Las migrañas son mucho más que un dolor de cabeza. La sensación es tan fuerte e intensa que se compara al dolor que produce una lesión y, si no se atiende, puede durar entre cuatro y 72 horas. Aunque hay fármacos que ayudan a tratarlas, identificarlas y prevenirlas puede todavía ser más efectivo.
Solo en Estados Unidos se estima que hay 37 millones de personas con migrañas, según los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por su sigla en inglés). Además de dolor, causan debilidad, náuseas, susceptibilidad a la luz y al sonido y afectan tanto a niños como a adultos (las mujeres son tres veces más propensas a padecerlas).
Recientemente se aprobó una nueva clase de medicamentos para tratarlas. Se llama Aimovig y reduce la frecuencia de las migrañas entre las personas gravemente afectadas, pero no previene estos episodios por completo.
Especialistas de la Clínica Mayo explican que saber cómo controlar el dolor de la migraña a través de medidas relacionadas con el estilo de vida y con el comportamiento, además de los medicamentos, muchas veces puede ser la forma más eficaz de tratarlas. Pero es importante aprender a reconocer sus señales.
Algunas personas experimentan disturbios visuales justo antes del comienzo del dolor de cabeza, como ver puntos, luces que parpadean o una mancha negra. Si aún no se ha identificado una señal que indique que la migraña está por venir, se puede llevar un registro anotando lo que se hacía antes de que comenzara, cuánto duró y qué se comió ese día.
Los hábitos alimentarios y el estrés pueden ser desencadenantes. Si se han identificado comidas asociadas al dolor, deben evitarse, así como el ayuno (aumenta el riesgo). El estrés es imposible de evitar, pero se puede tratar de controlar incorporando tareas relajantes a la rutina diaria y haciendo actividades físicas ligeras.
Vivir con migrañas es un desafío diario, pero tener un estilo de vida saludable puede ayudar.
Para prevenir ataques intensos
- Ante el primer signo de migraña, deja de hacer tus actividades habituales si es posible.
- Apaga las luces de su habitación, relájate y trata de dormir.
- Prueba con terapia de temperatura, aplicando compresas frías o calientes en la cabeza o el cuello. Las frías tienen un efecto anestésico que podría atenuar la sensación de dolor, las calientes pueden relajar los músculos tensos.
- Toma una bebida con cafeína. En pequeñas cantidades, puede aliviar el dolor de la migraña en las primeras etapas o mejorar los efectos del paracetamol y de la aspirina.
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