- 1
- 2
- 3
- 4
- 5
- 6
- 7
Uso del medidor de flujo espiratorio máximo (Primera parte)
El medidor de flujo espiratorio máximo ayuda a verificar el grado de control del asma.
Se lo debe usar a diario y mantener un registro de los resultados para ayudar al médico a conocer el asma del paciente. También puede ayudar a determinar si el asma ha empeorado incluso antes de que se presenten los síntomas.
Uso del medidor de flujo espiratorio máximo (Segunda parte)
Primero, mueva el marcador a la parte inferior de la escala numerada.
Uso del medidor de flujo espiratorio máximo (Tercera parte)
Ponerse de pie derecho con la cabeza hacia arriba e inhalar profundo. Llenar los pulmones completamente. (El estar de pie ayuda a que llegue más aire a los pulmones).
Uso del medidor de flujo espiratorio máximo (Cuarta parte)
Ubicar la boquilla dentro de la boca, entre los dientes. Cerrar los labios alrededor de ésta. No colocar la lengua dentro del orificio ni bloquear la ventilación en la parte posterior.
Uso del medidor de flujo espiratorio máximo (Quinta parte)
Exhalar tan fuerte y rápido como sea posible. La intención es mover el marcador tanto como se pueda con la exhalación, así que es preciso concentrarse en exhalar fuerte y rápido.
Uso del medidor de flujo espiratorio máximo (Sexta parte)
Mover el marcador de regreso a la parte inferior y repetir estos pasos dos veces más. Si se tose o comete una equivocación, no se debe incluir dicho intento como uno de sus tres intentos.
Registrar los tres números mayores del flujo espiratorio máximo a diario.
Uso del medidor de flujo espiratorio máximo (Séptima parte)
Determinar cuál zona corresponde con el puntaje más alto. Seguir el plan que se desarrolló junto con el médico para la zona apropiada.
Si el mejor esfuerzo se encuentra en la zona roja, tomar de manera inmediata el medicamento de alivio y llamar al médico o acudir a una sala de urgencias.