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Aumentan las convulsiones graves, sobre todo entre las minorías

LUNES, 5 de diciembre de 2022 (HealthDay News) -- Un creciente número de estadounidenses sufren unas convulsiones prolongadas y que ponen sus vidas en peligro, conocidas como estatus epiléptico, y las personas negras son el doble de propensas a experimentar estas convulsiones que las personas blancas.

Estos son los principales hallazgos de una nueva investigación que exploró las hospitalizaciones por estatus epiléptico entre 2010 y 2019 en todo Estados Unidos. El estatus epiléptico se refiere a unas convulsiones que duran más de 5 minutos. Algunas personas podrían experimentar convulsiones en este estado, mientras que otras podrían parecer confundidas o que están soñando despiertas. El estatus epiléptico es una emergencia, y requiere tratamiento en el hospital.

Aumentan las convulsiones graves, sobre todo entre las minorías

El estudio no se diseñó para decir el motivo de que estas convulsiones graves estén en aumento, pero los investigadores tienen sus teorías. "Quizá se relacione con varias causas, por ejemplo las definiciones cambiantes de estatus epiléptico con el tiempo", señaló la autora del estudio, la Dra. Gabriela Tantillo. (En una época, solo las convulsiones que duraban más de 20 minutos se consideraban como estatus epiléptico).

Además, "hay un mayor reconocimiento de las convulsiones, lo que incluye los ataques no convulsivos, en la comunidad médica y en el público en general", señaló Tantillo, profesora asistente de neurología del Colegio de Medicina Baylor, en Houston.

En el estudio, los investigadores revisaron el estatus epiléptico en 490,000 hospitalizaciones. Estas tasas aumentaron de forma significativa a lo largo del periodo del estudio, sobre todo entre las minorías.

Además, las minorías que experimentaron el estatus epiléptico fueron más propensas a necesitar tratamientos avanzados, entre ellos un tubo para la respiración o un tubo para la alimentación.

"Me sorprendió ver que, lamentablemente, las disparidades en la incidencia del estatus epiléptico en las minorías han persistido, e incluso se han ampliado, de 2010 a 2019, a pesar de una mayor concienciación sobre el estatus epiléptico y las convulsiones, y cambios en el seguro, con una creciente cobertura con el tiempo", comentó Tantillo.

Los adultos mayores tenían seis veces más probabilidades de morir durante la hospitalización por el estatus epiléptico, y era más probable que requirieran tubos de respiración o alimentación, en comparación con las personas más jóvenes con estas convulsiones, encontró el estudio.

Los investigadores también anotaron que los monitores de electroencefalograma (EEG), que registran la actividad eléctrica en el cerebro, estaban más disponibles para las personas con unos ingresos más altos, o las tratadas en hospitales académicos urbanos.

Hay cosas que ayudan a hacer que la atención para las personas con estatus epiléptico sea más equitativa, aseguró Tantillo. "Debemos comprender las causas subyacentes del estatus epiléptico, ya que difieren según los factores sociodemográficos, lo que requiere más investigación e inversión del gobierno, los grupos comunitarios y la filantropía", anotó.

El estatus epiléptico puede ser resultado de una epilepsia descontrolada, un sangrado en el cerebro, un tumor cerebral, o una enfermedad subyacente grave, como la meningitis, explicó.

"En cuanto a los casos de estatus epiléptico que son potencialmente prevenibles, por ejemplo en las personas con epilepsia, mejorar los conocimientos básicos de salud y reducir el estigma asociado con las convulsiones en la comunidad ayudaría a que más pacientes obtengan el tratamiento que necesitan", enfatizó Tantillo.

Las minorías en el estudio también eran menos propensas a morir por el estatus epiléptico. Esto podría deberse a que a las personas con estatus epiléptico debido a unos niveles bajos de anticonvulsivos les va mejor que a sus contrapartes que tienen la afección por otras causas, como por ejemplo un sangrado cerebral o falta de oxígeno en el cerebro.

Ampliar el acceso a la atención ambulatoria también podría resolver algunas de estas brechas, planteó Tantillo.

Además, trabajar para diversificar la fuerza laboral médica en la neurología podría también mejorar la confianza y la comunicación entre paciente y médico, y reducir los sesgos implícitos y la desigualdad de la salud con el tiempo, sugirió Tantillo.

"Los hallazgos son terribles, pero no sorprendentes", lamentó el Dr. Daniel Lowenstein, profesor y vicepresidente de neurología de la Universidad de California, en San Francisco. "El panorama general que revela es que, una vez más, existen disparidades en el sistema de atención de la salud basadas en la raza y la clase socioeconómica".

Estas disparidades se observan en el diagnóstico y el tratamiento de muchas enfermedades y afecciones, anotó.

Tratar el estatus epiléptico implica intervenir lo antes posible con una benzodiacepina u otro anticonvulsivo, dijo Lowenstein, que no participó en el nuevo estudio. Qué tan bien le va a una persona se basa en la causa subyacente, dado que algunas causas son más tratables que otras.

Los hallazgos se presentaron el viernes en la reunión anual de la Sociedad Americana de la Epilepsia (American Epilepsy Society), en Nashville. Los hallazgos presentados en reuniones médicas deben considerarse preliminares hasta que se publiquen en una revista revisada por profesionales.

Más información

La Epilepsy Foundation ofrece más información sobre el estatus epiléptico.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

FUENTES: Gabriela Tantillo, MD, MPH, assistant professor, neurology, Baylor College of Medicine, Houston; Daniel Lowenstein, MD, Robert B. and Ellinor Aird Professor, and vice chair, neurology, University of California, San Francisco; presentation, American Epilepsy Society, annual meeting, Dec. 2 to 6, 2022

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