Para aliviar los síntomas de la gripe y los resfriados comunes, es reconfortante tomar infusiones calientes como té con limón y miel, y la infaltable sopa de pollo cuya receta se hereda en las familias como parte de la cultura.
Los presuntos beneficios de la sopa de pollo vienen desde la antigüedad, cuando el médico Moshe Ben Maimon la recomendó para disminuir las molestias del resfriado en sus escritos del siglo XII. Y desde entonces, las recetas para preparar este caldo tibio “sanador” han sido transmitidas durante varias generaciones y están rodeadas de un halo casi mágico.
¿Tiene algún efecto este alimento o es un mito? Los científicos dicen que puede ayudarte, y explican las razones.
La explicación de sus poderes
En un estudio sobre la relación entre alimentos e influenza, investigadores del Centro Médico de la Universidad de Nebraska, en Omaha, EE.UU. analizaron los componentes principales de la tradicional sopa de pollo, y hallaron que realmente tiene propiedades antiinflamatorias que ayudan a aliviar los síntomas y acortar las infecciones del tracto respiratorio superior de la gripe y resfriados.
El doctor Stephen Rennard, experto en enfermedades pulmonares y líder del estudio, explicó que frente a la gripe o resfriado se produce un efecto inflamatorio que incrementa la producción de mucosa, lo que causa los efectos secundarios de congestión, tos, dolor de garganta y moco.
Para comprobar los efectos de esta sopa y su influencia en el organismo, Rennard estudió tres lotes de sopa de pollo tradicional de la abuela, que básicamente incluye pollo, cebollas, batatas, chirivías, nabos, zanahorias, tallos de apio, perejil, sal y pimienta.
Él examinó si el movimiento de los neutrófilos -el glóbulo blanco más común en la sangre que defiende al cuerpo contra la infección- sería bloqueado o reducido por la sopa de pollo. Se cree que la reducción del movimiento de los neutrófilos podría disminuir la actividad en el tracto respiratorio superior que causa los síntomas del resfriado. Y los resultados encontraron eso, que la sopa reduce la actividad de estos agentes.
La “comida confort”
Para cuando estás enfermo, la sopa de pollo, afirma Rennard, es la "comida confort" por excelencia: reduce la congestión, provee la hidratación necesaria para luchar contra un estado gripal, y sus vapores ayudan a abrir las vías respiratorias.
Al realizar el estudio -publicado en Chest, la revista del American College of Physicians- los investigadores analizaron 13 marcas de sopas de pollo enlatadas, y hallaron que también cumplían con los efectos de la sopa casera sobre la gripe.
¿Por qué sopa de pollo y no otra? Los científicos creen que esta combinación de alimentos, especialmente la adición del pollo, es la que logra el efecto antiinflamatorio que alivia la gripe. Otros estudios del Instituto del Corazón, la Sangre y el Pulmón (NCBI) y de la Clínica Mayo, avalan la teoría de las bondades de esta tradicional sopa.