VIERNES, 29 de enero de 2021 (HealthDay News) -- Dos nuevas vacunas contra la COVID-19 muy esperadas, de Johnson & Johnson y Novavax, parecen frenar las infecciones en los lugares donde están circulando las variantes más contagiosas, muestran unos nuevos ensayos.
Pero hubo una excepción clave: ambas pierden una cantidad significativa de su poder de protección cuando se usan en los lugares donde circula la variante sudafricana.
La noticia es alarmante, dado que el jueves se reportaron los dos primeros casos conocidos en EE. UU. de infección con la variante sudafricana, en Carolina del Sur.
En la vacuna de una dosis de Johnson & Johnson, la tasa de eficacia se redujo de un robusto 72 por ciento en la rama del ensayo de Estados Unidos a un 57 por ciento en el ensayo realizado en Sudáfrica, donde la mayoría de los casos son provocados por la variante, que es altamente contagiosa.
Aun así, el Dr. Paul Stoffels, director científico de Johnson & Johnson, dijo que la compañía planifica seguir adelante con la solicitud de aprobación del uso de emergencia en Estados Unidos. "Esta es la vacuna contra la pandemia que puede hacer una diferencia con una sola dosis", declaró al The New York Times.
El ensayo de la vacuna de Novavax en Inglaterra tuvo mucho más éxito que su ensayo en Sudáfrica. La compañía dijo que su análisis inicial en Reino Unido mostró que, de 62 participantes que desarrollaron la enfermedad, 56 habían recibido un placebo y 6 habían recibido la vacuna. Se encontró que la variante británica más contagiosa había provocado alrededor de un 50 por ciento de los casos de ese ensayo, señaló Novavax.
Si esos resultados se sostienen en un ensayo clínico de mayor tamaño que se está realizando en Estados Unidos y México, que ha inscrito a alrededor de 16,000 personas y tiene una meta de 30,000, esto pondría a la vacuna de Moderna a la altura de las vacunas de Moderna y Pfizer, que se ha mostrado que tienen una efectividad de más o menos un 95 por ciento.
Pero el ensayo de Novavax en Sudáfrica, de tamaño más reducido, también encontró que la vacuna tenía una eficacia general de apenas un 49.4 por ciento. La compañía reportó que alrededor de un 6 por ciento de los participantes del ensayo eran VIH positivos, y que, entre los que no eran VIH positivos, la vacuna tuvo una eficacia del 60 por ciento.
Los ensayos de Novavax revelaron otro hecho preocupante: pareció que un tercio de los participantes de su ensayo sudafricano ya habían estado infectados con el coronavirus original, y algunas de esas personas se infectaron de nuevo, lo que sugiere que la inmunidad natural quizá no proteja del todo contra la variante sudafricana recién surgida.
'Preocupante'
Novavax dijo que ya está en conversaciones en Gran Bretaña para la autorización de su vacuna, y que podría presentar una solicitud similar en Estados Unidos en abril, cuando se prevén los resultados de su ensayo en EE. UU.
Otros desarrolladores de vacunas se han apresurado a determinar si sus vacunas seguirían siendo efectivas contra la variante sudafricana, y están diseñando nuevas versiones en caso de que el virus pueda violar la protección ofrecida por la vacuna, reportó el Times.
Stanley Erck, presidente y director ejecutivo de Novavax, dijo que los investigadores habían previsto que las variantes pudieran cambiar los resultados de los ensayos, pero "que el grado de cambio nos ha sorprendido a todos".
El ensayo sudafricano fue relativamente pequeño (con solo 4,400 voluntarios), y no se diseñó para arrojar un estimado preciso de cuándo protección provee la vacuna, reportó el Times. Aun así, la compañía dijo que pronto comenzará a evaluar una nueva vacuna diseñada para proteger de la problemática variante.
"Esto es realmente preocupante", declaró al Times el Dr. Peter Hotez, experto en vacunas del Colegio de Medicina Baylor e inventor de una vacuna contra el coronavirus. "Debemos haber vacunado a los estadounidenses a finales de primavera o inicios de verano, para tener alguna esperanza de prevenir que las variantes de Sudáfrica y Reino Unido se hagan con el control".
Otro experto señaló que los fabricantes de vacunas deben estar listos para dar un giro a sus vacunas, y cambiarlas según sea necesario.
"Este virus nos tira bolas curvas cada día, y creo que simplemente debemos estar preparados para esto y darnos cuenta de que quizá haya que actualizar a la primera generación de vacunas", declaró al Times el Dr. Jesse Goodman, profesor de medicina y enfermedades infecciosas de la Universidad de Georgetown.
