La marihuana es la droga ilegal más comúnmente usada en Estados Unidos. Aunque se considera una sustancia que provoca intoxicaciones suaves, el fumar la hierba en forma habitual produce profundos cambios en el organismo. Conoce los daños más serios.
La marihuana es una mezcla de hojas secas, flores, tallos y semillas del cáñamo llamado Cannabis sativa. La planta contiene una sustancia química que altera la mente llamada delta-9-tetrahydrocannabinol (THC) y otros compuestos relacionados a éste, informa el Instituto Nacional de Abuso de Drogas (NIH).
1. Daños en el cerebro
Cuando las personas empiezan a consumir marihuana durante la adolescencia, la droga puede reducir las facultades mentales para pensar, memorizar y aprender y además, afecta las conexiones cerebrales. Los efectos en estas funciones pueden durar mucho tiempo e incluso, pueden ser permanentes.
Produce una reacción excesiva en las partes del cerebro que tienen gran cantidad de receptores. Esta reacción causa el sentirse "dopado". Otros efectos son: percepciones alteradas (ver colores más brillantes), tener una idea alterada del tiempo, cambios en el humor, falta de coordinación motriz, dificultad con la memoria y para pensar y resolver problemas.
El humo de la marihuana irrita los pulmones, y los fumadores frecuentes de hierba pueden tener los mismos problemas respiratorios que experimentan los fumadores de tabaco.
Estos problemas incluyen tos y producción crónica de flema, más frecuencia de enfermedades respiratorias y un mayor riesgo de infecciones pulmonares. Hasta el momento, los investigadores no saben si los fumadores de marihuana tienen un riesgo más alto de contraer cáncer de pulmón.
La marihuana eleva la frecuencia cardíaca hasta 3 horas después de haberla fumado. Un estudio del Centro Médico Einstein de Filadelfia, que analizó millones de expedientes médicos de EE. UU. sugiere que el consumo de marihuana aumenta el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV) y de insuficiencia cardíaca.
La Dra. Aditi Kalla, autora del estudio, comentó que el uso medicinal o recreativo de la marihuana es ahora legal en más de la mitad de los estados de EE. UU., de modo que se necesita tener una mejor comprensión de sus efectos en la salud.
4. Los ojos
Los consumidores regulares de marihuana experimentan un ligero retraso en la señalización de las células de la retina. Y esto podría indicar un deterioro visual, halló un estudio del Pole Hospitalo-Universitaire de Psychiatrie du Grand Nancy en Laxou, Francia.
No podría curar la vista
Una de las ideas que circulan es que la marihuana medicinal podría ser un tratamiento alternativo para el glaucoma. Sin embargo, la Academia Americana de Oftalmología (American Academy of Ophthalmology) no la recomienda a los pacientes con este problema de los ojos.
5. El estómago
El alto consumo de marihuana ha sido identificado como una causa del dolor de estómago severo, vómitos y náuseas, los cuales no se alivian con ningún medicamento o tratamiento, según Narconon Arrowhead, en Oklahoma, EE.UU. un centro de rehabilitación para adictos a las drogas.
Daño al bebe en gestación
Muchas embarazadas consideran que no tiene consecuencias para el feto. Sin embargo, las investigaciones sugieren lo contrario: el principal ingrediente psicoactivo de la marihuana, el tetrahidrocannabinol o THC, puede traspasar la placenta y alcanzar al feto, lo que podría causar daño al desarrollo cerebral y cognitivo, así como al peso del bebé al nacer.
El Colegio de Obstetras y Ginecólogos de EE.UU. (ACOG) desaconseja el consumo prenatal del cannabis debido a su relación con problemas en el desarrollo cognitivo y dificultades de aprendizaje en niños expuestos a la marihuana en el vientre materno.
Otros daños asociados
Fumar marihuana también se ha asociado en respectivos estudios científicos con un deterioro en la salud ósea, un daño permanente en las encías (similar al que padecen los fumadores), problemas de ansiedad, de depresión, paranoia y pensamientos suicidas, según los Institutos Nacionales de Salud (NIH).