director, Office of Global Public Health, and deputy director, Center for Occupational Health and Safety Engineering, Department of Environmental Health Sciences, University of Michigan School of Public Health, Ann Arbor; Elizabeth Scott, PhD, professor emerita and former associate dean, College of Natural, Behavioral, and Health Sciences, and former co-director and founder, Center for Hygiene and Health in Home and Community, Simmons University, Boston; Journal of Exposure Science & Environmental Epidemiology, April 27, 2022

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