Secretos de belleza de las porristas

Toda porrista sabe que tiene que seguir bailando pase lo que pase, por eso intentó seguir bailando cuando cambió la música y sus compañeras empezaron a hacer otra coreografía. Todo sucedió en medio del tema romántico “Marry you” de Bruno Mars.

Aunque despierten tantas pasiones, las porristas son algo más que “una cara y un cuerpo bonito”: también tienen un estado físico increíble, para tolerar el rigor del clima y los bailes intensos. Y son expertas en coreografía, para no fallar nunca en sus presentaciones.

Jessica Matthews, del Consejo Americano de Ejercicio, informa que esta actividad evolucionó y pasó de ser una simple coreografía a un verdadero deporte que combina fuerza, cardio y flexibilidad.

Molly Shattuck fue porrista de los Baltimore Ravens. Hoy tiene 38 años, 3 hijos y un físico envidiable y compartió con MiDieta los secretos que la hicieron famosa. El principal es que el entrenamiento cardio es la base de todo.

Muchas veces los uniformes son reveladores, por eso las chicas tienen que lucir un abdomen firme y tonificado. Para obtener los mejores resultados, Molly aconseja especialmente dos ejercicios: push up y plancha.

Otro secreto consiste en alternar durante la semana el tipo de entrenamiento: combinar caminata con carrera y actividades de alto impacto con otras más tranquilas. Y como regla de oro, precalentar antes de empezar y elongar al terminar.

Unas de las porristas más populares son las de los Dallas Cowboys, que deslumbran a sus espectadores con sus botas blancas y sus mínimos pantalones cortos. Revelan que su secreto de belleza es dormir 8 horas y entrenar duro.

Consultadas sobre la dieta que siguen para verse tan bien, declaran que el desayuno es fundamental para poner el marcha el metabolismo y tener energía. En su mesa nunca falta huevo, carne magra, pan integral o avena.

Aconsejan tomar mucha agua para depurar el organismo y reponer la que pierden al entrenar durante horas. “La transpiración es el llanto de la grasa”, bromean. Si practican más de 90 minutos, reponen minerales con bebidas deportivas.

Las porristas de Dallas aconsejan no perder tiempo y dinero con las dietas de moda, ya que es mejor controlar lo que comes y elegir un estilo de vida. "En lugar de decir lo que NO vas a comer, mejor es decidir lo que SI comerás desde ahora", sostienen.

Para las amantes de los dulces, una de las chicas de Dallas informa que no los destierra de su dieta porque cree que no lo podrá sostener en el tiempo. Pero solo come un par de bocados de su golosina preferida, y no más.

Muchas actrices de Hollywood fueron porristas en su paso por la escuela o la universidad. Sandra Bullock lució el colorido uniforme en su escuela de Virginia. Y también Kirsten Dunst en Los Angeles, durante 4 años.

El entrenamiento es como mínimo dos veces por semana. Ellas asisten a un camp donde se les imparte entrenamiento tipo militar, riguroso y exigente. Allí hacen pesas, gimnasia y ejercicios de resistencia

Algunas hacen ejercicios de barra como los bailarines, que les ayuda a esculpir las piernas logrando músculos finos, firmes y alargados. Otras prefieren hacer Zumba, y quien busca depurar el cuerpo y calmar la mente, recurre al yoga caliente.

Para llegar a ser porrista, cientos de chicas asisten cada año a audiciones muy exigentes donde se elige a las que mejor bailan, a las más entusiastas y con buen aspecto y linda figura. Y que conozcan los orígenes de su posible futuro equipo.

Stacey DelPreore es una instructora de fitness de New Jersey y se desempeñó durante 10 años en la Asociación Unida de Porristas. Y declara que esta disciplina es cada día más compleja, y ya dejó de ser una danza para convertirse en una gimnasia muy exigente.

La función de una porrista es elevar el espíritu del equipo y de la comunidad que asiste a ver el partido. También debe conectar a los espectadores con el campo de juego, entretener al público y ofrecer un espectáculo atlético.

El terapista Ron Thompson, PhD y autor del libro “Ayuda a atletas con desórdenes alimentarios”, revela que algunas universidades les imponen estándares físicos demasiado severos. Para cumplirlos, algunas comen poco y ponen en riesgo su salud.

Algunas universidades exigen que sus porristas sean livianas, para evitar que los jugadores se lesionen en el "stunting". Esta práctica consiste en arrojar a las jóvenes por el aire, para agregarle atracción y dramatismo al espectáculo.

Aquí la apariencia es lo principal, ya que actúan ante mucha gente, con indumentaria pequeña o reveladora. Cuando los jugadores las levantan, tienen miedo de parecerles pesadas o de que ellos toquen “algo gordo”.

La vedette de estas presentaciones es el “split”, que es un gran salto abriendo las piernas hacia los costados. Pero antes de comenzar las destrezas, se les aconseja elongar y precalentar durante varios minutos para evitar lesiones.

Jessica Simpson fue porrista en Texas, y Cameron Diaz lució sus piernas en el politécnico de Long Beach. También fueron porristas Madonna, Halle Berry ¡y hasta Meryl Streep, en su escuela de Nueva Jersey!

Tras su larga carrera como porrista, Molly revela que es una buena manera de expresarse y que ayuda a ganar confianza. Fortalece el sentimiento de trabajo en equipo, ayuda a las tímidas a “salir del cascarón”, y tiene un premio maravilloso: el reconocimiento del público mediante los aplausos y los hurras.