¿Que pasaría si el Obamacare desapareciera por completo? La respuesta (y el cálculo) lleva menos de 10 segundos, más de 20 millones de personas perderían sus coberturas de salud.
Esta enorme cantidad de gente es la que ha ido incorporándose al mundo de la atención de salud en los últimos años, desde que la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio (ACA) abriera mercados en donde los consumidores pudieron elegir planes accesibles, y recibir ayuda para pagar las primas (lo que pagas cada mes por tener cobertura).
La ley, conocida popularmente como Obamacare, también animó a los estados a expandir sus programas de Medicaid, para que personas con salarios un poco más altos, pero todavía con dificultades para afrontar gastos médicos, pudieran beneficiarse del programa federal.
ACA es tal vez una de las leyes más desafiadas de la historia del país. Desde que el entonces presidente Barack Obama la puso en vigencia con su firma el 23 de marzo de 2010, los republicanos intentaron imponerse en el Congreso para rechazarla y reemplazarla 60 veces.
No lo han logrado hasta ahora, tanto bajo la administración Obama, como la actual. ACA ha sobrevivido batallas políticas y legales.
Ahora, está en acción la arremetida número 61, que en realidad comenzó en 2017 cuando, como parte de la aprobación del presupuesto federal, el Congreso eliminó el llamado mandato individual, una de las medidas menos populares del Obamacare. Este mandato había establecido que la mayoría de las personas debían tener seguro, a riesgo de pagar una multa.
A partir de esta acción un grupo de estados republicanos presentaron una demanda en una corte de Texas argumentando que, al no existir ya el mandato individual, la ley de salud era anticonstitucional.
En diciembre pasado, el juez de Texas Reed O'Connor apoyó a los demandantes.
El fiscal general de California, Xavier Becerra, y otros 20 abogados demócratas apelaron esa decisión.
El martes 26 de marzo de 2019, el presidente Donald Trump volvió a poner al Obamacare en los titulares, reabriendo el debate afirmando, de nuevo, que toda la ley debería desaparecer por completo.
Entre el ir y venir de las cortes y el Congreso, está la gente que sigue confundida.
Según predicciones del Urban Institute, si ACA desaparece, unas 15.4 millones de familias y niños de bajos recursos perderían Medicaid y el Programa de Seguro de Salud Infantil (CHIP). Esto sería la consecuencia de drásticos recortes al programa y de la forma en se destina ese dinero.
La misma fuente asegura en su informe que cerca de 7 millones de consumidores que actualmente tienen planes a través de los mercados del Obamacare también estarían en riesgo de perder la cobertura de salud.
El impacto de una eliminación completa de la ley sería muy distinto dependiendo del estado. Estados que han ampliado Medicaid y establecido mercados con más consumidores con planes médicos, por ejemplo Colorado, tendrían un mayor número de nuevas personas sin seguro comparado, por ejemplo, con Dakota del Sur, que no tiene un mercado de seguros propio y no expandió Medicaid.
Expertos todavía están analizando el terremoto que todo este movimiento causaría a los costos de la atención de salud, que ya son de los más altos del planeta.