Un estudio reciente llevado a cabo entre más de 300 adultos de Nueva Zelanda descubrió que al usar un podómetro se duplicaba el tiempo de caminata. "El uso de podómetros - un mecanismo que monitorea la actividad física - fue beneficioso entre estos adultos mayores, ya que aumentaron sus niveles de actividad”, informó Gregory Kolt, líder del estudio llevado a cabo por la Escuela de Ciencias y Salud de la Universidad de Western Sydney en Penrith, Australia.
"Los podómetros permiten que los usuarios controlen su progreso día a día, y que puedan cumplir los objetivos personales que se habían propuesto”, explicó Kolt.
Puntos clave
El estudio publicado recientemente midió la tasa de actividad de 330 personas poco activas, cuyo promedio de edad rondaba los 65 años. Cuando comenzó el estudio, en 2006, el estado de salud de los participantes era bueno y podían realizar caminatas regulares; sin embargo admitieron que hacían poco ejercicio en forma habitual.
Los participantes se separaron al azar en dos grupos, y los integrantes de uno de esos grupos recibieron podómetros para rastrear sus movimientos paso a paso. Los participantes del estudio adhirieron a la “prescripción verde”, una iniciativa del gobierno de Nueva Zelanda para incitar a la población a realizar 30 minutos diarios de actividad física moderada.
Los voluntarios del estudio recibieron estímulo por parte de un médico y también asistencia telefónica regular para recordarles que debían mantenerse activos mediante caminatas placentera. Luego de un año, los investigadores notaron que ambos grupos mejoraron significativamente sus niveles de actividad física. Pero los que recibieron el podómetro aumentaron su promedio de caminata semanal casi al doble de los que no lo recibieron: unos 50 minutos por semana para los que usaron el podómetro contra 28 minutos de los que no lo tuvieron.
Ninguno de los dos grupos evidenció cambios de peso (midiendo el índice de masa corporal o IMC), pero los investigadores comprobaron que ambos grupos experimentaron mejoras en la presión sanguínea.
¿Cómo influyen estos dispositivos para acelerar las tasas de marcha? Según Kolt, estos aparatos permiten que los usuarios evalúen cuanta actividad física se va acumulando día a día con sus rutinas de ejercicio, y así aumenta la probabilidad de que cumplan con sus programas. Los podómetros son económicos y podrían ser de mucha utilidad para cualquier organismo de salud pública que quiera estimular los hábitos de ejercicio”, dijo Kolt, quien también forma parte del Centro de Actividad Física e Investigación sobre Nutrición de la Universidad de Tecnología de Auckland, en Nueva Zelanda.
Un experto de los Estados Unidos, David Bassett Jr., co director del Centro de Investigación para la Obesidad de la Universidad de Tennessee, en Knoxville, reveló que el trabajo de Nueva Zelanda es consistente con estudios anteriores. "En general los investigadores notaron que hacer ejercicio utilizando podómetros aumenta la cantidad de actividad física que se realiza, en comparación con quienes lo hacen midiendo el tiempo" dijo. Según el estudio, "los podómetros tienen una incidencia mínima en el sistema de salud, y permiten estimular un estilo de vida saludable”.