A menudo los dolores de espalda ocurren por pasar mucho tiempo sentado, o con el cuello y la espalda en una posición inadecuada. Un estudio del Departamento de Ciencias del Ejercicio de la Universidad George Washington advierte sobre los peligros de los músculos entumecidos y las contracturas por el uso abusivo de la silla.
Es necesario movilizar el cuerpo durante el día para evitar esos dolores de espalda que tanto molestan. Hay ejercicios simples que se pueden hacer, incluso en la oficina. No hace falta ser un experto ni tener indumentaria o equipo especial, solo ganas de hacerlos dos o tres veces al día.
Sentado en la silla con la espalda recta, cruza un brazo estirado por delante del pecho. Con la mano contraria abierta, presiona el codo hasta lograr que tu brazo quede bien pegado al pecho. Sostén firmemente 5 segundos, relaja y repite hasta hacerlo dos veces con cada brazo. De ser posible, realiza el ejercicio dos o tres veces al día.
Eleva un brazo y dóblalo por detrás de la cabeza, hasta apoyar la mano abierta en la espalda, entre los omóplatos. Coloca la otra mano sobre el codo para intensificar el estiramiento y llevar la mano hacia el centro de la espalda. Mantén por 5 segundos, relaja y repite una vez más antes de pasar al otro brazo, para hacer dos series de cada lado.
Con la vista al frente, baja el mentón hasta apoyarlo en el pecho. Coloca las manos entrelazadas sobre la parte superior trasera del cráneo para intensificar el estiramiento mientras mantienes 5 segundos. Repite dos veces más y si puedes, haz el ejercicio tres veces al día.
4. Elongar zona lateral del cuello
Con los hombros bajos y relajados, inclina la cabeza hacia un costado como si quisieras tocar el hombro con la oreja (y no la oreja con el hombro). Mantén en esa posición durante 5 segundos y si quieres intensificar el ejercicio, presiona suavemente la cabeza hacia abajo, con la mano abierta apoyada en la coronilla. Repite y cambia de lado.
Mirando al frente con los hombros bajos y relajados, apoya el mentón sobre la zona lateral del pecho como si quisieras mirarte la axila. Mantén durante 5 segundos. Para intensificar el ejercicio, presiona suavemente la cabeza hacia abajo con la mano abierta sobre la coronilla, para pegar más el mentón. Repite y cambia de lado.
6. Elongar espalda baja
Sentado en la silla con la espalda derecha, eleva una rodilla hasta pegarla a la zona media del pecho, y sostén con ambas manos lo más alto y cerca del pecho posible. Sin inclinarte y dejando la espalda siempre derecha haz 5 respiraciones. Repite y cambia de lado. Si puedes, haz este ejercicio dos veces al día.