Las personas con reflujo crónico no enfrentan un riesgo mayor de cáncer de esófago

LUNES, 18 de septiembre de 2023 (HealthDay News) — Contradiciendo la sabiduría convencional, un extenso estudio sueco descubre que la mayoría de las personas con reflujo gastroesofágico crónico, no tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de esófago.

"Estudios anteriores han demostrado que los individuos con síntomas repetidos de reflujo - como acidez y/o regurgitación - tienen propensión a desarrollar cáncer esofágico", dijo el investigador principal, el Dr. Dag Holmberg, investigador postdoctoral en el Instituto Karolinska en Estocolmo.

Las personas con reflujo crónico no enfrentan un riesgo mayor de cáncer de esófago

"Descubrimos que estos individuos tenían el mismo riesgo de cáncer que la población general", agregó, y "los resultados fueron claros en prácticamente todos los aspectos. No había asociación".

Se ha pensado durante mucho tiempo que el reflujo gastroesofágico — también conocido como ERGE (enfermedad por reflujo gastroesofágico) — aumenta el riesgo de cáncer, debido a su potencial de lesionar el revestimiento del esófago, el largo tubo que transporta alimentos y bebidas de la garganta al estómago, explicó Holmberg.

Con el tiempo, este proceso, conocido como esofagitis, hace que el tejido en el tubo se vuelva más resistente al ácido. Cuando eso ocurre, señaló, investigaciones previas han demostrado "un riesgo claramente aumentado de desarrollar cáncer de esófago".

Pero, dijo Holmberg, la mayoría de los pacientes con reflujo tienen un revestimiento esofágico normal sin signos de lesión. Él y su equipo querían ver si la presunción de que los pacientes con ERGE tienen un mayor riesgo de cáncer pudiese ser incorrecta.

Para saber más, los investigadores analizaron la información del registro nacional de salud de dos grupos de pacientes en Suecia, Dinamarca y Finlandia.

Los pacientes de ambos grupos habían sido tratados por enfermedad por reflujo gastroesofágico entre 1987 y 2019, ya fuera en un hospital o en un consultorio externo.

El primer grupo incluyó a más de 285,000 hombres y mujeres con reflujo, pero sin evidencia de esofagitis cuando se examinaron con un endoscopio.

El segundo grupo incluyó a aproximadamente 200,000 pacientes con evidencia de lesión esofágica.

Ambos grupos fueron seguidos durante 31 años. Los casos de cáncer de esófago se compararon con las tasas en la población general durante el mismo período.

Entre el grupo de ERGE con lesión, los investigadores sí encontraron un mayor riesgo de cáncer de esófago.

Pero no encontraron ningún dato relacionado con un mayor riesgo entre los pacientes con ERGE sin lesión esofágica, excepto por un aumento "muy moderado" del riesgo en el caso de las mujeres.

"Clínicamente, no creo que tenga mucha relevancia", dijo Holmberg. "El riesgo de cáncer de esófago en las mujeres es extremadamente bajo, y alrededor del 85% de todos los tumores se desarrollan en hombres. Y dado que el aumento del riesgo fue muy moderado, no justifica un seguimiento adicional".

¿La conclusión tranquilizadora?

"Los pacientes con reflujo y con una endoscopia esofágica normal no tienen que preocuparse por el cáncer de esófago en el futuro", dijo. "Su riesgo no está elevado".

Los hallazgos se publicaron el 13 de septiembre en la revista médica de Inglaterra, BMJ por sus siglas en inglés.

Todo esto podría ser una noticia muy alentadora para la mayoría de los pacientes con ERGE que no experimentan lesiones esofágicas, dijo Connie Diekman, consultora de alimentos y nutrición en St. Louis y expresidenta de la Academia de Nutrición y Dietética.

"He tratado a muchas personas con ERGE", dijo Diekman, añadiendo que el objetivo siempre ha sido prevenir daño en el esófago dado que la enfermedad por reflujo gastroesofágico ha sido vista durante mucho tiempo como un riesgo potencial para el cáncer.

Si el estudio sueco resulta ser preciso, dijo Diekman, significaría que una vez que una evaluación endoscópica inicial confirma que un paciente con ERGE no tiene signos de daño en el esófago, es posible que no se necesiten endoscopias de rutina ulteriores.

"Obviamente, esto sería un ahorro en costos y un alivio para los pacientes", dijo.

Diekman dijo que los pacientes deben discutir sus riesgos con sus médicos y luego usar esa información para tomar las mejores decisiones para su atención médica.


Más información

Aprenda más sobre las relaciones entre las agruras y el cáncer en el Centro de Cáncer Memorial Sloan Kettering.

FUENTES: Dag Holmberg, MD, PhD, médico residente, cirugía, Hospital Universitario Karolinska e investigador postdoctoral, Instituto Karolinska, Estocolmo, Suecia; Connie Diekman, MEd, RD, LD, consultora de alimentos y nutrición, St. Louis y expresidenta, Academy of Nutrition and Dietetics; BMJ, 13 de septiembre de 2023.

Comparte tu opinión