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10 productos que no debes comer en 2014
Por HolaDoctor
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Con la ilusión de comer bien
Arranca el año y con él, las metas que te propusiste cumplir. Uno de los objetivos más concurridos es el de bajar de peso. Y para lograr esto deberás poner mucha atención, pues hay varios alimentos que no sólo podrían evitar que obtengas este logro, sino también, pueden perjudicar tu salud. Te los presentamos a continuación.
Comer unas papás a la francesa con mucho queso cheddar es un pecado irresistible para cualquier persona, no obstante, darte este placer puede provocar que se obstruyan las arterias de grasa, así lo considera la nutricionista y dietista del norte de Nueva Jersey Janet Blum.
“Cualquier alimento frito ya está cargado de grasa, pero añadir el queso, que es alto en grasas saturadas, es agregar más calorías y grasa”, considera Blum. Ante esto, la nutricionista recomienda consumir mejor otro tipo de almidón ya que es rico en fibra, calcio, potasio y fósforo, como el pan o la pasta.
Es una rápida solución cuando hay hambre, pues son muy fáciles de preparar. Sin embargo, no sería lo recomendable si es que has decidido vencer a la báscula, ya que las salchichas contienen nitritos y nitratos que son compuestos para extender su vida útil, y que se han relacionado con cáncer en animales.
Según explica la nutricionista Susan Levin, “un hot dog podría enviarte a la tumba”, esto debido a que, “las carnes procesadas, como las salchichas, pueden aumentar el riesgo de padecer diabetes, enfermedades del corazón y cáncer”.
Para cualquier persona que consume uno o más hot dogs a la semana se recomienda tratar de balancear esto con alimentos ricos en antioxidantes, como los tomates, jugo de naranja o con vitamina C envasada. Tendrás que moderarte con este tipo de placer.
3. Palomitas de microondas
Muchos químicos abundan en este tipo de producto, como por ejemplo, el ácido perfluorooctanoico, el cual está presente en el revestimiento de la bolsa, y tiene relación con la infertilidad en los seres humanos, de acuerdo con un estudio de la Universidad de California.
De acuerdo con la investigación, al aplicar ácido perfluorooctanoico en animales, se halló que puede causar daños en el hígado, testículos y páncreas. Además, al entrar bajo el trabajo del microondas los químicos se evaporan y llegan a las palomitas que más tarde serán consumidas por el ser humano.
Solución
En lugar de comer palomitas de este modo práctico, puedes recurrir al método tradicional de la abuela para cocinarlas: usando una sartén. No olvides que estás cuidándote, así que evita usar mucho aceite y sales. Además, omite la mantequilla. ¡Naturales son más deliciosas!
No queremos decir que renuncies a este producto rico en calcio, mejor dicho, evita la leche que está producida con hormonas artificiales como la recombinante del crecimiento bovino (rBGHo rBST), ya que éstas, además de impulsar a las vacas a producir más leche incrementa infecciones en sus ubres e incluso pus en la leche.
Rick Norte, ex director general de la división de la Sociedad Americana del Cáncer en Oregon advierte que consumir este tipo de leche puede contribuir a que padezcas cáncer de mama, próstata y colon. Antes de comprar leche revisa en la etiqueta si contienen rBST y rBGH.
5. Sopas instantáneas
Muchos piensan que es una opción rápida, barata y saludable para alimentarse. Sin embargo, un estudio hecho por la Universidad Complutense de Madrid afirma que por su contenido en glutamato monosódico, esta comida despertó en varios animales un hambre ansiosa cuya voracidad se incrementó en un 40%.
De acuerdo con el estudio, el glutamato actúa sobre las neuronas de una región cerebral conocida como núcleo arcuato, e impide el funcionamiento adecuado de los mecanismos inhibidores del apetito. Esto quiere decir que las sopas instantáneas, indirectamente, tendrían que ver con el aumento de la obesidad en la población.
6. Alimentos enlatados
De acuerdo con Frederick Vom Saal, endocrinólogo de la Universidad de Missouri el problema radica en que los revestimientos de las latas contienen bisfenol-A, un estrógeno sintético relacionados con problemas reproductivos hasta enfermedades cardiacas, la diabetes y la obesidad.
Se ha encontrado que muchos de los criaderos suelen alimentar a sus ganados con maíz en lugar de pasto, esto con finalidad de engordarlos más rápido y venderlos a un mejor precio. Esto significa menos nutrición para las familias.
Maíz hace la diferencia
Investigadores de la Universidad de Clemson y del Departamento de Agricultura de Estados Unidos halló que en comparación de la carne de vacuno alimentado con maíz, la carne del ganado alimentado con pasto es rico en beta-caroteno, vitamina E, omega 3, calcio, magnesio y potasio.
¿Te gustan las hamburguesas, refrescos y demás alimentos que sirven en los lugares de comida rápida? Entonces ten cuidado. Una investigación hecha por el Departamento de Salud y Recursos Humanos reveló que las personas que comen dos veces por semana estos productos se les asocia con la obesidad y la diabetes.
Sí, leíste bien. El problema de consumir este alimento, según Marcos Kastel, codirector del Instituto Cornucopia que promueve los alimentos orgánicos, es que contienen una gran variedad de pesticidas, incluso, muchos de los trabajadores agrícolas tienen mayores tasas de varios tipos de cáncer.
Lo recomendable sería consumir alimentos orgánicos, pero si tu economía no te permite costearlos, entonces asegúrate de lavar y pelar bien las manzanas.
10. Salmón de criadero
Según el Dr. David Carpenter, director del instituto para la Salud y el Medio Ambiente de la Universidad de Albany, este tipo de alimento es muy bajo en vitamina D y alto en contaminantes, incluyendo carcinógenos y pesticidas como las dioxinas y el DDT. En lugar de consumir esto, se sugiere elegir el salmón de Alaska.