La enfermedad pélvica inflamatoria (EPI) es una enfermedad que padecen en E.E.UU. aproximadamente más de un millón de mujeres cada año.
Es una enfermedad que se genera por el paso de bacterias que se encuentran en el tracto genital inferior de la mujer, es decir en la vagina y cuello uterino y que ascienden hasta llegar al útero, trompas de Falopio y ovarios, causando un proceso inflamatorio con diferentes grados de severidad.
¿Qué pasa si hay complicaciones?
En casos complicados puede hasta formar un absceso, llegando a ocasionar consecuencias graves para la paciente, tales como sepsis que ocurre cuando esa infección pélvica se esparce a todo el organismo convirtiéndose en una infección sistémica que puede incluso llegar a la muerte cuando no es atendida de forma adecuada y oportuna.
Esta enfermedad se asocia principalmente a enfermedades de transmisión sexual tales como la gonorrea y la clamidia.
Factores de riesgo
Tener relaciones sexuales sin uso de preservativo, inicio de vida sexual activa a edades tempranas, prácticas sexuales de riesgo, la promiscuidad o el tener una pareja sexual que tiene múltiples parejas sexuales y el uso del dispositivo intrauterino.
Uso adecuado de dispositivo intrauterino
En este punto respecto al uso del dispositivo intrauterino es importante mencionar varias cosas, para que no se estigmatice su uso, ya que es un excelente método de planificación familiar.
Es recomendable realizar un exudado cervicovaginal para asegurar que la paciente no tiene una infección vaginal para que al momento de colocarlo no haya riesgo de que dicha infección ascienda al útero.
Riesgo al usar duchas vaginales
De acuerdo con varias investigaciones, también se ha asociado el uso de duchas vaginales a la generación de esta enfermedad, ya que estas duchas pueden generar una proliferación bacteriana y por mecánica hacer que ascienda la infección de la vagina hacia el útero; es por eso que no se recomiendan las duchas vaginales.
¿Cómo saber si se tiene esta enfermedad pélvica inflamatoria?
La forma de identificar esta enfermedad es complicada, ya que en algunas ocasiones no da síntomas específicos. Pero es muy importante que si presentas algún dato de infección vaginal acudas con tu ginecólogo y recibas el tratamiento oportuno para evitar que avance la enfermedad.
Síntomas de enfermedad pélvica inflamatoria
Secreción vaginal anormal, dolor en la parte inferior del abdomen, cólicos, fiebre y escalofríos, náuseas, vómito, dolor durante las relaciones sexuales, dolor en la menstruación, entre otras.
Esta enfermedad de acuerdo con el Colegio Americano de Ginecología y Obstetricia se asocia a un 10% de casos de infertilidad, así mismo se asocia a embarazo ectópico y a un dolor pélvico crónico.
Tratamiento
El tratamiento depende de la severidad, cuando sólo se encuentra la infección en las trompas de Falopio se puede dar tratamiento médico ambulatorio, en caso de que progrese y se forme un absceso tubo-ovárico o pélvico, la enfermedad puede requerir hospitalización y de una operación para drenar el absceso, incluso manejo en terapia intensiva por el riesgo o la presencia de sepsis.
Es por esto la importancia de realizar revisiones periódicas en caso de presentar factores de riesgo para esta enfermedad y acudir a chequeos con tu ginecólogo. Tu salud está en tus manos.
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