Las pestañas son consideradas un signo de femineidad, ya que son muy sugerentes y le dan un buen marco a la mirada. Más allá de su efecto estético, sirven para proteger al ojo de que ingresen partículas o sustancias extrañas y puedan dañarlo.
Algunos productos para las pestañas registrados que se venden en el mercado están testeados oftalmológicamente y cuando corresponda puedes individualizar los aptos para ojos sensibles, los antialergícos y los especiales para personas que utilizan lentes de contacto. 
Puntos clave
El cepillo aplicador del rimel es muy importante a la hora de obtener los resultados deseados, ya que será el que permita esparcir el producto con facilidad desde la base de las pestañas, e impedir que éstas queden pegoteadas o con grumos.
Algunas marcas proveen un cepillo doble, que en un extremo puede ser esponjoso o con forma de pequeña espátula para distribuir el producto, y en el otro contiene cerdas para definir el volumen, separar las pestañas y dar la curvatura.
Hay también cepillos de un tamaño mayor al estándar para lograr pestañas más arqueadas y otros que combinan cerdas de distintos largos, unas para aplicar el producto y otras para separar las pestañas y dar volumen simultáneamente.
Cómo lograr efectos impactantes
Para lograr un efecto "pestañas postizas" existe un producto cuya fórmula contiene fibras de seda artificial que se adhieren sobre una capa de máscara recién aplicada.
Gracias a estas fibras, las pestañas se alargan y ganan volumen, y el producto se debe aplicar entre dos capas de máscara incolora o negra, según sea el efecto que se quiera lograr.
Cómo aplicarlo
En el momento de la aplicación se recomienda bajar la cabeza para evitar que alguna fibra pueda ingresar en el ojo.
Para obtener pestañas densas y numerosas se puede optar por una máscara con pro-keratina, que penetra en el interior de las pestañas y sus aminoácidos repararan paulatinamente la fibra capilar.
Otros productos tienen fórmulas con colágeno que se funde con las pestañas aportando más volumen.
Las pestañas largas se pueden conseguir aplicando una sola capa de rimel pero procurando recorrer cada pelo desde la base hasta la punta.
Para este efecto no es necesario aplicar máscara con color; una incolora puede ser adecuada para tener longitud sin recargar la mirada con la adición de pigmentación.
Un rimel para cada ojo
Las mujeres que tienen ojos claros pueden optar por el rimel de color azul o verde, que indudablemente resaltará el color natural de sus ojos. Otras opciones de máscaras son de color negro, gris, marrón, celeste, verde, transparente y con brillo en color plata.
Cómo maquillar las pestañas
Al aplicar la máscara de pestañas es necesario levantar bien la barbilla para no manchar los párpados con las puntas ya pintadas.
El secreto de un buen resultado reside en colocar el cepillo en la raíz de las pestañas y deslizarlo después hacia las puntas.
Una sola capa basta para realzarlas, pero se puede intensificar el efecto con una segunda aplicación, dejando secar la máscara entre cada una.
Para tener en cuenta
- Demaquillar las pestañas antes de acostarse es fundamental, y los más convenientes son los productos acuosos y no grasos capaces de eliminar todo tipo de máscara, incluso aquellas resistentes al agua. Son aptos para ojos sensibles e impiden que las pestañas se ajen y a la vez las limpian y acondicionan.
- No conviene abusar de los productos a prueba de agua o de larga duración, ya que endurecen mucho las pestañas y puede provocar que éstas se quiebren. Este tipo de cosméticos son difíciles de remover, agreden mucho la delicada raíz de las pestañas y hasta se puede llegar a dañar el folículo e inhibir su crecimiento.
- Es conveniente renovar cada seis meses los cosméticos para mantener los ojos sanos. Se evita así una posible contaminación con gérmenes que pueden provocar infecciones.
- Hay que adecuar la cantidad de maquillaje según la hora del día y la ocasión. Un maquillaje demasiado recargado puede llegar a agregar años.
- Para las mujeres maduras no es conveniente utilizar rimel negro ya que endurece mucho la mirada.
