Un estudio con ratones insinúa una forma nueva y segura de contrarrestar las alergias

JUEVES, 18 de enero de 2023 (HealthDay News) -- ¿Eres alérgico a los cacahuates? ¿A los gatos? ¿Al polen?

Una nueva terapia dirigida podría tener el potencial de ayudar a una persona a evitar una reacción alérgica provocada por la fuente específica de su alergia, informan investigadores de la Universidad Northwestern.

Un estudio con ratones insinúa una forma nueva y segura de contrarrestar las alergias

La terapia utiliza nanopartículas para desactivar los mastocitos, que son las células inmunitarias responsables de las reacciones alérgicas inmediatas.

En un estudio con ratones, la terapia tuvo un éxito del 100 por ciento en la prevención de las respuestas alérgicas, según un informe publicado el 16 de enero en la revista Nature Nanotechnology.

En respuesta a un alérgeno, los mastocitos normalmente vierten bioquímicos llamados histaminas en el cuerpo.

Las histaminas, a su vez, provocan una respuesta inflamatoria que resulta en síntomas de alergia: picazón en la piel, estornudos, ojos llorosos y, en casos extremos, shock anafiláctico.

"Actualmente, no hay métodos disponibles para dirigirse específicamente a los mastocitos", dijo el investigador principal, Evan Scott, profesor de ingeniería biomédica e inmunología de la Northwestern.

"Todo lo que tenemos son medicamentos como antihistamínicos para tratar los síntomas, y esos no previenen las alergias. Contrarrestan los efectos de las histaminas después de que los mastocitos ya se hayan activado", añadió Scott en un comunicado de prensa de la universidad. "Si tuviéramos una forma de inactivar los mastocitos que responden a alérgenos específicos, podríamos detener las respuestas inmunitarias peligrosas en situaciones graves como la anafilaxia, así como en respuestas menos graves como las alergias estacionales".

Los mastocitos son más conocidos por causar respuestas alérgicas, pero no es práctico apagarlos todos porque desempeñan otras funciones importantes en el cuerpo, como regular el flujo sanguíneo y combatir los parásitos.

"Aunque algunos medicamentos están en desarrollo, actualmente no hay medicamentos aprobados por la FDA que inhiban o eliminen los mastocitos", señaló el coinvestigador, el Dr. Bruce Bochner, profesor de alergia e inmunología de la Universidad Northwestern. "Esto ha sido difícil principalmente porque los medicamentos que pueden afectar la activación o la supervivencia de los mastocitos también se dirigen a otras células además de los mastocitos y, por lo tanto, tienden a tener efectos secundarios no deseados debido a las influencias en otras células".

La nueva tecnología de nanopartículas tiene como objetivo desactivar mastocitos específicos relacionados con la alergia a través de un proceso de dos pasos, explicaron los investigadores.

Las nanopartículas están recubiertas de anticuerpos capaces de desactivar los mastocitos, y también transportan un alérgeno que corresponde a la alergia específica de una persona. Por ejemplo, para tratar la alergia al cacahuete contendría una proteína de cacahuete.

El alérgeno de la nanopartícula se une a los mastocitos precisos responsables de una alergia específica. Al mismo tiempo, los anticuerpos de la nanopartícula interactúan con los receptores de los mastocitos que inhiben su respuesta.

"Dadas estas dos señales contradictorias, el mastocitos decide que no debe activarse y debe dejar ese alérgeno en paz. Detiene selectivamente una respuesta a un alérgeno específico", dijo Scott. "La belleza de este enfoque es que no requiere matar o eliminar todos los mastocitos. Y, desde el punto de vista de la seguridad, si la nanopartícula se adhiere accidentalmente al tipo de célula equivocado, esa célula simplemente no responderá".

"Puede usar cualquier alérgeno que desee, y apagará selectivamente la respuesta a ese alérgeno", agregó Scott.

Para probar esta terapia, los investigadores desarrollaron ratones portadores de mastocitos humanos en sus tejidos. Expusieron a los ratones a un alérgeno y administraron la nanoterapia al mismo tiempo.

Ningún ratón experimentó shock anafiláctico y todos sobrevivieron.

"La forma más sencilla de monitorizar una respuesta alérgica es hacer un seguimiento de los cambios en la temperatura corporal", dijo Scott. "No vimos cambios en la temperatura. No hubo respuesta. Además, los ratones se mantuvieron sanos y no mostraron ningún signo externo de una reacción alérgica".

Sin embargo, los expertos señalan que la investigación con animales no siempre funciona en humanos, por lo que se necesitan más estudios.

A continuación, los investigadores planean explorar su terapia para tratar otras enfermedades relacionadas con los mastocitos, incluida una forma rara de cáncer de mastocitos llamada mastocitosis.

Más información

La Academia Americana de Alergia, Asma e Inmunología (American Academy of Allergy, Asthma and Immunology) ofrece más información sobre la activación de los mastocitos.

FUENTE: Universidad Northwestern, comunicado de prensa, 16 de enero de 2024

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