P. He estado tomando laxantes durante seis meses para desintoxicarme. ¿Esto tiene algún peligro?
R.Por siglos se ha asociado la limpieza del intestino con la salud y fue una costumbre generalizada administrar los llamados “purgantes”, los cuales, por varias generaciones, se administraron a los niños una o dos veces al año en diversas partes del mundo. Una de las razones para explicar esa costumbre era lo común de las parasitosis intestinales, las cuales se creía que se curaban de esa forma porque era evidente que muchos parásitos salían luego de la administración de esos productos. Otra de las razones más comúnmente referidas para justificar una limpieza intestinal periódica es la supuesta necesidad de eliminar las toxinas derivadas de una alimentación inapropiada y las que produce nuestro cuerpo.
La realidad es que el organismo tiene sus propios mecanismos de detoxificación, uno de los cuales es la eliminación por las heces de los productos de desecho que ya no se necesitan. Lo recomendable es adquirir buenos hábitos intestinales, lo cual significa acostumbrar a nuestro cuerpo a sentir necesidad de ir al baño todos los días y, de ser posible, más o menos a la misma hora. Si hacemos esto, como sucede a la mayoría de la gente, no tendremos necesidad de recurrir a ningún producto medicamentoso y bastará con consumir alimentos con alto contenido de fibra y suficiente agua a lo largo del día.
Entre los riesgos derivados del consumo prolongado de laxantes están:
- Pérdida de sustancias nutritivas, sobre todo vitaminas y minerales, que se van con las heces antes de que nuestro cuerpo pueda absorberlas. Las deficiencias de esos nutrientes pueden afectar seriamente la salud.
- Pérdida de la capacidad de funcionamiento normal del intestino, ya que éste se acostumbra a la “ayuda” del laxante, lo cual crea una dependencia indeseable de esos productos.
Atentamente,
Dr. Eleazar Lara-Pantin
