El gasto en salud está llevando a las familias a la quiebra, ¿qué hacer?

En alguna época, tener un seguro médico a través del empleo era la panacea de las coberturas. Significaba la seguridad de acceder a buena atención y que el empleador se hiciera cargo de una parte de las primas. Pero ahora, los costos de estos planes han aumentado tanto que están comiendo vivos a los consumidores (y a sus bolsillos).

Un estudio de la Kaiser Family Foundation revela que el costo promedio de una cobertura familiar a través del trabajo ha superado los $20,000 anuales, un récord.

El gasto en salud está llevando a las familias a la quiebra, ¿qué hacer?

El aumento promedio del 5% en las primas (lo que pagas al mes por tener cobertura) excede ampliamente el crecimiento de los salarios y de la inflación en general.

Unos 153 millones de estadounidenses tienen cobertura de salud a través de sus empleos. Históricamente, las empresas, al tener grupos grandes a los que ofrecer planes de salud, siempre han estado en un lugar de privilegio para negociar precios.

Los que más sufren el impacto de esta tendencia son, por supuesto, los que ganan menos.

Según explica Drew Altman, presidente de la fundación, "los costos son prohibitivos cuando trabajadores que ganan $25,000 al año tienen que desembolsar $7,000 solo para pagar su parte de las primas".

Comparado con 2009, las primas han aumentado un 54%, según el informe. Sin embargo, en la última década, los salarios han aumentado un 26%, y la inflación un 20%.

La encuesta también muestra una tendencia preocupante: el 40% de los adultos de menos de 65 con cobertura de salud a través del trabajo aseguraron que ellos mismos, o alguno de sus familiares, tuvieron problemas para afrontar un gasto de salud o una cuenta médica. 

Una de cada dos personas encuestadas dijo que ella, o alguien de su familia, había postergado un tratamiento por falta de dinero.

Soluciones

Ante este aumento astronómico, muchas personas están pensando en el mercado de seguros como una alternativa para tener seguro subsidiado. 

Y esa chance comienza pronto, cuando inicie el período abierto de inscripción, que es la ventana anual en la que se abren los mercados de seguros, para que los consumidores puedan adquirir un plan médico.

En resumen, durante este tiempo se puede:

  • Comprar un nuevo plan de salud
  • Cambiar uno que ya se tenga (comparando red de doctores, coberturas, precios, etc.)
  • Pedir subsidios para poder pagar las primas (lo que pagas cada mes por tener cobertura)
  • Saber si se es elegible para Medicaid (aunque la inscripción para este programa está abierta todo el año, este período es un buen momento para indagar la elegibilidad)

Hay un mercado federal (cuidadodesalud.gov), que usan muchos estados, y mercados estatales, que son aquellos creados por los gobiernos locales. Algunos estados tienen un sistema mixto: en parte usan la plataforma federal y en parte la gerencian ellos mismos. Por ejemplo, usan cuidadodesalud.gov para la inscripción, pero manejan un sitio en donde asesoran y ayudan al consumidor a comparar planes médicos.

Todos los mercados de salud comienzan el período abierto el 1 de noviembre. Y la mayoría lo cierra el 15 de diciembre. 

Averigua sobre el mercado de salud en tu estado aquí.

Otra opción

Otra alternativa son los planes de salud de corto plazo, que ofrecen cobertura médica por un período de tiempo determinado, habitualmente con una prima mucho más baja que un seguro tradicional.

Estos planes no están relacionados con las pólizas que se venden a través de los mercados de salud establecidos por la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio (ACA), popularmente conocida como Obamacare. 

El seguro de salud de corto plazo generalmente ofrece un paquete de beneficios más simplificado, incluidos aquellos que una persona saludable necesitaría en caso de enfermedad o accidente, como la cobertura de visitas al médico, hospitalizaciones, radiografías y otros beneficios de tratamientos.

Los planes de salud de corto plazo se pueden adquirir en cualquier momento del año, no hay que esperar la ventana del período abierto de inscripción anual.

Una familia sana puede comprar un seguro de salud de corto plazo que entre en vigencia al día siguiente de adquirido.

En el pasado, la cobertura de salud a través de planes de corto plazo podía durar solo tres meses, pero ahora pueden contratarse hasta por un año, con opción a expandirla, dependiendo del estado.

A diferencia de muchos planes de salud tradicionales, estas pólizas no limitan su oferta de médicos y especialistas a una red de proveedores. El consumidor puede elegir cualquier doctor o centro de salud, y hacer su cita o tener su procedimiento.

Planes de salud de corto plazo en tu estado.

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