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Llorar es bueno para la salud
Por HolaDoctor
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Lágrimas de oro
A lo largo de nuestras vidas existen situaciones y emociones que lo primero que hacen en nosotros es producirnos llanto, ya sea por alegría o por tristeza; sin embargo, hay una buena noticia, ya que llorar tiene beneficios a nuestra salud. Descubre en cuáles son algunos de éstos.
¿Por qué lloramos?
Según la Biblioteca Nacional de Medicina lo hacemos por motivos biológicos, ya que cuando lloramos se limpia el lagrimal, se consigue una adecuada hidratación del ojo y se liberan hormonas del bienestar. Por lo que además de mantener sanos nuestros ojos, ayudamos a mantener equilibradas nuestras emociones.
Jesse Bering, director del Instituto de Cognición y Cultura de la Universidad de Belfast, indica que hay lágrimas de todo tipo: de amor, vergüenza, tristeza, dolor físico, lástima y arrepentimiento, por que a veces es manipulada su exteriorización con fines de conseguir lo que se quiere de una persona o grupo específico.
El estrés crea una sobrecarga de las emociones y al llorar, se liberan sustancias como la adrenalina, noradrenalina, oxitocina, cloruro de potasio y manganeso, prolactina y adenocorticotropina, indica William H. Frey, bioquímico en el Centro Médico St. Paul-Ramsey de Minnesota.
El cuerpo produce este tipo de hormonas cuando estamos llorando, las cuales funcionan como un analgésico natural, al disminuir el dolor y mejorar el estado de ánimo brindándonos tranquilidad, de acuerdo con información publicada en The New York Times.
Según la antropóloga Krystal D'Costa, mientras a las mujeres se les permite expresar su tristeza de forma deliberada, en los hombres, llorar sigue estando mal visto. Una investigación llevada a cabo por Balswick y Peek en 1974 sustenta esta teoría, en la que se encontraron frases como: “los niños no lloran”.
El detonante son alteraciones del ánimo de intensidad elevada, sobre todo negativas, como pensamientos dañinos, tristeza o rabia. En un estudio publicado en la Current Directions in Psychological Science se especifica que uno de los beneficios del llanto es el estado de relajación al que entra el cuerpo después de éste.
Además, llorar evita los problemas gastrointestinales, ya que una investigación de la Universidad de Pittsburg señala que las personas que padecen una úlcera o colitis crónicas derivadas del estrés, lloran menos que las personas sanas. Así que no temas derramar lágrimas, recuerda que primero es la salud.
Un estudio de la Universidad del Sur de Florida asegura que llorar ayuda a mejorar nuestra respiración, pues sugiere que el llanto calma las emociones y estabiliza el ritmo de la respiración de las personas estresadas, quienes regularmente tienen un ritmo cardiaco elevado y una sudoración excesiva.
Michael Trimble, profesor del Institute of Neurology en Londres, en su libro "Por qué a los humanos les gusta llorar", exploró el origen de las lágrimas desde el punto de vista neuronal y anatómico, y determinó que sólo así se distingue el hombre de los animales, por el llanto que brota del sentimiento.
En el Instituto Weizmann, de Rehovot, Israel, científicos realizaron un experimento para saber si además de expresar emociones las lágrimas emitían alguna otra señal. La conclusión fue que las lágrimas de las mujeres contendrían una señal química que reduce los niveles de testosterona, una hormona sexual propia de los hombres.
Un estudio publicado en la revista Physical Biology muestra que se ha desarrollado una técnica que logra identificar enzimas líticas en las lágrimas y en la saliva, las cuales podrían ser utilizadas como antibióticos que eliminen bacterias resistentes. Joshua Weitz, coautor del proyecto dijo que su uso terapéutico es reciente.
Esta característica también hace brotar nuestro llanto, ya que "se puede empatizar con las lágrimas de otras personas", asegura Raquel Molero, psicóloga de adultos de ISEP Clínic Barcelona. "El llanto puede surgir ante una película u obra de teatro en la que se conecta con los sentimientos”.
La compasión se activa por lo que llaman "estímulos emocionalmente competentes". El cerebro recibe los estímulos y responde con un cambio en el estado del cuerpo: las lágrimas. Nuestros recuerdos personales vinculados a las respuestas, son los que originan la compasión y empatía frente a un rostro entristecido, indica Michael Trimble.
"Llorar es una buena forma de expresarse, es una válvula de escape y, como ocurre con una olla a presión, si una persona se reprime al límite y no se permite derramar lágrimas cuando lo necesita, cuanta más presión tenga, esa emoción se manifestará de forma más incontrolable”, indica la psicóloga Molero.
La psicóloga Molero asegura que otras consecuencias de aguantar el llanto es que se contiene más rabia y agresividad y muchos trastornos de ansiedad se somatizan cuando se bloquean todas las emociones, entre otras, manifestaciones en la piel, además de que podría derivar en trastornos mayores.
Según la psicóloga clínica Sandra Balseca, llorar es fundamental ya que "cuando un dolor emocional se queda guardado a la larga enferma algún órgano del cuerpo". Además, limitar estas reacciones podría dar como resultados problemas cardiacos e hipertensión arterial.