Muchas personas creen que los suplementos naturales pueden reemplazar a un tratamiento convencional contra la depresión, un trastorno serio que afecta a casi uno de cada 10 adultos estadounidenses mayores de 18 años.
“Una paciente me comentó que había oído que algunos suplementos naturales para la depresión, como la hierba de San Juan, pueden funcionar tan bien como los antidepresivos, y me preguntó si era cierto” dijo el Dr. Daniel Hall-Flavin, de Clinica Mayo.
“Los llamados remedios naturales para la depresión no son un reemplazo para el diagnóstico y tratamiento médicos. Sin embargo, para algunas personas, ciertos suplementos a base de hierbas y productos dietéticos parecen funcionar bien, pero se necesitan más estudios para determinar cuáles son los más eficaces y qué efectos secundarios pueden causar, dijo Hall-Flavin, quien explicó los efectos posibles de algunos suplementos:
1. Hierba de San Juan
Este suplemento herbario no está aprobado por la Administración de Drogas y Alimentos de EE.UU. (FDA) para tratar la depresión en Estados Unidos, pero es un tratamiento popular para la depresión utilizado en Europa. Aunque puede ser útil para la depresión leve o moderada, úselo con precaución.
La hierba de San Juan puede interferir con muchos medicamentos, incluyendo fármacos que adelgazan la sangre o anticoagulantes, pastillas anticonceptivas, quimioterapia, medicamentos contra el VIH/SIDA y medicamentos para prevenir el rechazo de órganos después de un trasplante. Además, evite tomar hierba de San Juan mientras toma antidepresivos: la combinación puede causar efectos secundarios graves.
2. SAMe
Este suplemento dietético es una forma sintética de un producto químico que se produce naturalmente en el cuerpo. SAMe es la abreviatura de S-adenosilmetionina, y no está aprobado por la FDA para tratar la depresión en Estados Unidos, pero se usa en Europa como un medicamento recetado para tratar la depresión. SAMe puede ser útil, pero se necesita más investigación.
En dosis más altas, puede causar náuseas y estreñimiento. No use SAMe si está tomando un antidepresivo recetado, en este caso, también la combinación puede provocar efectos secundarios graves.
3. Ácidos grasos Omega-3
Estas grasas saludables se encuentran en peces de agua fría, linaza, aceite de lino, nueces y algunos otros alimentos. Los suplementos de Omega-3 están siendo estudiados como un posible tratamiento para la depresión y para los síntomas depresivos en personas con trastorno bipolar.
Aunque se considera generalmente seguro, el suplemento puede tener un sabor a pescado, y en dosis altas, puede interactuar con otros medicamentos.
Aunque comer alimentos con ácidos grasos Omega-3 parece tener beneficios para el corazón, se necesita más investigación para determinar si tiene un efecto sobre la prevención o la mejora de la depresión.
4. 5-HTP
El suplemento llamado 5-hydroxytryptophan, también conocido como 5-HTP, está disponible sin receta en Estados Unidos, pero requiere receta médica en algunos países.
El uso de 5-HTP puede desempeñar un papel en la mejora de los niveles de serotonina, un químico que afecta el estado de ánimo, pero la evidencia es sólo preliminar y se necesita más investigación. Hay una preocupación de seguridad que el uso de 5-HTP: puede causar una condición neurológica grave, pero el vínculo no está claro.
5. Azafrán
El extracto de azafrán puede mejorar los síntomas de la depresión, pero se necesitan más estudios. Las dosis altas pueden causar efectos secundarios significativos.
6. DHEA
La dehidroepiandrosterona, también llamada DHEA, es una hormona que produce el cuerpo. Los cambios en los niveles de DHEA se han relacionado con la depresión. Varios estudios preliminares muestran mejoría en los síntomas de la depresión cuando se toma DHEA como un suplemento dietético, sin embargo, se necesita más investigación.
Aunque suele ser bien tolerado, la DHEA tiene efectos secundarios potencialmente graves, especialmente si se usa en dosis altas o a largo plazo. La DHEA hecha de soja o ñame silvestre no es efectiva.
Precauciones a tener en cuenta
Los suplementos nutricionales y dietéticos no son controlados por la FDA de la misma manera que los medicamentos. No siempre puede estar seguro de lo que está recibiendo.
Es mejor hacer algunas investigaciones antes de comenzar a tomar cualquier suplemento dietético. Asegúrese de que está comprando sus suplementos de una empresa de confianza, y averigue exactamente lo que contienen.
Además, debido a que algunos suplementos herbales y dietéticos pueden interferir con medicamentos recetados o causar interacciones peligrosas, hable con su proveedor de atención médica antes de tomar cualquier suplemento, aconseja el Dr. Hall-Flavin.