Este contenido ha sido archivado y puede no estar actualizado
La mamá que perdió sus recuerdos por un ataque cerebral
Por HolaDoctor
-
Un viaje en el tiempo
Sarah Thomson, de 32 años, sufrió un ataque cerebral y cayó en coma durante 10 días, y al despertar sus recuerdos se habían borrado: creía tener 19 años, y no recordaba a su esposo ni a sus hijos. Descubre cómo esta mujer ha ido recuperando sus recuerdos, y mira algunas complicaciones de los ataques cerebrales y cómo prevenirlos.
En noviembre del 2011, Sarah estaba revisando unas fotografías en su computadora cuando sintió una pequeña explosión en la nuca. "De repente mi visión se empezó a nublar, así que me fui a la cama. De esa ocasión, lo último que recuerdo es haber estado en una ambulancia", comentó Sarah en una entrevista.
Sarah Thomson tenía una malformación en las arterias de su cerebro; este defecto provocó que una arteria se rompiera, causándole un ataque cerebral hemorrágico. Para tratarla, los médicos tuvieron que operarla de emergencia, para drenar la sangre de su cerebro y retirar la malformación. Luego de la operación, Sarah estuvo en coma durante 10 días.
Según la Biblioteca Nacional de Medicina, una malformación arteriovenosa (como la que tenía Sarah) es un problema congénito en el que las venas y arterias del cerebro se conectan de manera inadecuada. Esta condición eleva el riesgo de ataque cerebral al propiciar la formación de coágulos o el rompimiento de alguna arteria.
El coma había borrado 14 años de recuerdos de la mente de Sarah, por lo que al despertar, estaba convencida de tener 19 años y estar en 1998. "Pensaba que mis hijos eran los niños de alguien más, y creía que mi marido era parte del personal de hospital", narra Sarah. Fue una gran impresión saber que ellos eran su familia, pero hubo aun algo más impactante: "Yo creía tener 19, pero cuando me miré en el espejo me vi tan envejecida. Fue un shock".
Sarah cuenta que revisó muchos videos y fotografías, para descubrir cómo antes, e incluso tuvo que enamorarse otra vez de su marido. Sin embargo, ella reconoce que, más que excavar en el pasado, debe mirar hacia el futuro: "Debo afrontar lo que pasó, y cultivar nuevos recuerdos más que sólo centrarme en recuperar los viejos".
De acuerdo con Dr. Salvador Cruz-Flores, de la American Heart Association (AHA), "La mayoría de los pacientes de ataque cerebral sobrevive, sin embargo, suelen padecer diversas complicaciones, debido al daño que sufre el cerebro. La gravedad y el tipo de la complicación dependen de área del cerebro afectada y la seriedad del ataque".
Problemas cognitivos y de memoria
Del mismo modo que Sarah, muchos pacientes que sufren un ataque cerebral experimentan pérdida de memoria y otros problemas cognitivos. No obstante, de acuerdo con la Clínica Mayo, las capacidades cognitivas y la memoria pueden recuperarse en parte con rehabilitación.
La parálisis en un lado del cuerpo es una de la complicaciones más comunes, según informa el National Institute of Neurological Disorders and Stroke (NINDS). Sin embargo, la institución destaca que en ocasiones los pacientes pueden beneficiarse de la fisioterapia.
Problemas para comunicarse
Según el NINDS, cerca del 25% de los pacientes con ataque cerebral sufren de afasia: problemas para expresarse a través del habla o la escritura, o para entender lo que otros intentan comunicarle. Diversas terapias pueden ser de ayuda para estos pacientes, al permitirles recuperar su capacidad de expresarse y socializar.
Aunque es consciente de sus 32 años, Sahara asegura sentirse en ocasiones mucho más joven: "Me siento un poco como una adolescente. Me acabo de teñir el pelo de colores, y a veces soy muy temperamental. Mi familia ha tenido que adaptarse a mi nueva yo". Según la Clínica Mayo, el daño que sufre el cerebro puede provocar que los pacientes se comporten distinto, pueden volverse introvertidos y apáticos o, por el contrario, impulsivos.
Ser joven no te salva de un ataque cerebral: Sarah tenía 31 años cuando sufrió uno, y cada vez más jóvenes los padecen: "En los últimos 13 años se han duplicado los ataques cerebrales en gente de entre 15 y 44 años", comenta Dra. Mary George, de los los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Por eso, conoce algunas medidas para prevenirlos.
Para el Dr. José Vega, de la Universidad Columbia, "Una alimentación rica en vegetales y fibra, y reducida en grasas saturadas y sal mantendría nuestra salud vascular y evitarían otras condiciones relacionadas con los ataques cerebrales, como la obesidad o la hipertensión".
"El sobrepeso y la obesidad afectan la salud de diversas maneras, elevando el riesgo de ataque cerebral hasta en un 64%", asegura el Dr. Pasquale Strazzullo, de la Universidad de Nápoles, en Italia. "Controlar el peso o perder algunas libras, si es el caso, serían medidas ideales para prevenir los ataques cerebrales".
El ejercicio regular ayudaría a reducir la presión arterial, así como el colesterol, y fortalecería tu sistema cardiovascular, todo lo cual sería útil para reducir de manera significativa tu riesgo de ataques cerebrales, informa la Clínica Mayo.
La presión arterial alta, la diabetes o el colesterol alto son factores de riesgo importantes de los ataques cerebrales. Si tú padeces alguna de estas condiciones, es importante que hagas los cambios necesarios en tu estilo de vida para mantenerlas bajo control.
Fumar duplicaría el riesgo de sufrir un ataque cerebral, según informa la National Stroke Association. Esto se debería a que el tabaco favorecería la formación de coágulos, y a que dañaría las arterias, al propiciar que se vuelvan estrechas y rígidas. Sin embargo, al dejar de fumar, el riesgo se reduciría significativamente.