Grupos pro inmigrantes están abogando no sólo para que el Congreso vote finalmente una reforma migratoria integral, sino también para que ésta permita que millones tengan acceso a atención de salud.
La Ley de Cuidado de Salud, promulgada por el presidente Barack Obama en marzo de 2010, especifica que los estimados 11 millones de indocumentados que viven en el país no son elegibles para comprar un seguro médico individual en el nuevo mercado de seguros que se abre en octubre, o para participar de los beneficios médicos federales que proveen los estados, como el Medicaid o el Medicare.
Puntos clave
Y, al parecer, esto sería difícil de modificar, aún si se aprobara la reforma migratoria que tuvo su primer round de votación en el pleno del Senado el martes 11 de junio.
Según está escrito en el Bipartisan Framework for Comprehensive Immigration Reform, el proyecto de inmigración que elaboró el llamado Grupo de los Ocho —cuatro senadores demócratas y cuatro republicanos— "las actuales restricciones que previenen que los no inmigrantes accedan a los beneficios federales aplicarán también a los inmigrantes condicionales".
Esto quiere decir en palabras simples que, de aprobarse la reforma migratoria, aquéllos que pasen a tener un estatus migratorio legal temporal, tampoco tendrán derecho a formar parte del sistema de salud.
Así al menos lo considera el National Immigration Law Center, que aboga por los derechos de los inmigrantes. "La propuesta de los senadores guarda silencio sobre si los nuevos inmigrantes legalizados no serán considerados inmigrantes 'calificados' y seguirán siendo no elegibles para los programas de la Ley de Cuidado de Salud", especifica un documento del centro.
Para la entidad, el negarles cobertura médica va a contramano de los principios básicos de la reforma migratoria que promueve la Administración de Barack Obama, que busca incluir en la sociedad a los ahora indocumentados.
Para el National Immigration Forum, aunque se trata de leyes separadas, no es admisible que la reforma migratoria no incluya apartados claros sobre el cuidado de salud vinculado a estos futuros ciudadanos "en tránsito" a la ciudadanía.
"Si se aprueba la reforma migratoria, se está hablando de otorgar estatus legal a millones, muchos de los cuales seguirán el proceso hasta el final del camino: la ciudadanía", explica el foro migratorio. Esto podría llegar a significar hasta 10 años de trámites... ¿sin ningún tipo de cobertura médica?
Según declaró el representante Raúl Grijalva (D-Arizona) a "The Hill", "los nuevos inmigrantes legales deberían poder comprar un seguro médico, cuidar a sus familias. Estas personas pagarán impuestos, no dependerán de nadie. Es justo".
Hoy en día, un porcentaje del cuidado de salud de las personas sin papeles se concentra en los centros comunitarios de salud —no se sabe la cifra exacta porque estas clínicas no piden prueba de estatus migratorio para ofrecer atención médica— o en las emergencias de los hospitales, que están obligadas a recibir a cualquier ser humano en apuros, y cuyos costos son cósmicos. Pero millones no tienen ningún tipo de atención médica.
Y, al parecer, les será difícil obtenerla por un largo tiempo.