Hay muchas razones por las cuales se puedes tener mal aliento. No cepillarse o no usar hilo dental frecuentemente puede provocar que las bacterias que se acumulan en la boca y entre los dientes produzcan mal olor. Otras causas pueden ser enfermedades de las encías, boca seca o caries, sinusitis u otros problemas con su nariz. Algunos alimentos como la cebolla o el ajo o fumar también producen mal olor.
El perejil es una planta famosa para decorar las comidas, pero es mucho más que eso. Es un alimento valioso nutricionalmente hablando ya que es rico en vitamina A y C, calcio y hierro. Pero lo más importante es que su alto contenido en clorofila (sustancia responsable del color verde de las plantas), lo hace un gran aliado para eliminar toxinas, mejorar la función digestiva, limpiar el colon y neutralizar los olores fuertes.
La clorofila es ingrediente activo de varias gomas de mascar (chicles) y otros productos comerciales para el mal aliento. Masticar unas ramitas de perejil crudo lentamente después de cada comida, es una manera fácil de obtener los beneficios de la clorofila y reducir la acción de las bacterias que son responsables de producir el mal aliento. También puedes sumergir las ramitas de perejil en vinagre para potenciar el efecto.
Otra opción es preparar un enjuague bucal a base de perejil, sólo necesitas poner a hervir agua (dos tazas), cuando alcance el punto de ebullición añade un manojo de perejil picado. Deja 10 minutos más al fuego y apaga. Revuelve constantemente mientras se enfría. Cuela y haz buches con este líquido al menos tres veces al día después de cada alimento.
La ingesta de perejil como condimento de tus alimentos, es una buena manera de aprovechar otras de sus propiedades. Entre ellas, su potencial como diurético para facilitar la eliminación de líquidos del organismo.
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