Rubén Aguirre, uno de los comediantes más queridos de Latinoamérica por su participación en el programa de televisión "El Chavo del 8", falleció la mañana de 17 de junio de 2016 debido a complicaciones de una neumonía.
De acuerdo con su hija Verónica Aguirre, el actor se encontraba reposando en su casa de Puerto Vallarta, México, luego de haber sido hospitalizado en mayo. “El doctor consideró que era mejor estar en su casa porque en los hospitales se corre el riesgo que se complique la infección. Pero se complicó”, comentó a CNN.
Aunado a los problemas respiratorios, el comediante vivía con diabetes, enfermedad crónica en la que el cuerpo no puede regular la cantidad de azúcar en la sangre y que aumenta las posibilidades de presentar una neumonía, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina.
Durante los últimos 20 años, Aguirre tuvo que hacer varios cambios en su estilo de vida, como modificar su alimentación e implementar ejercicio. Además, las revisiones médicas se incrementaron.
“Siempre me hago mis chequeos porque me interesa saber si tengo el azúcar alta porque a partir de ahí se derivan muchos problemas de esta enfermedad”, comentó en febrero de 2012 a HolaDoctor.
Algunos de los síntomas que preceden a esta enfermedad incluyen necesidad frecuente de orinar, sed excesiva, pérdida de peso sin causa conocida, hambre excesiva, cambios bruscos en la visión, hormigueo o adormecimiento en las manos y pies, piel seca, llagas que tardan en sanar y presentar infecciones con más frecuencia de lo normal.
Cuando existe un exceso de glucosa en la sangre puede causar problemas serios a la larga, como por ejemplo, lesiones en los ojos, los riñones y los nervios. La diabetes también puede causar enfermedades cardíacas, derrames cerebrales e incluso la necesidad de amputar un miembro.
De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) se calcula que 24 millones de estadounidenses padecen diabetes. En el caso del ex compañero de “Chespirito”, este mal trajo consigo problemas renales, pues debido a que tomaba varios fármacos para sus achaques, sus riñones sufrieron las consecuencias.
En los últimos años, Aguirre decidió alejarse de los escenarios para cuidar sus problemas de salud. En 2011 se sometió a una cirugía para reemplazarle un disco de la columna vertebral por una placa con tornillos, secuela del accidente automovilístico que sufrió en 2007 donde le colocaron una férula en la pierna.
“Camino muy despacio y con bastón, tengo un problema de ancianidad. Lo que pasa es que ya no corro ni me subo al trapecio ni nada de eso”, comentó el humorista haciendo alusión a que dejaba las actividades en el circo que tenía.
Aunado a esto, la situación para el cómico y su familia se agravó cuando en agosto de 2014 fue internado por una deshidratación y por complicación de la diabetes. Debido a que cada vez eran más recurrentes las atenciones médicas, Aguirre emitió un comunicado a la Asociación Nacional de Actores (ANDA) exigiendo que solventaran sus gastos.
Mediante las redes sociales, amigos y seguidores del artista han expresado su dolor por la pérdida. Se espera que Aguirre sea velado en la últimas horas.
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