El panel de Servicios Preventivos de Estados Unidos (USPSTF) aclaró que las mujeres de 40 años en adelante pueden hacerse una mamografía cada año si desean, pero lo que realmente necesitan estar seguras es si quieren exponerse al riesgo de la ansiedad que genera conseguir un resultado falso-positivo cuando se descubre un bulto que no resulta ser cáncer.
Así que las recomendaciones siguen siendo las mismas: las mujeres de 40 a 49 años deben decidir si hacerlas o no en base a su historial de salud familiar, las mujeres mayores de 50 años deben hacerse una mamografía cada 2 años, y expresaron que no está muy claro si las mujeres mayores de 75 años se benefician con las mamografías.
"La ciencia demuestra que algunas mujeres en sus 40 años se beneficiarán con la mamografía, la mayoría no lo hará, mientras que otras se verán perjudicadas" dice en sus recomendaciones actualizadas el USPSTF. Y agregaron que el daño más común es un resultado falso-positivo, que a menudo conduce a exámenes y procedimientos adicionales innecesarios.
"De los daños potenciales, el más grave es el diagnóstico y tratamiento innecesario de un tipo de cáncer de mama que no se habría convertido en una amenaza para la salud de la mujer durante su vida” expresa el panel.
Entre las notas, figura la aclaración especial de que las mujeres mayores de 40 que tienen una madre, hermana o hija con cáncer de mama, pueden beneficiarse al conseguir la detección precoz del cáncer a través de las mamografías.
Las recomendaciones son importantes debido a que la Ley de Cuidado de Salud exige que las aseguradoras de salud paguen por los procedimientos con la frecuencia que el USPSTF recomienda.
Pero las mamografías se han convertido en una excepción, porque hay organismos que no se ponen de acuerdo; muchos médicos y grupos como la Sociedad Americana del Cáncer y el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos, recomiendan a las mujeres hacerse mamografías anuales desde los 40 años.
Por eso ahora, la mayoría de las aseguradoras cubren las mamografías si fueron recomendadas por un médico.
Otra institución, el Colegio Americano de Radiología no está de acuerdo con la guía de USPSTF. "La adopción de estas recomendaciones para la detección del cáncer de mama se traduciría en miles de muertes innecesarias cada año”, expresó en un comunicado.
"Miles de mujeres experimentarían tratamientos más extensos y costosos que si se detectara un cáncer de mama en su fase temprana por las mamografía regulares" agregó.
El USPSTF también se explayó sobre las mamografías 3-D, señalando que no hay suficiente evidencia todavía para decidir si deberían ser recomendadas o no.
Por otro lado, el panel señaló que si bien se sabe que las mujeres con senos densos tienen un mayor riesgo de padecer cáncer de mama, no está claro si las mamografías frecuentes les ayudarían.
El cáncer de mama es la principal causa de muerte entre las mujeres estadounidenses. Cada año, se diagnostican 200,000 casos y provoca alrededor de 40,000 muertes, según el Instituto Nacional del Cáncer.
Las limitaciones de las mamografías
Las mamografías no son perfectas en detectar el cáncer de mama. Y no pueden probar que un área anormal es cáncer. Además, las mamografías no funcionan tan bien en mujeres con senos densos, ya que éstos pueden ocultar el tumor.
Para confirmar la existencia del cáncer, una pequeña cantidad de tejido debe ser retirado y examinado con un microscopio. Este procedimiento se conoce como biopsia, informa la Sociedad Americana del Cáncer.
Pero a pesa de las limitaciones, la mayoría de las instituciones oficiales de salud, organizaciones no gubernamentales, universidades, fundaciones, e incluso la mayor parte de los médicos, coinciden en que la mamografía sí salva vidas, y que es una de las más importantes herramientas para detectar el cáncer de seno.