¿Podrían las luces brillantes del exterior en la noche aumentar el riesgo de accidente cerebrovascular?

MARTES, 26 de marzo de 2024 (HealthDay News) -- Las luces brillantes de la gran ciudad podrían parecer emocionantes, pero también podrían aumentar el riesgo de ACV de una persona, sugiere un estudio reciente.

Las luces artificiales brillantes que iluminan la noche parecen afectar al flujo sanguíneo al cerebro de formas que hacen que el ACV sea más probable, informan los investigadores.

¿Podrían las luces brillantes del exterior en la noche aumentar el riesgo de accidente cerebrovascular?

Las personas con los niveles más altos de exposición a la luz exterior por la noche tienen un 43% más de riesgo de enfermedades que afectan a los vasos sanguíneos del cerebro, según muestran los resultados.

Estos incluyen arterias obstruidas que bloquean el suministro de sangre al cerebro y sangrado en el cerebro, las dos causas principales de accidente cerebrovascular.

Basándonos en estos resultados, "aconsejamos a las personas, sobre todo a las que viven en áreas urbanas, que consideren reducir esa exposición para protegerse de su impacto potencialmente dañino", señaló en un comunicado de prensa el investigador Jian-Bing Wang , de la Facultad de Medicina de la Universidad de Zhejiang en Hangzhou, China.

El uso excesivo de luz artificial ha resultado en que cuatro quintas partes de la población mundial vivan en ambientes con contaminación lumínica, señalaron los investigadores en las notas de respaldo.

En el estudio, Wang y sus colaboradores analizaron datos de más de 28,300 adultos que vivían en China, evaluando su exposición a la luz nocturna exterior mediante imágenes satelitales que mapeaban la contaminación lumínica.

Estos adultos vivían en Ningbo, una importante ciudad portuaria e industrial en la costa este de China con una población de más de 8,2 millones de habitantes.

Durante seis años de seguimiento, de 2015 a 2021, los investigadores encontraron casi 1,300 casos de enfermedad de los vasos sanguíneos cerebrales, incluidos 777 accidentes cerebrovasculares provocados por arterias bloqueadas y 133 accidentes cerebrovasculares provocados por sangrado en el cerebro.

Los investigadores anotaron que la exposición continua a la luz brillante por la noche puede suprimir la producción de melatonina, una hormona que promueve el sueño.

Por lo tanto, las luces podrían estar contribuyendo al riesgo de ACV al perjudicar un buen sueño, señalaron los investigadores.

"Necesitamos desarrollar políticas y estrategias de prevención más efectivas para reducir la carga de enfermedad de factores ambientales como la contaminación lumínica y del aire, particularmente para las personas que viven en las áreas más densamente pobladas y contaminadas de todo el mundo", dijo Wang.

Los investigadores también encontraron que la contaminación atmosférica aumentaba el riesgo de ACV.

Las personas expuestas a los niveles más altos de contaminación por partículas en el aire, causadas por la quema de combustible, polvo o humo, tenían un riesgo de accidente cerebrovascular entre un 41% y un 50% mayor en comparación con las menos expuestas.

Las emisiones de óxido de nitrógeno del tráfico y de las centrales eléctricas industriales aumentaron el riesgo de ACV en un 31 por ciento en los que estaban más expuestos, añadieron los investigadores.

El nuevo estudio aparece en la revista Stroke.

Más información

La Clínica Cleveland ofrece más información sobre las enfermedades de los vasos sanguíneos del cerebro.

FUENTE: Asociación Americana del Corazón, comunicado de prensa, 25 de marzo de 2024

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