En los alimentos, existen tres tipos de nutrientes: carbohidratos, proteínas y grasas. Los primeros proveen energía rápida al organismo, pero debes elegir aquellos que te den un plus de vitaminas, minerales y fibra, así como evitar los que proporcionen calorías vacías. Para tener energía a lo largo del día, elige los alimentos que te brindan más vitalidad.
Es rica en proteínas y un gran número de vitaminas y minerales. Es el cereal con mayor proporción de grasa vegetal, con un 65% de grasas no saturadas y un 35% de ácido linoleico. Consumir avena ayuda a fortalecer las funciones neurológicas: tomar un tazón de leche con copos de avena al día otorga la energía suficiente para activar las neuronas.
En verdad es una gran fuente de energía, y ahora puedes encontrar muchos panes, galletas y otros productos adicionados con semillas de chía. En muy rica en ácidos grasos omega 3, vitamina B y minerales. Se recomienda remojarlas en agua para digerirlas mejor y absorber todos los nutrientes, y luego agregarlas a licuados, jugos, leche, yogures o ensaladas.
Es uno de los alimentos más completos. Además de aportar varios nutrientes y prevenir calambres, ayuda a construir masa muscular, a prevenir enfermedades y estabilizar el azúcar en la sangre. Además, estimula la actividad de la serotonina a nivel cerebral, lo que se traduce en una mayor sensación de bienestar y vitalidad.
Ambos ricos en magnesio, un mineral que ayuda a convertir los carbohidratos en energía. Aunque tienen muchas calorías, en cantidades adecuadas también podrían ayudarte a incrementar el metabolismo. Los cacahuates dan una mayor sensación de saciedad en comparación con otros alimentos y reducen la absorción intestinal de grasa.
Un huevo grande solo tiene 70 calorías, y es una gran fuente de proteína de alto valor biológico que aporta vitaminas A, B, D, fósforo y los 9 aminoácidos esenciales. Si tienes poco tiempo y quieres empezar el día con energía, prepara huevos revueltos de 40 segundos: pon los huevos y un chorrito de leche en un recipiente, revuelve y pon en un microondas durante 30 segundos. Revuelve y calienta otros 10 segundos.
Considerado uno de los súper alimentos. Al igual que el amaranto, la quinoa contiene los nueve aminoácidos esenciales. Además, es una excelente fuente de magnesio y de zinc, hierro y ácido fólico. Es fácil de preparar: hervirla en líquido aumenta su sabor, al igual que si la cocinas en caldo de verduras o de pollo. Media taza de quinoa cocida equivale a una porción de granos completos.
Se le atribuyen poderes energizantes desde la antigüedad, y no es una leyenda, es algo que quedó demostrado en un estudio científico donde la recuperación de pacientes fue mucho más rápida entre quienes tomaron un suplemento con ginseng. Existen suplementos, té y la raíz en forma disecada en trozos también se vende en algunas herboristerías.
Esta verdura verde tiene un alto contenido de vitaminas B, que naturalmente respaldan los niveles de energía saludable convirtiendo los alimentos (carbohidratos) en combustible (glucosa) y contiene mucha fibra que estabiliza el azúcar en la sangre. Agrega espárragos a tu ensalada en el almuerzo y tendrás energía en la tarde.
9. Café
No podía faltar. Es el rey en los desayunos, y te hace sentir que despiertas: eso es verdad: la cafeína estimula el sistema nervioso, mejora el estado de ánimo, de alerta y ayuda a disminuir la sensación de cansancio. Los nutricionistas recomiendan consumir 2 tazas al día. Para no sumar calorías, evita los cafés preparados con crema o leche entera, o bien, opta por agregarle leche descremada.
La vitamina B12, conocida como la vitamina de la energía, se encuentra casi exclusivamente en los alimentos de origen animal, tales como la carne de res magra, el cordero, el pescado, la carne de venado, el salmón, los camarones, las vieiras, las aves de corral y los huevos. Así que no los descartes de tu plan diario.
No sólo contiene cafeína, también tiene sustancias como la tiramina y feniletilamina que podrían contribuir a incrementar tus niveles de energía. Está demostrado que alivia los síntomas en pacientes con síndrome de fatiga crónica. Opta por el chocolate amargo, el más sano, y no superes los 85 gr. diarios.
13. Agua
La deshidratación leve o falta de líquido temporaria puede disminuir tu energía. Bebe al menos 8 vasos de agua al día. Si realizas una sesión de ejercicio de 60 minutos, bebe 2 tazas de agua fría previamente y de 180 a 240 mililitros durante el ejercicio.
14. Miel
No solamente contiene vitaminas, minerales y antioxidantes que retrasan el envejecimiento, sino que también es un energético que ayuda a los trabajadores y atletas a superar la fatiga y a recuperar la energía.
15. Maca
Es energizante y mejora la resistencia al estrés, la fatiga y estimula la función cerebral. Viene envasada en polvo. Se pude agregar a licuados, jugos, leches, yogures o mezclarla con vegetales, sopas o caldos, y por ser un alimento de moda, se consigue fácilmente en tiendas y dietéticas.
Academia Americana de Nutición (Academy of Nutrition an Detetic), Clínica Mayo, Natural Standard, Journal of Nutrition, Consejo Americano del Ejercicio, Journal of Chemical and Pharmaceutical Research, Universidad de Columbia, EE.UU.