Detectan la variante sudafricana de la COVID en Carolina del Sur
Dos residentes de Carolina del Sur que no habían viajado se han infectado con la variante sudafricana del coronavirus, que es altamente contagiosa, reportaron el jueves las autoridades de salud estatales.
La variante es quizá la más preocupante para los expertos en salud pública, porque podría tener cierta capacidad de evadir a los tratamientos de anticuerpos o las vacunas contra la COVID-19.
Estos son los primeros casos en Estados Unidos en que la variante B.1.351 está implicada, y la falta de viaje o de una conexión entre sí de los pacientes sugiere que la variante ya se está propagando en la comunidad, señalaron los expertos.
"La llegada de la variante [sudafricana] del SARS-CoV-2 a nuestro estado es un recordatorio importante para todos los habitantes de Carolina del Sur de que la lucha contra este letal virus dista mucho de haberse acabado", comentó en una declaración el Dr. Brannon Traxler, director interino de salud pública del Departamento de Control de la Salud y Ambiental del estado. "Hay más variantes de la COVID-19 de camino, y los suministros siguen siendo limitados. Todos debemos volver a comprometernos con la lucha, al reconocer que ahora todos estamos en primera línea. Estamos todos juntos en esto".
Las autoridades estatales no publicaron los nombres de las personas infectadas, y solo dijeron que uno es de Low Country, en la costa de Carolina del Sur, y el otro es de la parte noreste del estado.
Los científicos consideran que la variante B.1.351, que se identificó inicialmente en Sudáfrica en diciembre, es incluso más preocupante que la variante británica, a la que se ha dado más publicidad. Y a principios de semana, una variante brasileña más infecciosa se diagnosticó en un residente de Minnesota que había viajado a Brasil hacía poco.
Los expertos en salud pública habían temido que las variantes ya estuvieran en Estados Unidos, sin detectarse hasta ahora debido a una vigilancia limitada. Se están realizando esfuerzos por aumentar la vigilancia mediante asociaciones entre los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU., instituciones académicas y compañías privadas.
"En este momento, no tenemos evidencias de que esta variante [sudafricana] provoque una enfermedad más grave", apuntaron los CDC en una declaración publicada el jueves. Pero "al igual que con las variantes de Reino Unido y Brasil, los datos preliminares sugieren que esta variante quizá se propague con una mayor facilidad y rapidez que otras variantes".
La variante B.1.351 también contiene una mutación clave que parece permitir al virus eludir parte del poder de los tratamientos de anticuerpos y vacunas. Al menos una terapia de anticuerpos no funciona contra la nueva variante, y los estudios de laboratorio encontraron hace poco que la mutación de la variante reduce la capacidad de los anticuerpos inducidos por la vacuna de neutralizar el virus. Está por verse si esto significa una reducción en la efectividad de las vacunas, pero los fabricantes de las vacunas ya se están apresurando a producir nuevas vacunas y dosis de "refuerzo" para manejar a las nuevas mutaciones.
El lunes, Moderna anunció que ya está trabajando para desarrollar e iniciar pruebas en humanos de una vacuna específica para la variante sudafricana, como medida de precaución. La compañía también evaluará una tercera dosis de refuerzo de su vacuna actual, para ver si reforzar la inmunidad contra el virus original puede proteger de la nueva variante, reportó el Washington Post.
El surgimiento de variantes del coronavirus ha hecho que la campaña para vacunar a todos los estadounidenses cobre incluso más urgencia. Hasta el viernes, más de 26.2 millones de estadounidenses se habían vacunado, mientras que se han distribuido más de 48.4 millones de dosis, según los CDC. Más de 4.3 millones de personas han recibido su segunda dosis.
Un azote global
El viernes, el conteo de casos de coronavirus de EE. UU. había superado los 25.8 millones, mientras que el número de muertes superó las 433,000, según un conteo del Times. El viernes, los cinco estados con más casos de infecciones con el coronavirus eran: California, con casi 3.3 millones de casos; Texas, con más de 2.3 millones de casos; Florida, con cerca de 1.7 millones de casos; Nueva York, con casi 1.4 millones de casos; e Illinois, con más de 1.1 millones de casos.
Frenar la propagación del coronavirus en el resto del mundo sigue resultando difícil.
En India, el número de casos de coronavirus superó los 10.7 millones el viernes, mostró un conteo de la Universidad de Johns Hopkins. El viernes, Brasil superó los 9 millones de casos y las 221,000 muertes, mostró el conteo de la Hopkins.
En todo el mundo, el número de infecciones reportadas había superado los 10.5 millones el Viernes, con casi 2,2 millones de muertes registradas, según el conteo de la Hopkins.
Más información
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. ofrecen más información sobre el nuevo coronavirus.
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com
FUENTES: Washington Post;The New York Times; Associated Press
